Hallan un barracón para presos en el campo de concentración de Albatera
La Generalitat creará un 'Espacio de la Memoria' en estos terrenos
La consellera de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática, Rosa Pérez Garijo, y el alcalde de San Isidro, Manuel Gil, se han reunido para hablar de los recientes hallazgos tras los trabajos arqueológicos que se han desarrollado en el campo de concentración franquista de Albatera.
La consellera Pérez Garijo ha afirmado que "hemos iniciado las conversaciones con el ayuntamiento de San Isidro en relación al proceso que permita la adquisición de los terrenos del campo de concentración de Albatera para convertirlo en un centro de interpretación de la memoria de la Generalitat".
Al respecto, Pérez Garijo ha indicado que "la intención de la Generalitat es adquirir la parcela" para crear un espacio que "sirva para la reflexión y para no olvidar uno de los episodios más tristes y lamentables de nuestro pasado reciente".
La titular de Calidad Democrática ha recordado que "todo lo que hallemos en el campo debe servir para ampliar el conocimiento de esta página de nuestra historia y ayudar a que la ciudadanía descubra la importancia histórica, patrimonial y memorialista de este espacio".
Pérez Garijo ha resaltado que la compra de los terrenos del campo de concentración de Albatera y activación de un centro de interpretación "contará con una dotación de 100.000 euros", tras convertirse en una de las propuestas ganadoras de los primeros presupuestos participativos de la Generalitat para 2022.
Hallazgos en el terreno de Albatera
El grupo de arqueólogos que trabaja en el terreno de Albatera ha localizado recientemente la estructura y cimentación de un barracón de 60 metros de longitud por siete de ancho en el campo de concentración. En estos meses se han encontrado también latas de sardinas y botes de lentejas, además de platos, restos de vidrio, objetos de los presos, desperdicios y una fosa séptica. El equipo de seis arqueólogos ha encontrado a su vez munición que empleaba el ejército franquista, mucha de ella percutida, lo que implica que se dispararon fusiles dentro del campo y, por tanto, se realizaban fusilamientos.
El grupo de trabajo ha realizado dos campañas sobre un terreno que cuenta con una superficie de 14 hectáreas, una el pasado año y otra entre agosto y octubre de 2021. También se ha empleado una máquina para realizar sondeos dirigidos a encontrar la fosa común que todavía no ha sido hallada, trabajos que continuarán en la campaña del próximo año.
La Conselleria de Calidad Democrática ha destinado un total de 25.600 euros en 2021 a dos proyectos relacionados con el campo de concentración de Albatera, uno de ellos para la puesta en valor de lugares de la memoria, mientras que el otro orientado a la búsqueda de fosas, contando este último con una dotación de 11.200 para el próximo año.
La intervención fue solicitada por el Ayuntamiento de San Isidro, municipio donde está situado el recinto tras su segregación de Albatera en 1993.
Entre abril y noviembre de 1939 este campo de concentración se utilizó como centro de clasificación de prisioneros y prisioneras donde fueron a parar, entre otros, todos aquellos que no pudieron exiliarse en el Stanbrook, el último barco que partió desde el puerto de Alicante con refugiados republicanos al finalizar la Guerra Civil.