Amparo Marzal (Vithas Castellón): "Nos hemos abierto a la sanidad internacional y vamos a recibir la principal acreditación de calidad"

Amparo Marzal es valenciana, pero ya se puede considerar una castellonense más de adopción. Y es que Marzal cumple toda una década al frente del hospital privado de referencia en la provincia, el Vithas Castellón, donde ejerce como directora gerente desde el año 2015.
 
Así, tras su paso por varios hospitales de la capital del Turia, y sumando experiencia en el sector sanitario desde el año 1995, Marzal tomó las riendas de este hospital hace ya diez años, por lo que es momento de hacer balance de este centro sanitario que cada año crece más.

75.000 urgencias, 13.000 cirugías ó 6.000 quimioterapias al año son algunas de las cifras que dan la medida de cómo ha crecido este hospital que recientemente ha cumplido 20 años en la provincia.

¿Cómo es dirigir un hospital como este?

Dirigir un hospital como este siendo el único privado de la provincia es complejo, apasionado y fascinante. Tienes días ilusionantes, tristes y de mucho estrés, pero al ser un hospital de tamaño medio, donde todos nos conocemos, te permite disfrutar de lo que haces en el día a día.
 
Y aunque somos el único hospital privado de Castellón también están los hospitales de la pública, con quienes nos entendemos fenomenal, porque somos complementarios y muchísimos de los profesionales sanitarios también están aquí con nosotros.

Respecto esta la colaboración público-privada que comentas, ¿cómo se materializa? ¿qué implicaciones tendrá el nuevo hospital General que se levantará en la ciudad?

Con la sanidad pública siempre hemos sido complementarios y hemos tenido una relación fluida, les ayudamos con las listas del plan de choque y en la pandemia también nos ofrecimos y colaboramos, concretamente para muchos tipos de cirugías.
En cuanto al hospital General, evidentemente ya tiene muchos años y la población va envejeciendo, van creciendo las ciudades y por tanto hay que crecer, igual que nosotros hemos crecido: creamos el Centro Médico para sacar más consultas externas y montamos el Centro de Tráfico también para tener más espacio.

Tras una década al frente del hospital, ¿cuáles dirías que han sido los principales hitos en el Vithas Castellón?

Para mí un principal hito es consolidar el hospital, a todo el equipo médico y a todo el equipo de profesionales que hay aquí, crecer y abrir unidades, como ha sido el centro médico de las consultas externas.

También que se conociera más el hospital Vithas, que ha crecido mucho estos años. Por ejemplo, había gente que no sabía que teníamos una UCI pediátrica y tenemos unidades muy potentes en el centro que teníamos que dar a conocer.

Además, nos hemos abierto a la sanidad internacional para que los pacientes internacionales que tiene Castellón puedan venir a nuestro hospital, hemos abierto una segunda resonancia magnética, ahora hemos puesto en marcha el sistema informático Vithas One para unificar a toda la compañía y esperamos entre el 2025 y el 2026 obtener la Joint Comission International, la mejor acreditación sanitaria.

También estamos trabajando para que los pacientes puedan tener más acceso a las consultas médicas. Nos reclaman agilidad, por lo que trabajamos para buscar más profesionales y mejorar la asistencia.

En este sentido, la falta de médicos es una tónica común en el sistema sanitario, ¿por qué ocurre?

Yo creo que el paradigma de la calidad de vida también afecta a los médicos, porque cuando yo empecé a mediados de los 90 el médico trabajaba por la mañana en la pública y por la tarde quería trabajar en la privada y no le importaba el tiempo libre. Ahora la gente quiere una calidad de vida y quiere estar con los niños, lo que es totalmente comprensible.

También es cierto que, aunque Castellón es una provincia con un gran potencial, tenemos muchos profesionales que vienen de Valencia, que son ida y vuelta dos horas de coche, y eso al final les pesa.

Pero yo tengo que reconocer que en Castellón se vive muy bien y hay mucha calidad de vida, por lo que hago un llamamiento a los profesionales para que vengan a vivir a esta provincia.

Tras una década ya en este hospital habrás visto cómo ha cambiado la medicina ¿Es muy diferente a la de hace diez años?

La sanidad ha avanzado de tal manera que vamos a una ambulatorización de las cirugías, es decir, el paciente pasa menos tiempo ingresado tras una operación y puede volver a su casa antes.

Además, se ha avanzado con medios diagnósticos, con analíticas y con pruebas que son cada vez más certeras a la hora de diagnosticar una patología.

La ciencia también ha avanzado mucho en los tratamientos oncológicos y la prevención es mucho más intensa que hace 15 años, en cánceres como el de mama, colon o próstata. Antes no había tanta conciencia de la importancia que tiene la prevención, además de la concienciación que hay ahora con los modos de vida saludables como la comida sana o el deporte.

También es cierto, por el otro lado, que hay más hipocondría y el 'doctor Google', como suelo llamarlo, ha hecho mucho daño y hay que tener mucho cuidado, porque cuando tienes algo malo te vas a poner siempre en lo peor y todos vamos al ‘doctor Google’ y entonces saltan las alarmas.

Y hablando del futuro, ¿qué retos tiene el hospital?

Pensamos en cómo mejorar las instalaciones y cómo reformar las áreas quirúrgicas, como estamos haciendo ahora con la zona de farmacia.

Y entre finales del 2025 y el 2026 espero que consigamos el certificado de la Joint Comission, que es un indicador que acredita la excelencia de la calidad asistencial midiendo más de mil ítems.

También esperamos ser en un futuro el siguiente hospital universitario en la provincia de Castellón.

¿Cuáles son los departamentos en los que hay más demanda?

Lo cierto es que tenemos una población en crecimiento que necesita la sanidad y la población está envejeciendo con sus patologías, mientras disminuyen otras áreas como las cesáreas y los partos.

Pero en el hospital mantenemos unos niveles altos de actividad en casi todas las áreas y estamos atendiendo unas 75.000 urgencias al año, 13.000 cirugías y 6.000 tratamientos de quimioterapia.

En los últimos años ha crecido el número de pacientes que apuesta por la sanidad privada, ¿a qué se debe?

La sanidad pública también tiene muchísima demanda pero la sanidad privada es más accesible, aunque algunas veces también estemos saturados.

Al final, la facilidad de que el paciente pueda venir directamente a un especialista y no tenga que aguardar en una lista de espera de la pública hace que la gente se suscriba a un seguro de salud.

La Comunitat Valenciana todavía sigue en ‘shock’ tras la DANA de Valencia, ¿cómo lo habéis vivido desde este hospital?

Hemos tenido profesionales que viven en Valencia y algunos médicos han tenido que anular las consultas y las cirugías. Por ejemplo, uno perdió el coche y no podía desplazarse y otro lo ha perdido absolutamente todo.

Nuestros compañeros de los hospitales del grupo Vithas en Valencia, el 9 d’Octubre, el Consuelo o el Aguas Vivas sí que lo han sufrido más y muchos han perdido sus clínicas e incluso sus casas. Pero, como siempre decimos, los valencianos resurgiremos de las cenizas.