Compromís denuncia que Castelló lleva casi 250 días sin dirección del IVC
Ruiz ha lamentado que “ni siquiera han convocado la plaza de responsable del IVC que lleva vacía desde la jubilación de Ribes”
Fajardo ha criticado que “no existe tampoco responsable territorial en el área de Cultura para firmar expedientes sobre Patrimonio”
Mañana se cumplirán 246 días que la provincia de Castelló no tiene ninguna persona en la dirección del Institut Valencià de Cultura (IVC). El pasado 13 de junio del 2023, Alfonso Ribes, presentó la dimisión por “incompatibilidad” con el nuevo gobierno autonómico, y mañana 13 de febrero, continuará igual.
“Hoy el conseller Barrera ha anunciado que en unos días nombrará la nueva dirección. Es lamentable que las comarcas de Castelló no cuenten a día de hoy con una dirección cultural en el IVC por las riñas internas de Vox y PP”, pero es que “ni siquiera han convocado la plaza de responsable del IVC que lleva vacía desde la jubilación de Ribes. Vamos a asistir a un nuevo capítulo de luchas internas para colocar a una persona en la gestión cultural de los espacios de Castelló que sea del agrado de la derecha y la extrema derecha”, ha lamentado la diputada autonómica Verónica Ruiz.
“La falta de libertad de creación y de expresión es una de las señas de la nueva Conselleria de Cultura, y por eso, les ha resultado tan difícil encontrar una persona para que se pueda encargar de la gestión cultural, y que tenga tantos problemas de censura”, ha insistido Ruiz. “La falta de trabajo en la Conselleria de Cultura es la muestra de los primeros nueve meses. Censura, prohibiciones, y poco trabajo, son las señas del nuevo conceller de Cultura”, ha lamentado Ruiz.
Por su parte, Fajardo ha recordado, que “no solo hay falta de dirección en el IVC, sino que no existe delegado territorial de Cultura en Castelló, lo que supone que no se puedan firmar expedientes patrimoniales para poder actuar en obras que sean de Interés Cultural”.
“No tenemos una dirección para gestionar el Teatro Principal, el Auditori, l’Espai d’Art Contemporani y el Museu de Belles Arts, así como el Palau de Congresos de Peníscola. Les ha costado nueve meses conseguir una persona, y esto refleja las pocas ganas de trabajar que tienen por la cultura de nuestro territorio”, han finalizado.