La lucha animalista en España: presente y porvenir VII

Si hay un acontecimiento importante, decisivo, que marca un antes y un después, para mal, en la lucha por los derechos y la liberación de los animales en España, es la intrusión entre las filas animalistas de, primero, Leonardo Anselmi, y de su mano, o él de la mano de Weber, la fundación suiza Franz Weber. Digo que no sé quién va de la mano de quién porque haciendo un mero rastreo por la red con los conceptos Anselmi y Weber, la relación se extiende hasta al menos el año 2000.

De Anselmi se sabe muy poco, sólo lo que él vende a bombo y platillo a todo lugar que vaya, que fue el miembro [según él, el más prominente, el decisivo] de la plataforma PROU que logró ilegalizar la tauromaquia en Cataluña. Aún en estas, que son buenas, hubo trampa. Quienes venían luchando por la ilegalización de esos festejos populares de tortura con toros propios de España en Cataluña buscaban ilegalizar, además de la tauromaquia, todos aquellos otros festejos donde se tortura a los toros bajo la luz del sol, o sea todos los llamados "bous al carrer", "toro embolado", etc. La llegada de Anselmi hizo que esas otras torturas, sin sentido alguno en un empuje de abolición tales exclusiones, quedaran sin prohibir. Hubo un "estas os las dejo pero os quito esta otra" que agradó a los violentos, porque era un "intermedio", algo en grises, no drástico; veremos más adelante que la mayor propaganda que lleva por bandera para mostrarse como animalista Anselmi, que es ésta, la de la prohibición de la tauromaquia en Cataluña, lleva letra pequeña, dobles caras. Sin bien es cierto que aquí se logró algo inédito, pero no como proclama Anselmi gracias a él, sino a todos los que lucharon durante años, antes de que él llegase y se enredase con los políticos en maniobras aparte, por lograr la prohibición, pero la total, no la que devino.

En la actualidad en la red de Leonardo Anselmi se dice que es Coordinador General de Libera! y Director de la Fundación Franz Weber para Iberoamérica.

De la Fundación Franz Weber, encontramos en la red que "fue creada en 1975 por el famoso protector medioambiental suizo Franz Weber. La Franz Weber sabemos ahora que financia a sujetos que supuestamente trabajan por los animales en España e Hispanoamérica. Hay dos preguntas fundamentales respecto a este acto presumido altruista. ¿Por qué dicha fundación financia a personajes cuyos hechos claramente -puedo aportar voces de cada país sudamericano y por supuesto de este país (España)- no son efectivos para los animales sino todo lo contrario (como se ha dicho, donde aparece Libera!-Alselmi, siempre es para ir en contra de lo que piden las verdaderas asociaciones de defensa de los animales, o como poco entran para ofrecer a las entidades interpeladas para cambios importantes para los animales (ayuntamientos, juristas, congresos, parlamentos, universidades, colegios de veterinarios...) argumentarios "de humo", como alternativa a lo que de verdad piden los abolicionistas, y que de común se los compran, porque como se dijo con el asunto de la boicoteada por Libera! prohibición de la Tracción a Sangre (con caballos) en Argentina [ver capítulo anterior de esta historia del animalismo en esta misma sección del periódico], ofrecen algo cómodo para los opresores, donde pueden invertir cierto dinero, quedar bien en prensa y respecto al pueblo como que han hecho algo en materia animal, en pactos, en ventas de patentes e ideas, donde sólo ganan los opresores, los políticos especistas y Libera! y sus satélites.

La segunda pregunta sobre la Fundación Weber es ¿por qué si tan famoso es el señor Franz Weber y tantas cosas tan importantes para los animales y el medio ambiente ha hecho (ya falleció y ahora creo la fundación la lleva su hija, junto con el amparo -dirección- para toda Sudamérica y España de Anselmi), no aparecen esos logros de tal señor en la red -donde en búsquedas básicas aparece muy poco sobre la tan desconocida, y sin embargo a lo visto, rica, fundación-?

