A partir del 2035 no se podrán vender coches de gasolina y diésel ¿Afectará a la C. Valenciana?
El objetivo de esta decisión es reducir las emisiones de CO2, impulsando una movilidad más sostenible de la mano de los coches eléctricos
El Parlamento Europeo ha aprobado un acuerdo este martes en el que se prohíbe la venta de coches y furgonetas propulsadas por gasolina y diésel en toda la Unión Europea en 2035. La medida se enmarca dentro del paquete Fit for 55 con el que se pretende reducir las emisiones de C02 en un 55% en 2030. Pese a haberse aprobado, la norma no ha sido bien recibida por todos los partidos políticos, pues si el PSOE y Ciudadanos votaban a favor, el PP y Vox se oponían a esta medida, ya que según han manifestado desde el Partido Popular Europeo consideran que esto supondrá “coches más caros y la pérdida de miles de puestos de trabajo”.
No obstante, hay excepciones y la comercialización de estos coches será posible para aquellos fabricantes que hagan menos de 10.000 coches al año, a los que se les concederá una moratoria de un año y los que fabriquen menos de 1.000 estarán exentos de cumplirla.
Beneficios de los coches eléctricos; avanzando hacia la era de la sostenibilidad
La nueva normativa hace que los habitantes de la Comunitat Valenciana interesados en cambiar de automóvil se planteen comprarse un eléctrico, en vista a las restricciones ya vigentes como las zonas 0 emisiones del interior de las ciudades, a las que no se puede acceder con determinados vehículos y a la próxima prohibición de ventas de los vehículos de gasolina y diésel.
Respecto a las ventajas de este tipo de vehículos encontramos las siguientes: en primer lugar, son cero emisiones, por lo que se puede acceder con ellos a cualquier parte de la Comunitat y además se puede circular con ellos por carriles de alta ocupación (VAO) incluso cuando el conductor viaje solo. Por otro lado, su consumo es prácticamente nulo, ya que su gasto equivale a 1 euro/ 100km y se puede cargar durante la noche, una cifra mucho más económica que la de la gasolina o el diésel. En tercer lugar, estos vehículos tienen beneficios fiscales, pues quedan exentos de pagar el impuesto de matriculación y también pagan menos impuesto de circulación.
También en muchas ciudades están exentos de pagar las tarifas por aparcar en zona azul o verde y su mantenimiento es mucho más sencillo y práctico que los de combustión, ya que se reduce a una revisión del estado de las baterías y los motores eléctricos cada cierto tiempo.
Finalmente, los interesados en adquirir un coche de estas características podrán solicitar ayudas económicas a las instituciones, ya que de acuerdo al plan Move III, el Gobierno fomenta la compra de coches eléctricos, ofreciendo ayudas de hasta 7.000 euros a los particulares que adquieran un vehículo de este tipo si además achatarran un coche antiguo.