Clasol y San Alfonso crean un gigante citrícola desde Burriana y Betxí
Sumarán 2.000 trabajadores de 2.500 hectáreas de campos de frutas
Dos empresas castellonenses, la burrianense Grupo Clasol y la bechinense Cooperativa San Alfonso, han decidido dar el paso y unirse para crear un nuevo gigante valenciano en el campo hortofructícola.
El nuevo grupo que surgirá de ambas empresas contará con 2.500 hectáreas de producción de cítricos y frutas de hueso, una capacidad para producir una tonelada de frutas al día, cuatro centros de embalaje y más de 2.000 empleados.
Así, sumarán la fuerza de sus centros en Betxí, Burriana, Les Alqueries, Ulldecona y Calasparra, con una unión que pretende facturar 120 millones al año (la suma de los 70 de San Alfonso y los 50 de Clasol) vendiendo a minoristas de más de 30 países.
Con este nuevo grupo, además, ambas compañías ofrecerán todo el proceso, desde que se cultiva la fruta hasta que se transporta, pasando por el embalaje o la comercialización.
Emilio Balaguer, de la Cooperativa San Alfonso y César Claramonte, director de Grupo Clasol, han expicado los objetivos de esta unión, que les permitirá retos como aumentar su producción, introducir nuevas variedades de frutas más rentables y modernizarse.
Además, pretenden ganar fortaleza para apoyar los proyectos de pequeños agricultores con independencia de los fondos de inversión y músculo económico, así como abastecer con escala suficiente a sus clientes.