¿Por qué incido tanto en este punto de Libera!-Weber? Porque una de las razones más importantes de que el animalismo se haya paralizado, en tanto a avance legislativo y en tanto a lucha comunal, es por culpa de la oligarquía con cuyo inmenso culo se ha sentado Libera! por sobre casi todo el animalismo (la mayor parte de los activistas no saben que libera! No es animalista) y la inmanencia que tiene. Libera! tiene muchos recursos humanos, personas que mueven distintas webs y sitios de redes (abren páginas y páginas que ni terminan, el número de páginas que se han abierto desde Libera! es incalculable, sólo hay que sondear en la red y examinar), que se mueven por ayuntamientos, espacios públicos sensibles para pactar cosas, extendiendo sus pasos en decenas, ¿cientos?, de personas por todo el mundo de habla hispana.

Imagino -y así me lo han confirmado- que Anselmi promete buenos futuros para quien reme a favor de sus proyectos contrarios a los animales, en forma de lugares de "poder", tal y como entiende el poder el humano actual, política, fama, incluso poder pertenecer a la cadena de personas subvencionadas en hechos concretos o por un tiempo por la Weber.

Debe ser muy generosa la Weber pues, por lo que sé y me han contado incontables compañeras/os de lucha, hay muchos espantajos (sobre todo aspirantes a puestos en politiquerías, sillitas y otros estatuarios parasitarios) que van detrás de ser merecedoras de dádivas por parte de este ente abstracto y a la vez tan concreto, en tanto a sus hechos, insisto, para nada animalistas.

ALGUNAS DE LAS ASOCIACIONES QUE SE HAN UNIDO U ORBITAN SOBRE WEBER-LIBERA!

Faada es una asociación que últimamente se la ve unida en peticiones, hechos, proyectos, a la firma Weber y a Libera! También se ve mucho a Pedro Pozas, en charlas que da Anselmi: la forma más eficaz de ver cómo se van juntando y haciendo piña es buscar charlas donde aparece Libera! o el nombre de Anselmi y ver quiénes se arremolinan entre los ponentes. Pedro Pozas es el presidente del Proyecto Gran Simio. Quien lea esto y no sepa qué ocurre en la profundidad de esta lucha y la detiene e intenta amansar y pudrir, podrá echarse las manos a la cabeza cuando nombro el Proyecto Gran Simio. Hará mal. Mi única misión es relatar hechos y que cada uno saque conclusiones. Sólo reflejo una realidad. Que desde que apareció la misteriosa fundación suiza Weber, desde que Anselmi comenzó, al parecer, a cobrar un sueldo de Weber, y desde que su primer gran proyecto en contra de los animales, ZOOXXI, que dividió la opinión en el animalismo -los tragasables que pensaron "algo es algo" y quienes nos oponemos a eso como nos opondríamos a una TAUROMAQUIAXXI-, la expansión de la impostura antianimal se ha multiplicado por cien, por mil.

Como Proyecto Gran Simio y Faada, también se ve a asociaciones como Animanaturalis, que tienen alguna relación con Weber (no sé en qué sentido y si ésta ya ha cesado, pero sé que durante un largo tiempo y hasta la más reciente actualidad trabajan conjuntamente en varias cosas con la Franz). La única que no he visto asociada a charlas de gente de Libera! ni Weber es a PACMA. Pero sí a AVATMA, APDDA y otras muchas que alargarían demasiado este punto, información a la que cualquiera puede acceder con dos o tres simples búsquedas en Google

¿Aparecer junto a la firma Weber es signo de trabajar en contra de los animales y sólo por intereses propios?

En realidad últimamente Weber está permeando tanto y Libera!, que pasó un tiempo en que el animalismo "viejo" la caló y se centró en Sudamérica, ahora comienza a sacar cara de nuevo, tanto Anselmi como Libera!, en charlas, actos y hechos en España, como la manifestación última contra Vivotecnia, etc. Buscan "animalizarse" de nuevo ante los activistas. Y de momento lo están logrando.

