Siete bomberos han tenido que ser atendidos por golpes de calor en el incendio en Azuébar
Las altas temperaturas y el viento de poniente no acompañan para poner fin a las llamas que devastan la Sierra de Espadán, aunque evoluciona favorablemente
El incendio en la sierra de Espadán de Azuébar parece no tener fin. El calor sofocante debido a las altas temperaturas de esta ola de calor y el viento de poniente se lo están poniendo muy difícil a todos los operativos que trabajan para acabar con las llamas en este paraje natural.
Un total de siete bomberos han tenido que ser atendidos por los servicios médicos debido a golpes de calor: tres efectivos de la Unidad Militar de Emergencias, dos de la Asociación de Trabajadores de las BRIF y dos bomberos forestales de Emergencias de la Generalitat. Se está habilitando un hospital de campaña para dar respuesta sanitaria a estos casos.
Gracias al trabajo de estos profesionales bajo el calor sofocante, el incendio evoluciona favorablemente, en vías de ser estabilizado. Cabe recordar, que la madrugada de este domingo se ha tenido que evacuar a la población de Azuébar por prevención de la proximidad del fuego y debido al trabajo de los bomberos, ya pueden volver a sus casas sin peligro. La evolución del incendio es favorable y las condiciones meteorológicas óptimas para mañana.
La consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha visitado hoy el Puesto de Mando Avanzado (PMA) para conocer cuál era la situación. “El incendio forestal de Azuébar afecta, con carácter provisional y en una primera estimación, unas 500 hectáreas”, ha anunciado la consellera Bravo.
La Unidad de Análisis de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica ha sobrevolado la zona para evaluar el perímetro y hacer una nueva estimación de hectáreas quemadas y puntos calientes.
El Consorcio Provincial de Bomberos de Castellónno se encuentra solo en su batalla contra el fuego. Bajo sus instrucciones están actualmente trabajando efectivos de bomberos forestales de la Generalitat, la Unidad Militar de Emergencias (UME) y los bomberos municipales de Castellón.
Las llamas se desatoran el pasado sábado a última hora de la tarde debido a un rayo caído en un alcornoque de las tormentas secas que se produjeron en la zona.