El pago de las facturas ahoga a las familias valencianas: ¿sabes cuánto pagamos de media?

Hacer frente a 12 facturas esenciales de una vivienda en Comunitat Valenciana supone un gasto de 16.329 euros al año, una cifra que equivale al 54,49% del presupuesto anual de un hogar. Esta cantidad podría recortarse un 8,7% si se eligen los proveedores más baratos, cifra que podría subir hasta el 17,87% si se tenían contratadas las tarifas más caras.

 Así lo asegura un análisis realizado por Kelisto.es, la web del ahorro, en el que se analiza el coste máximo, medio y mínimo que generan en un hogar 12 servicios esenciales: seguro de coche, seguro de salud, seguro de vida, seguro de moto y seguro de hogar; fibra óptica y dos líneas de móvil; hipotecas, cuentas bancarias, préstamos y tarjetas; y electricidad y gas. 

El ahorro que se puede lograr eligiendo los proveedores más baratos varía notablemente en función del producto/servicio del que se trate: el mayor margen para recortar los gastos en Comunitat Valenciana se encuentra en las cuentas bancarias, con un ahorro máximo del 100%, lo que equivale a 240 euros al año. 

Tras este producto financiero básico, figuran los seguros de moto (hasta el 66,1% de ahorro), los paquetes de fibra y móvil (hasta un 64%), los seguros de vida (hasta un 61,4%) y los seguros de hogar (hasta el 52,6%). 

“En cifras absolutas, eso sí, el panorama cambia: las mayores opciones de ahorro están en las hipotecas (hasta 630,1 euros al año), los paquetes de fibra y móvil (hasta 575 euros al año) y las tarjetas de crédito (hasta 283 euros), seguidos de la electricidad (hasta 249 euros) y las cuentas bancarias (hasta 240 euros) , explica la portavoz de Kelisto.es, Estefanía González.

La presión que ejerce el gasto en facturas del hogar sobre el presupuesto familiar tiene serias consecuencias, como el retraso en el pago de estos servicios básicos. A día de hoy, más de 219.000 hogares valencianos reconocen no poder pagar a tiempo sus recibos: se trata del 10,8% del total, una tasa que sin embargo se ha reducido en un 20% en la última década.

En este contexto (y si no queremos prescindir de ninguno de los servicios básicos de un hogar), la única solución pasa por cambiar de proveedor en busca de la oferta más barata del mercado, una operación que, en la mayoría de los casos, es 100% gratuita, se efectúa en pocos días (o incluso horas) y para la que tan solo hace falta disponer de un dispositivo conectado a Internet.