La lucha animalista en España: presente y porvenir XX

Este tema me enloquece. Es una constante en mí pensar en ello, hablar de ello, discutir sobre ello con los demás. Un lugar al que ir, volver y siempre estar, porque llevo toda una vida siendo activista e inventando estrategia animalista (siempre ha de renovarse, tan rápido y más de lo que cambia el destinatario de nuestras acciones: nuestros vecinos, el pueblo, los humanos).

He criticado mucho las acciones que se suelen realizar en el animalismo tipo performance, porque es difícil ver algo de metáfora en ellas. Significado de metáfora: "Figura retórica de pensamiento por medio de la cual una realidad o concepto se expresan por medio de una realidad o concepto diferentes con los que lo representado guarda cierta relación de semejanza."

Así es: una realidad, pongamos la tauromaquia, se expresa mediante conceptos diferentes (con los que guarda cierta relación o semejanza).

Hace muy poco he vuelto a ver una acción antitaurina en una concentración, cuya performance los organizadores la denominaban como "llena de sensibilidad y simbolismo". Pido perdón a quienes les analizo las acciones, lo hago por el bien de los animales. Si en algo yerro, será en que entre todos mejoremos, y eso es positivo para todos. El perdón que pido es por si se sienten heridos en lo personal. Mas, sintiendo realmente herir a alguien cuando soy tan directo (no entiendo otra forma de dirigirme al mundo), sé que hago lo correcto, puesto que aquí los protagonistas son los animales y nosotros meras herramientas, milicia, presta a ser cada vez más poderosa y para ello el debate y la ambición de mejorar cada día más debe ser lo más importante para nosotros.

Respeto profundamente a los animalistas, sobre todo a las animalistas, el movimiento tiene muchas más mujeres que hombres. Sólo siento que estas personas no tienen otra opción, tienen ganas de protestar y se genera una acción y se ofrecen. Quizá no están acostumbradas a ver otra opción de puestas en escena de dramaturgia de combate. De cualquier forma lo hacen con todo su amor y en tanto a su dignidad animalista, la tienen y mucha. Insisto, no va contra las militantes verdes este análisis, sino hacia, más concretamente, quien "ideó" esta performance, que no se ha ideado sino que es copia de las miles que se llevan haciendo contra la tauromaquia.

La acción concreta la realizó Alcalá Antitaurina, en este mes de agosto de 2021. No he podido ver el vídeo de la performance pero sí algunas instantáneas de los momentos más cruciales. El "ámbito" es la calle, como es obvio, colocaron cartones del tamaño de una persona y más anchos que ésta, donde había en cada uno de ellos un dibujo de un toro, sólo su silueta. En una instantánea se ve a alguien que representa al torero, como siempre, vestido de la representación folclórica de la Muerte, un trapo negro cubriéndole todo el cuerpo y capucha negra en la cabeza, la cara cubierta con una careta de cráneo, de lo más hilarante. La "muerte" asía un par de banderillas, claramente realizadas caseramente (no tiene nada de malo el realizar algo caseramente, de hecho es plausible), pero mal confeccionadas, muy cortas las banderillas y muy gruesas y sobresalientes las "flores" o colores de ésta, el material de color rojo y negro con que fueron confeccionadas; el arpón de la banderilla parece ser un fino palito blanco, que le redondea el aspecto de "juguete". Según parece los seis toros giraron andando lentamente alrededor de los cartones en el suelo (el albero, la arena de la plaza donde caerían sus cuerpos, ya muertos luego) hasta que iban pasando por la cercanía de la muerte, que les asestaba su golpe funesto, luego las chicas toro deberían haber ido (imagino) hacia los cartones y se deben haber dejado caer, encima cada chica de cada cartón. El final es ver a las chicas, que no lo he dicho pero lleva cada una unas astas arriba de la cabeza, "muertas" en el suelo.

