Las cifras y las sensaciones consolidan la IV Feria de la Tapa y el Comercio

Picassent ha celebrado este fin de semana la IV edición de la Feria de la Tapa y del Comercio. Un total de 31 empresas, (19 comercios y 12 del sector hostelero), han estado presentes en el recinto ferial ubicado en la Plaza del Mercado y en la calle Gómez Ferrer para dar a conocer y probar sus productos con, según ha manifestado la alcaldesa del municipio, «Tapas variadas y para todos los gustos que han deleitado a los paladares de las miles de personas que se han acercado para disfrutar de la gastronomía más nuestra, a la vez que también se ha contribuido a potenciar el comercio de proximidad, tan imprescindible para el tejido económico de nuestro pueblo».

De hecho, y atendiendo a las sensibilidades de la Asociación de Comerciantes y Servicios de Picassent, este año se ha optado por una zona comercial más ancha y en la calle Gómez Ferrer, "que ha gustado y mucho a los comerciantes participantes y que nos sirve como impulso para trabajar conjuntamente con el Ayuntamiento de Picassent para hacer un comercio más fuerte y con más posibilidades", ha destacado Vanessa Fortuny, en una entrevista en la emisora pública local, Radio l'Om.

En la misma conversación, y según informó el medio local, "Las cifras de la Feria de la Tapa han sido mejores respecto a 2017 y se ha llegado a una cantidad aproximada de 18.000 euros, con una inversión además aportada por el Ayuntamiento de Picassent en materia de logística y montaje de casetas de 25.000 euros", según confirmaba Mónica Olguín, concejala de Comercio.

Además, durante estos tres días, se han llevado a cabo talleres y actividades complementarias con algunos de los comercios participantes, como por ejemplo scrapbooking, globoflexia, castillos hichables, disfraces infantiles y la presentación y firma de libros de autores locales como Vicent Dasí y Andrés Sandemetrio, y todo, encuadrado en las Fiestas de la Milagrosa que han aportado música, desfile de Moros y Cristianos, dansaes y los tradicionales actos religiosos en un fin de semana festivo y de intensa participación ciudadana en Picassent.