Blanch pide a Rajoy que desautorice a Fabra por llamar “estupidos” a los socialistas de Castellón
El secretario de acción electoral y modernización del PSPV-PSOE en la provincia de Castelló, Ernest Blanch, ha pedido al presidente del PP, Mariano Rajoy, que desautorice de forma inmediata al presidente de su partido en Castelló y máximo responsable de la diputación provincial, Carlos Fabra, por haber llamado “estúpidos” a los socialistas de Castelló. Blanch ha avisado de que si Rajoy “mantiene a Fabra en sus cargos pese a las imputaciones, pese a la petición de cárcel a la que se enfrenta y pese a los insultos que de forma permanente lanza contra los adversarios políticos, no tendrá ninguna credibilidad a la hora de aspirar a presidir el Gobierno de España”.
Blanch ha realizado estas declaraciones después de que Fabra haya dicho públicamente que “no tiene intención de presentarse porque está harto de aguantar a estúpidos en el PSPV-PSOE”. El responsable de acción electoral ha insistido en que “Castelló no se merece a una persona como Fabra que sólo sabe insultar a los demás y actuar de forma caciquil en la diputación”.
Blanch ha afirmado que Fabra, “una vez más ha perdido los nervios y es normal porque todavía no ha superado que Francesc Colomer fuera el candidato a la alcaldía más votado de la historia de la democracia en Benicàssim, motivo por el es alcalde a pesar de haber utilizado toda la artillería posible para ganar las elecciones, -cabe recordar que el presidente del PP de Benicàssim, Miguel Llorens, es el gerente del hospital provincial dependiente de la diputación de Castelló-“.
En cuanto a las declaraciones de Fabra sobre su continuidad o no como candidato en la diputación le ha recordado que “no dependerá de él, sino de los juzgados donde hay abiertas varias causas por tráfico de influencias, malversación de fondos públicos, negociaciones prohibidas y fraude fiscal, entre otros, y donde hasta incluso se enfrenta a cárcel por falsificación de cuños para obtener licencias de insecticidas en la etapa de Aznar que luego fueron retiradas del mercado por ser peligrosas para la salud pública”. Para el responsable de acción electoral, “su continuidad demostrará que el reciente decálogo de buenas prácticas presentado por Maria Rajoy para combatir la corrupción es papel mojado, porque no se entendería que siga un cargo público en el partido que se niega de forma reiterada a aclarar en el juzgado, a la opinión pública y por tanto a los ciudadanos y ciudadanas, el origen de los más de 600.000 euros (100 millones de pesetas) que en metálico o en cheques al portador le ingresaron en un solo año en sus cuentas; un dinero que escondió a Hacienda, según la Agencia Tributaria, y que le permitió que la declaración de renta le saliera a devolver 4.000 euros (463.000 pesetas) cuando en realidad tenía que haber pagado 150.000 euros (25 millones de pesetas)”.