Aquí es importante detenerse bien. Las posturas de las activistas no son las que adopta el toro cuando cae al suelo. Un error que se repite sin cesar entre los activistas cuando realizan performances. El primer error, que no realizan dramaturgia, o sea, no emulan una realidad con simbolismos y metáforas, se dedican a imitar la realidad -: "me pongo astas, al torero lo representamos como la muerte, y luego nos dejamos caer"-, sino que, aún realizando algo tan simple, no lo realizan bien. Porque si lo que quieren es imitar al toro, primero hemos de ver cómo se mueve el toro y hacer una traslación dramatúrgica a cómo lo podemos hacer nosotros como humanos sin que quede cómico (en dramaturgia, de lo dramático a lo cómico va un fino hilo). Repito, como en la imagen quedan caídas las chicas, no cae el toro. El toro suele caer de lado, o tirando a con las patas hacia arriba, esa postura es muy tétrica, y si se busca emular rectamente, sin metáfora alguna, el hecho, se debe emular su imagen más funesta. Alguna de las personas quedan tumbadas en el suelo de tal forma que sólo le falta se les ponga una almohada para la cabeza, me dijo un amigo.

¿No ha valido de nada hacer algo así?

Por supuesto que ha valido. Lo que no vale es quedarse en casa. Aplaudo cada grupo de personas que salen de su casa y se la juegan (los taurinos son muy violentos y puede pasarte cualquier cosa en un acto de este tipo); aquí lo que analizo es si se puede hacer mejor. Y claramente no es que se pueda hacer mejor, es que se debe hacer de otra forma muy distinta. Con metáfora. Con sentimiento real.

Repito constantemente que el animalista medio cree saber hacer carteles (cree ser diseñador, así salen la mayoría de los carteles), creen ser escritores; así quedan la mayoría de los comunicados del final de las manifestaciones, donde allí sí caen bien al suelo, dormidos del aburrimiento, la mayoría de los asistentes), creen ser actores y actrices. No.

Pido de corazón a los activistas animalistas que deseen realizar una performance, o sea una alegoría (sucesión de metáforas) sobre cualquier hecho de tortura, maltrato o uso o esclavitud animal, que pidan consejo a profesionales. Para el cartel, a diseñadoras/es, para los textos a verdaderas/os escritoras/es, para la creación de la performance, a gente de teatro, actrices, autores de textos teatrales, gente de la escena, gente que conozca la estética, el arte en movimiento.

Un ejemplo de artista que sabe usar la metáfora artística en favor de los animales, la dramaturgia al servicio del sentimiento y de la recreación de un hecho de humillación, esclavitud y burla a los animales es el hacer da la profesora de baile, bailaora ella de flamenco, Sandra La Madueño. Es animalista y vegana. Ha realizado bailes antitaurinos, vestida de flamenca, que deja siempre llorando y emocionada a la gente que la ve, al final de las manifestaciones y en encuentros culturales. Sus movimientos son evocadores, unifica la danza flamenca con el baile clásico, de eso resultan unos movimientos no vistos, danza moderna mezclada con lo folclórico, la experiencia sensitiva es brutal, de ver a esta creadora de coreografías por los animales que, como digo, es profesora de baile, en Castellón Baila.

¿HAY QUE RENOVARSE? HAY QUE RENOVARSE

En mi opinión, el "más de lo mismo", como la performance descrita antes, no hace avanzar. Es un granito de arena pero no ayuda a avanzar. Recuerdo otra performance parecida realizada en Valencia, yo estaba por allí, de joven. Se detuvo un hombre y miró a la gente tirada por el suelo de cualquier forma, y muchos carteles, mucho color y desorden estético. No me extraña que el hombre se me acercó y me dijo:

- Perdone ¿esto es una protesta por las guerras en el mundo?

Y me lo preguntaba en serio.

