El Aula de Movilización del Conocimiento presenta cuatro proyectos para dinamizar el territorio

Profundizar la relación mutua entre la Universidad y el territorio de una manera no solo instrumental, sino participativa y empoderadora. Este es el objetivo principal del Aula de Movilización del Conocimiento y de la Red Experta que esta mañana han presentado,en la Sala de Juntas del edificio del Rectorado de la Universitat Jaume I, los proyectos que actualmente está desarrollando con los cuales pretende favorecer las sinergias entre el mundo académico y la sociedad civil y conseguir así «movilizar el conocimiento que genera la UJI para que llegue al territorio, pero también, que el territorio tenga la oportunidad de movilizar conocimiento y que la UJI sea capaz captarlo», según ha explicado el coordinador de la iniciativa, Xavi Ginés.

La Red está incluida dentro del Programa de Extensión Universitaria de la UJI (PEU) y tiene como objetivos fomentar procesos de reflexión, de mediación cultural, de investigación, de formación y de divulgación y transferencia del conocimiento, con los cuales se quiere conseguir que las visiones de la comunidad universitaria y de la comunidad local acaben impregnadas de los puntos de vista recíprocos en las materias objeto de las dinámicas de trabajo. El proyecto cuenta también con la colaboración de la Diputación de Castelló.

En el acto de presentación han participado la vicerrectora de Cultura y Relaciones Institucionales de la UJI, Carmen Lázaro, el diputado de Desarrollo Rural de la Diputación de Castelló, Santi Pérez, y el coordinador de la Red Experta, Xavi Ginés. En su intervención, Lázaro ha destacado que «en los proyectos de esta nueva Aula, la implementación de la metodología PEU, participativa, bidireccional, transversal, colaborativa y que implica activamente a la población; tiene que ser la idea fundamental». «Además, cabe recordar que en cada proyecto hay profesorado de la Universidad implicado y estudiantado que aporta valor a esa propuesta movilizadora» ha añadido la vicerrectora.

Por su parte, Santi Pérez ha recalcado la sinergia de trabajo entre la Diputación y la Universitat Jaume I en favor del territorio, a través de las asociaciones y municipios, en especial del interior, y con cada uno de los proyectos que se han analizado. «La Universidad tiene que ser motor de dinamización del territorio para ayudar a que esté más vivo» ha concluido el diputado.

Los cuatro proyectos con los que empieza a andar esta red de movilización del conocimiento están relacionados con el mundo de la agricultura, la vivienda, la juventud y la energía y han sido presentados durante el acto por sus equipos de trabajo.

El primero versa sobre «Nuevas propuestas de gestión del suelo agrícola» y pretende desarrollar conocimiento alrededor de las posibilidades del cultivo en común y el desarrollo de los bancos de tierras para evitar el abandono de los campos de cultivo en las zonas rurales. El objetivo es evitar que este fenómeno vaya en aumento y crear dinámicas que favorezcan acciones propositivas por parte de la población para favorecer la disponibilidad de tierras explotables.

El segundo proyecto presentado, «Actitudes sociales que condicionan la disponibilidad de vivienda», quiere activar acciones y reflexiones en torno al problema de la vivienda, que se ha desvelado como uno de los factores de despoblación rural y, al mismo tiempo buscar varios sistemas de estímulo del mercado inmobiliario. En la actualidad, los municipios rurales, según los coordinadores del proyecto, no disponen de un stock suficiente de vivienda en condiciones y que sea asequible.

Contribuir a la diagnosis social de la predisposición de la ciudadanía a emprender cambios en hábitos de consumo y de producción de energía es uno de los objetivos del proyecto denominado «Modelos de transición energética», puesto que, según su equipo de trabajo, la disponibilidad de energía marcará la agenda de los próximos años de manera prioritaria tanto a nivel familiar como a escala internacional. El proyecto analizará las diferentes iniciativas que se están poniendo en marcha de manera experimental, como por ejemplo las Comunidades Energéticas y la respuesta de la ciudadanía ante propuestas de este tipo.

El último proyecto que se ha presentado quiere analizar los «Factores de vuelta de los jóvenes en el entorno rural», es decir, reflexionar sobre los motivos que hacen que los jóvenes vuelven al pueblo o deciden abandonarlo, más allá de las causas laborales, y contribuir al cambio de actitud social. Los últimos estudios reflejan que el abandono de los y de las jóvenes de los pueblos es el principal factor de despoblamiento rural y con ellos se va la inversión en capital humano y en futuras generaciones apoyo de las comunidades rurales. No obstante, en los últimos años se observa cierto cambio de actitudes y ha emergido un nuevo discurso que ha dejado de ver la marcha en la ciudad como una victoria de un proyecto personal coherente con las aspiraciones sociales predominantes.

Todos los proyectos que se han presentado están desarrollados por un equipo de trabajo en el cual están representadas la comunidad académica y la sociedad civil a través de personas vinculadas a iniciativas y empresas que desarrollan su trabajo en el medio rural.