La Generalitat impulsa una instalación logística para cerámica que generará 200 millones de euros de inversión en la provincia de Castellón

La consellera de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Rebeca Torró, ha calificado el proyecto de inversión estratégica sostenible (PIES) de una instalación logística para cerámica en Nules, la Vall d’Uixó, Chilches y Moncofa, como “una actuación muy importante en términos de inversión, productivos y de creación de puestos de trabajo, que beneficiará a la comarca y toda la Comunitat, con una visión proactiva, de ordenación territorial productiva, sostenible y eficiente”.

En su comparecencia ante la Comisión de Ordenación del Territorio de Les Corts para informar sobre este PIES propuesto por la mercantil Logística General de la Plana, SLU, Rebeca Torró ha destacado que “supondrá un importante refuerzo para el clúster del azulejo en la comarca de la Plana Baixa” y ha recordado que los PIES son “proyectos empresariales que tienen por objeto la ordenación, gestión y desarrollo de intervenciones territoriales de interés general y estratégico, de relevancia supramunicipal”.

En este sentido, ha manifestado que, “desde la Generalitat, queremos impulsar el sector cerámico, uno de los motores de la economía de toda la Comunitat, con proyectos como este que es un ejemplo de cómo conjugar el desarrollo sostenible con el respecto al territorio, la reducción de emisiones y la movilidad no motorizada”.

Así, la consellera ha explicado que se trata de “un gran centro logístico, con una extensión aproximada de 1.600.000 metros cuadrados, de los que el 51 % son de la Vall d'Uixó, el 38 % de Chilches y el 11 % de Moncofa”. Asimismo, el total aproximado de la inversión directa es de unos 200 millones de euros, con creación neta de unos 650 puestos de trabajo y contribuye también al mantenimiento de las más de 2.000 ocupaciones pertenecientes a las diferentes fábricas de azulejos del grupo empresarial STN cerámica.

Ahorro de coste y reducción de emisiones

Con esto, ha continuado Torró, “este grupo azulejero plantea una estrategia de concentración y optimización de cargas y mejoras de la eficiencia en cuanto a los costes logísticos de la empresa”.  De esta forma, se plantea una localización central que permita gestionar de manera eficiente los stocks de producción, ahorrar costes energéticos y reducir las emisiones de CO₂.

En cuanto a infraestructura verde, la consellera ha apuntado que el diseño respeta las trazas de dos vías pecuarias y propone la creación de un parque periurbano de unos 90.000 metros cuadrados y un parque forestal de unos 165.000 metros cuadrados de superficie. Ambos parques serán de carácter público y aptos para prácticas de esparcimiento y deportivas, beneficiándose los municipios del entorno.

Respecto a su conexión con los sistemas de transporte sostenible, incluye un carril bici y una pasarela para ciclistas y peatones que enlazará con la estación de cercanía de Chilches, permitiendo el acceso no solo al área del proyecto sino a otras equipaciones de este municipio.

Ubicación estratégica

Este parque logístico se sitúa junto al corredor ferroviario mediterráneo, próximo a los puertos de València, Castelló y Sagunto, con conexión a la CV-10 y con salida directa a la AP-7, a escasa distancia del parque empresarial. Para la consellera también es importante su proximidad a las dos grandes plataformas logísticas intermodales futuras de Sagunto y Castelló, que “permitirán disponer a corto y mediano plazo de una oferta intermodal portuaria y ferroviaria muy competitiva”.

Además, ha añadido, “reforzará notablemente el clúster cerámico de Castelló y ahorrará costes energéticos en un momento de elevada volatilidad e incertidumbre en el mercado de la energía”. Igualmente, en el acuerdo del Consell se exigirá la adaptación de paneles fotovoltaicos para autoconsumo, tanto para la nueva planta como para el polígono industrial donde se localiza.

Respecto de la efectividad sobre su implantación inmediata, la titular de Territorio ha indicado que los informes económicos muestran la solvencia de la empresa promotora, la viabilidad del proyecto desde el punto de vista del resultado urbanístico final y su impacto sostenible sobre las haciendas públicas.

Además, tendrá que proponer medidas de impacto favorable en cuanto a la perspectiva de género, infancia y familia, así como políticas inclusivas en la contratación de trabajadores. Del mismo modo, tendrá que desarrollar un proceso de participación pública de elevada calidad y exhaustividad, teniendo que efectuar consultas y reuniones con los agentes públicos y privados involucrados.

Tres etapas y un plazo de ejecución de 10 años

En cuanto a las etapas del PIES, la primera comportará toda la obra de urbanización, la rehabilitación de las edificaciones de valor patrimonial y la implantación de naves logísticas en una superficie de 366.200 metros cuadrados, con un periodo temporal máximo de cuatro años.

La segunda comprende el acondicionamiento de las parcelas identificadas en esta fase, con una superficie de 277.850 metros cuadrados, y la correspondiente construcción de las naves logísticas, y con una duración estimada de 3 años. Se integrará en esta fase la rehabilitación de la construcción existente en la Finca de la Condesa.

La tercera abarca el acondicionamiento de las parcelas identificadas en esta fase, con una superficie de 312.100 metros cuadrados y la correspondiente construcción de sus naves logísticas, y con una duración estimada de 3 años. El plazo máximo de ejecución del PIES se establece en 10 años, a contar desde la obtención de las correspondientes autorizaciones administrativas.

En su comparecencia, la consellera se ha referido al elevado protagonismo que ha cobrado el territorio como activo no deslocalizable “al ser factor clave de competitividad a través de la puesta en valor de sus componentes de excelencia para captar inversiones, talento y generar renta y ocupación”. Como prueba de esto, la consellera ha citado la implantación de la primera gigafactoría de baterías eléctricas en Sagunto, en la que hace dos semanas empezaban las obras.

Urbanismo productivo

Según Rebeca Torró, “desde la Generalitat estamos facilitando los despliegues urbanísticos necesarios para impulsar la implantación racional de actividades económicas y generadoras de ocupación, de forma que unos y otras sean compatibles con la conservación y mejora de los valores ambientales, culturales y paisajísticos de nuestro territorio".

En definitiva, “estamos apostando por un nuevo tipo de urbanismo, que sea productivo, que facilite la relocalización de la economía, desde el respeto a los valores de cohesión social, sostenibilidad económica y medioambiental, y porque, como dice el president, Ximo Puig, las inversiones no vienen, se buscan”, ha concluido.