Primera víctima política en el Consell por la muerte de diez burros en el Desert de les Palmes
Desde la oposición piden la dimisión de la consellera Mireia Mollà para quien “no ha habido una buena tutela del proyecto”
La decisión de la conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica de usar burros antiincendios en el Desert de les Palmes, en Benicàssim, se ha llevado por delante a la primera víctima política, aunque desde la oposición piden dimisión de la consellera Mireia Mollà.
El director general de Medio Natural, Benjamín Pérez, ha presentado hoy su dimisión por lo sucedido. Así lo ha anunciado la consellera Mollà en una rueda de prensa en la que ha explicado las acciones llevadas a cabo por su departamento para esclarecer los hechos. De hecho, se ha abierto un expediente informativo cuyas conclusiones llevan también a interponer una denuncia ante la Guardia Civil.
Mollà quiere transparencia en los hechos y ha registrado una solicitud en Les Corts para comparecer e informar de lo sucedido.
Según ha explicado la consellera, tras las primeras investigaciones, existen “indicios” de que la “acción humana” ha podido intervenir en la muerte de diez de los 50 burros antiincendios. Y es que se ha cortado varias veces la valla que los cercaba y existe constancia de una denuncia de “amenaza de muerte” a burros de una finca situada cerca del grupo de los animales fallecidos.
Así se han sucedido los hechos
La situación saltaba a la luz a través de las redes sociales cuando el pasado 13 de octubre se mostraba la foto de un burro que podría estar desnutrido, aunque este animal no formaba parte del grupo antiincendios. Es en ese momento, según Mollà, cuando pide explicaciones.
Al día siguiente, la secretaria autonómica convocó a una reunión al director del Parque y a los responsables de la Dirección General de Medio Natural y solicitó un informe que fue remitido el día 18. El martes 19 la consellera, a la vista del informe, encarga la apertura de un expediente informativo para recabar la documentación existente y comprobar el estado de los animales.
No obstante, no fue hasta el 22 de septiembre cuando el director del Parque Natural comunicó a la jefa de servicio de la Dirección General del Medio Natural la situación. Ya habían fallecido ocho animales y no existía denuncia ante la Guardia Civil. Sin embargo, “no se trasladó a ningún órgano superior”, según la consellera.
Días después, el 8 de octubre, el director del Desert de les Palmes se ponía en contacto por segunda ocasión a la jefa de servicio y al director general, ya dimitido, para comunicarles que tras la muerte de una decena de burros se ponía fin a esta experiencia. Según Mollà, tampoco en esta ocasión se trasladó información a ningún órgano superior.
El proyecto de ganadería extensiva, impulsado por la Dirección del Desert de les Palmes, comenzó el día 4 de agosto. El 22 de septiembre el director del Parque informó, por primera vez de manera oficial a los servicios centrales de la Conselleria, de la muerte de 8 de los asnos que formaban parte de la experiencia. A esta comunicación le siguió una segunda, el 8 de octubre, que informaba del fin del proyecto y que entre los destinatarios incluyó al director general. La información no se trasladó a órganos superiores.
Mollà: “No estuvo tutelada adecuadamente”
Esta mañana Mollà, acompañada de la secretaria autonómica, Paula Tuzón, y del subsecretario de la Conselleria, Alfonso Puncel, ha explicado las conclusiones preliminares del expediente informativo que la administración abrió el pasado 19 de octubre.
Mireia Mollà ha asegurado que “no estuvo tutelada adecuadamente” y señala la detección de elementos vinculados a la naturaleza y a la acción humana como desencadenantes de una afección multifactor, de acuerdo con las primeras tesis de los veterinarios.
La consellera ha anunciado que denunciará las actuaciones, de supuesto acoso animal, a la Guardia Civil. “Si ha habido una autoría, con mayor o menor incidencia sobre el estado natural, es necesario que entren las autoridades correspondientes”.
Durante su intervención, Mollà ha indicado que el expediente ha desvelado la existencia de una denuncia previa, por parte de otro propietario en una parcela próxima, por amenazas a su explotación de asnos.
Asimismo, la titular de Agricultura ha explicado que ha aceptado la dimisión del director general de Medio Natural, Benjamín Pérez, tras conocerse las conclusiones preliminares del expediente informativo.
La consellera también ha avanzado que no descarta la apertura de expedientes administrativos a otras personas que hayan podido actuar de manera inadecuada, a tenor de los hechos instruidos.
La oposición apunta a Mollà
Desde la oposición apuntan a Mireia Mollà como responsable. Así el diputado de Ciudadanos en Les Corts, Eduardo del Pozo, ha considerado “insuficiente” la dimisión del director general de Medi Natural del Consell, Benjamín Pérez.
Además asegura que se ha utilizado la salida de Pérez del Gobierno valenciano “como un chivo expiatorio” y que “quien debe ser destituida de inmediato es la consellera del ramo, Mireia Mollà”. “Nos parece más grave todavía que la propia Mollà haya reconocido que no tenía ni idea de lo que sucedía en este programa, puesto que su responsabilidad es supervisar todas las iniciativas que organiza el departamento que ella dirige”, ha subrayado.
Desde el Partido Popular, la portavoz de Medio Ambiente en Les Corts, Elisa Díaz, acusa a Mollà de ponerse un cortafuegos y no asumir responsabilidades. “Se lava las manos y fuerza el cese de sus subordinados acusándoles a ellos de ser los responsables de esa gran negligencia”. Por ello, insisten que Mollà “sea la siguiente en irse y siga el camino del directo general que ha dimitido”.