El tema carteles no se insiste nunca demasiado: que tienen que ser legibles. Por favor, dejemos de usar cartones y rotuladores a las prisas. Pensemos. Detengámonos. Aquello que hayamos preparado situémoslo en una silla o apoyado en una pared y alejémonos, veamos si somos capaces de leerlo y a qué distancia. Eso, esta labor que se realiza al preparar una obra de teatro con todo el atrezzo, al pensarlo desde el inicio primero, desde el texto que crea la obra y su posible representación, no creo lo haga mucha gente, a la luz de los carteles que se ven en alto de las manos en las concentraciones y manifestaciones. En cuanto a los carteles, he visto muchos maravillosos, con letras perfectamente marcadas, con sentido estético y una comunicación deliberada en algún sentido, y logrado. Mas lo que abunda es el cartón pequeño y las letras pequeñas, cuando no las letras de cierto color sobre un fondo de otro color que no se ven, no se leen, y mensajes con imágenes de animales que, de tan pequeñas impresas, quien pasa por la cercanía no sabe qué es lo que se muestra en la cintura o en alto.

Personalmente pienso que estas acciones, y todas las posibles, todo suma, deben seguir. Pero clamo para un avance radical, profundo y sobre todo agresivo.

Hace años creé el Colectivo Grita, consistía en que unas tres personas o cuatro como mucho (el número pequeño es esencial para el efecto antropológico), avanzaban lanzando gritos y aullidos como animales, como ancestrales, desaforados, por ejemplo en un contexto de maltrato animal o por una misma calle, esas personas, claro está, llevarán claramente visible una misma frase en un cartel en las manos. El grito sirve para que la multitud (la tribu) salga a las ventanas y balcones y puertas, al paso de los hermanos y hermanas que anuncian algo (el grito es algo atávico, y se siente como algo profundo, antiguo y plagado de significado inquietante, de "llamada").

Como esto, se pueden crear infinidad de ideas. Imaginemos esto no con cuatro sino con miles de personas gritando sin cesar y con un único mensaje que se pueda leer. O que el mensaje quede luego reflejado en la prensa y dicho en los medios de comunicación, el grito sería como el embajador del mensaje.

Imagino sin cesar nuevas formas de tocar los fondos del interlocutor, del viejo amigo, del antiguo hermano que se sentaba con nosotros hace eras al lado del río, de la antigua vecina que se cruzaba con nosotras hace mundos, entre los árboles primeros. Antes con los ojos el mensaje llegaba, sin hablar.

Ahora no llega más que con misterios y novedades que deben venir de esas lejanías, con las que sólo pueden obtener elementos efectivos las personas muy sensitivas y los artistas.

Busca al animal en tu interior, pero búscalo de verdad. Entonces no necesitarás pedir nada a los sensitivos, a las personas llamadas artistas que han desarrollado su yo más profundo a fuerza de ejercitarlo durante años.

El arte no es más que eso, un ejercitar el inconsciente, la parte más salvaje, durante años.

El movimiento animalista no necesita ciudadanos, necesita salvajes.

Este domingo se realizará una concentración por el Colectivo Animalista de Aranjuez, la activista vegana y antitaurina Teresa Pérez me ha pedido si podían leer en el acto el poema "Tauromañana". Por supuesto les he dicho que sí. Me piden a menudo poemas antitaurinos para las manifestaciones y concentraciones. Traigo esto a colación porque me ha sorprendido gratamente que el cartel que ha confeccionado el colectivo es precioso, potente. He visto su logo y está claramente hecho por un profesional, es poderoso y muy antropológico.

Ese poema... ay... el Tauromañana... tiene tanta vida. Lo he llevado para leerlo a gritos en charlas de taurinos, para reventarlas o entre toros en fiestas de calle donde los torturan, casi nunca me permiten leerlo por completo ya sea porque me detiene la policía o me golpean los taurinos.

El domingo 5 de septiembre de 2021, a las 17: 30 h., frente a la puerta principal de la plaza de torturas taurinas de Aranjuez, resonará en el aire, esperemos que completo, con toda su iracundo salvajismo primigenio.

De todas formas, ese poema lo grabó completo la actriz Nuria Rubio, con su estremecedora voz, y lo subió a youtube, con nombre "no existe la muerte sino sólo el mirar desde otros ojos".

Suerte el domingo, Aranjuez, qué bonito suena tu nombre en el Concierto de Falla.

Salvajes y salvajas de las naciones verdes invictas, os saludo.