El nuevo Plan de Desarrollo Rural apuesta por el relevo generacional y la agricultura verde
Las ayudas europeas provenientes del Plan de Desarrollo Rural (PDR) a las que se podrán optar en la provincia de Castellón persiguen ofrecer un mejor futuro al sector ayudándose del relevo generacional, así como modernizando y haciendo más competitivo el sector agroalimentario, principal motor económico de los territorios rurales castellonenses. Los jóvenes son los grandes beneficiados de este PDR ya que verán simplificados los requisitos para acceder a las ayudas y no necesitarán justificar una inversión previa. A la renovación generacional se destinarán 40 millones de euros de ayuda directa a jóvenes agricultores, que pueden percibir, unitariamente, entre 15.000 y 70.000 €, dependiendo de los requisitos que cumplan.
En esta línea de renovación generacional, el PDR también fomenta el traspaso de explotaciones agrícolas de agricultores que ya no quieran trabajarlas, a jóvenes agricultores que tengan necesidad de ellas. En esta línea, también se ofrecerán, hasta 2020, ayudas del 120% a los agricultores que traspasen sus derechos, en lugar del 100% que venían recibiendo.
A estas novedades se une la demanda de una producción más respetuosa con el medio ambiente y que pone aún más en valor la producción ecológica. Éstas son, sin duda, las líneas prioritarias marcadas desde Europa para el reparto de las ayudas al sector en el periodo 2014-2020, que ascienden a 450 millones de euros para toda la Comunidad Valenciana.
Así se ha remarcado en la Jornada ‘Aplicación del Programa de Desarrollo Rural 2014-2020 en Castellón’ que ha organizado el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas y Graduados de Valencia y Castellón (COITAVC). Un encuentro que ha contado con José Juan Morant, Subdirector General de Política Agraria Común y Competitividad de la Conselleria de Presidencia y Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua, Domingo Giner, Diputado de Desarrollo Rural de la Diputación de Castellón y Carlos Canet, consultor en estrategias de territorio.
En la jornada también se han analizado las partidas económicas que mayor incidencia tendrán para el sector hasta 2020, como los 92 millones que se destinarán a la inversión de la industria agroalimentaria, para incrementar su competitividad, y los 53 millones que se dedicarán a la mejora de las explotaciones agrarias. Otra línea importante será la ayuda a la reconversión de cítricos, un cultivo que tiene alta incidencia en la costa castellonense y que ayudará a apostar por cultivos más rentables. A esta labor se destinarán 10 millones de euros.
En la jornada se ha puesto de manifiesto la importancia de que todo el sector agrario y agroalimentario castellonense se informe bien de los requisitos imprescindibles y de cómo acceder a estas ayudas, para que una gran parte de las mismas puedan repercutir en beneficio de la provincia de Castellón. Precisamente, los Ingenieros Técnicos Agrícolas son unos de los profesionales que asesoran y gestionan estas ayudas, además ejecutar las mejoras a acometer una vez obtenidas.
La jornada ha contado además con el testimonio de dos Ingenieras Técnicas Agrícolas que desarrollan su labor desde hace varios años en dos iniciativas empresariales en territorio rural castellonense, Masía Ana y Mas de Noguera. Ambas suponen un buen ejemplo de cómo su actividad ayuda a un producción viable de alimentos, a una gestión sostenible de los recursos naturales y a fomentar un desarrollo territorial equilibrado.
