La piscifactoría de Villahermosa del Río ha logrado la reproducción de la trucha común en cautividad
El presidente de la Diputación, Carlos Fabra, ha visitado esta mañana las instalaciones de la piscifactoría de Villahermosa del Río, única de toda la Comunitat en la que se ha logrado la reproducción de la trucha común en cautividad. Tan sólo seis meses después de la puesta en marcha de este proyecto de recuperación de la fauna autóctona, dotado con una partida de 250.000 euros, en las instalaciones han criado unos 3.500 alevines que ya alcanzan los tres centímetros de longitud.
Acompañado de los vicepresidentes Martínez y Aparici, el presidente de la Diputación, Carlos Fabra, ha felicitado a los cuidadores del centro y al alcalde del municipio “por hacer realidad un reto que nos sitúa a la cabeza de la Comunitat en cuanto a recuperación de especies autóctonas. Un hecho que no hubiera sido posible sin la ayuda de las instituciones, ya que la trucha común ha desaparecido en los últimos años a consecuencia de los periodos de sequía prolongados del río y de las introducciones masivas de trucha arco iris. Una vez más, hemos llegado a tiempo. La competencia ecológica de la trucha arco iris sobre la autóctona podrían haber hecho desaparecer la trucha común autóctona del río Villahermosa en un corto periodo de tiempo”.
El alcalde de Villahermosa, Luis Rubio, no puede esconder su satisfacción por estos primeros logros del centro de reproducción de salmónidos autóctonos "en el que no hemos tenido ni una sola baja porque se adaptaron perfectamente al medio los 30 ejemplares de trucha que depositamos hace unos meses. La puesta en funcionamiento de la piscifactoría ha reducido el problema del declive poblacional de forma inmediata, permitiendo una recuperación de las cadenas tróficas del ecosistema fluvial (la trucha sirve de alimento a especies tan representativas de los ríos mediterráneos, y en concreto del río Villahermosa, como puede ser la nutria, catalogada como especie en peligro de extinción en la Comunitat Valenciana o la garza real, catalogada como de interés especial a nivel nacional), y con ello la calidad del hábitat”.
Rubio ha querido dejar claro que el objetivo no es comercial, sino lúdico, científico y divulgativo. "Queremos que la gente venga y vea la zona que hemos creado, con su cascada y su arroyo, y disfrute viendo cómo es el hábitat de la trucha, qué es lo que comen y cómo se reproducen".
Además, el presidente provincial ha afirmado que este tipo de instalaciones forman parte de un paquete de medidas con el que la Diputación pretende promover la recuperación de la trucha común o autóctona con actuaciones como creación de frezaderos (lugares para desovar) en puntos estratégicos, revegetación de orillas de los ríos, favorecer la autolimpieza de los mismos y otras mejoras de hábitat.
