Fernández: "Los sanitarios no se merecen ir a ninguna repesca, esto no es el sorteo de la Champions"
La portavoz de Cs en la Diputación critica los despidos del personal que ha estado "en primera línea de batalla frente al COVID"
La portavoz de Ciudadanos en la Diputación, Cristina Fernández, ha lamentado el despido "absolutamente vejatorio" de los 600 sanitarios que fueron contratados para hacer frente al aumento de la presión asistencial derivada del coronavirus en la provincia de Castellón. La diputada provincial ha mostrado "todo su apoyo" a las movilizaciones que se están produciendo en los hospitales castellonenses, por parte de trabajadores y sindicatos. "Es realmente triste lo pronto que se ha olvidado el gobierno de Ximo Puig y su consellera de Sanitat, Ana Barceló, de los profesionales que han estado en primera línea de batalla frente al COVID. Se acabaron los aplausos a las ocho de la tarde y los homenajes propagandísticos con las cámaras delante. Una vez más, el tiempo nos da la razón, una vez usados para sus intereses políticos, ahora se les despide sin contemplaciones. Absolutamente intolerable".
Fernández ha mostrado su sorpresa por el anuncio de hoy mismo de la responsable sanitaria del Consell en el que se habla de una "especie de repesca" de esos profesionales de cara a la campaña de verano para sustituciones y refuerzos. "Parece una broma de mal gusto. Os echamos y os volvemos a contratar una semana después. Han tenido que improvisar una partida presupuestaria a toda prisa y en la que ni siquiera se detallan esos contratos por provincias o áreas de salud. No es más que una cortina de humo porque se han dado cuenta del rechazo que ha provocado esta decisión entre los profesionales y también en la sociedad civil".
Cristina Fernández afirma que "estamos ante un nuevo episodio en la crónica negra de una consellería que igual desmantela el CICU de Castellón que despide a los trabajadores que más expuestos han estado al Covid. La sanidad valenciana se merece mejores gestores y con un poco más de sentido común. Con mucha diferencia es la peor valorada por los ciudadanos del gobierno de Puig y ya es difícil en un ejecutivo que parece diariamente abonado al esperpento".