Els ‘Pelegrins de les Useres’ recuperan la rogativa a Sant Joan de Penyagolosa

Els ‘Pelegrins de les Useres’ han regresado al pueblo este sábado 30 de abril, tras la misa y la habitual ceremonia del perdón con el acto del lavatorio de los pies, tal y como hizo Jesucristo con los Apóstoles. Un acto que se produce en silencio y en el que nadie más puede estar presente.

Al finalizar, y antes de emprender el retorno, han vuelto a comer arroz con bacalao. Como curiosidad gastronómica, los panes que portan los peregrinos no pueden cortarse con cuchillo, sino que se hace con una caña, somo símbolo de respeto a San Juan Bautista, que fue degollado.

Els ‘Pelegrins de les Useres’ volvían a recorrer la comarca castellonense de l'Alcalatén

Este viernes els ‘Pelegrins de les Useres’ volvían a recorrer la comarca castellonense de l'Alcalatén, desde el municipio de Les Useres y hasta el santuario de Sant Joan del Penyagolosa, de Vistabella.

Así, regresaba este evento que rememora una antigua tradición que nos sumerge de lleno en la Edad Media con su recorrido de 35 kilómetros que recorren a pie, en silencio, oración y penitencia los trece hombres, que son el guía y doce peregrinos (en representación de Jesucristo y los doce Apóstoles).

Les acompañan en su recorrido una comitiva formada por tres cantores, un sacerdote, el representante del Ayuntamiento, los clavarios, el depositario, las promesas, y 19 càrregues.

Durante el recorrido van parando en lugares emblemáticos como la ermita de Sant Miquel de les Torrocelles, de Llucena, donde tras la celebración de la Misa comerán arroz con bacalao; la Font dels Posos, en las inmediaciones de Xodos, o el Marinet, para llegar por al filo del ocaso nocturno al santuario, donde han pasado la noche.

La Peregrinación fue declarada Bien de Interés Cultural en 2016, y cuenta con la distinción al Mérito Cultural de la Generalitat Valenciana. Además el propio camino está declarado como Monumento Natural.

La tradición se lleva a cabo el último viernes de abril, pero no se sabe mucho de sus orígenes, seguramente ligados a sucesos como las pestes, las sequías o las guerras. Y es que según el canto del O Vere Deus se ruega por la salud, la paz y la lluvia.

El próximo 3 de mayo se celebra la Peregrinación gemela del Piló de la Creu, en memoria de la invención de la Santa Cruz, una celebración hermana a la del Pelegrins y de la que se tiene constancia desde el Pleito contra la vila de Atzeneta del siglo XVII.