Entonces como la expansión de su humo está siendo tan rápida y tan amplia, decir que tal o cual que aparece situado al lado de la misteriosa Weber es sospechosa de no trabajar por los animales, puede que sea demasiado arriesgado. Mas lo serio sería buscar su asociacionismo en las redes, de tal o cual entidad con esta gente, y si es puntual, puede deberse a la mera ignorancia; si es seguida en el tiempo y durante años, desde luego el condumio es claro, la unidad de personas que trepan y trepan en busca de poder, de espacios entre humanos que dotan individualmente a determinadas personas en distintos planos de sus vidas, de conquistas, pero para nada, en forma alguna, lo que se hace desde este cuadrilla creciente beneficia a los animales, más al contrario, va en su contra. Quien quiera ampliar información de lo que aquí se dice que hable con activistas de muchos años colombianas/os, mexicanas/os, argentinos... sobre estos personajes, allí, entre la gente que lleva más años en la lucha, tendrán toda la enciclopedia del quiste.

En Argentina, muchos de los carteles que se mostraron en una de las últimas manifestaciones contra la reforma de la ley 14346 [que venía a empeorar la situación de los animales, por todos los actores que en el Congreso tramaron a favor del uso y explotación animal, en dicha reforma es donde en este texto se dijo que Libera! trabajó todo cuanto pudo para que la TAS no se prohibiese], exponían la frase "¡Anselmi fuera de la lucha!"

ESTÉTICA Y ÉTICA DE LA LUCHA

La ética y la estética van unidas. La estética sin la ética no vale nada. La tauromaquia dicen que tiene estética (discutible), más no tiene ética, luego es una bazofia y un crimen, sin arte posible. 

Hemos hablado de intrusos que en la lucha animalista trabajan sin ética animalista, impulsados por intereses particulares y para nada enfocados a quienes dicen defender (los animales) como carta de presentación a los lugares donde meten sus cabezas de humo. Esta gente sabe manejar una estética, una estética que cubra, mediante engaños, la ausencia de ética. Ejemplo es lo colorida (futurista) que es la web sobre el proyecto ZOOXXI, llena de croquis, de dulces representaciones de animales -de colorines y en papiroflexia-, acompañadas de explicaciones de cómo estarán de bien los animales del zoo en el mismo zoo pero a la altura "del siglo XXI" y de la "ética del siglo XXI".

Al final, quien sabe leer, por más que le carguen con dibujitos y fotos que deslumbren con alfileres de luz falsa (como la autopista bajo el sol en su final), entiende lo que hay, el proyecto ZOOXXI es puro humo, además por puro sentido común rechazaríamos la reconversión de un "matadero a la altura del siglo XXI" o "a la altura de la ética de nuestro tiempo".

Pero por desgracia la estética bien lograda consigue atraer y atrapar mediante sus espejismos, mediante sus lenguajes gancho, a mucha gente. En ese sentido estas organizaciones intrusas en el animalismo trabajan bien, tienen buenos diseñadores y un buen uso de la "palabra torcida", que engaña a muchos, pero no a quienes sabemos leer, insisto. O a quienes manejamos el más simple sentido común. Más bien, además, a los que sabemos quiénes son y quiénes no, en este valle.

Tristemente, ojalá en el animalismo en general se dispusiera (más bien se pensase en pedir ayuda a los expertos en cada materia) del material humano de diseñadores y de creadores de ideas (éstas por el bien de los animales), pero no es así.

En general las asociaciones que convocan a más gente preparan manifestaciones desde el albor de la lucha, y de ahí no han salido. La estética de la manifestación, en sí misma, es antropológica: gente recorriendo las calles -el mundo bajo el cielo- gritando una verdad desnuda. Como fenómeno de comunicación siempre es válida la manifestación, la concentración, la protesta. Mas si no se usan recursos novedosos en ellas, se pierden oportunidades clave (cada segundo es clave) para llegar a la gente.

Ejemplo último de manifestación aburrida, y con un "más de lo mismo" es la manifestación que distintas asociaciones han convocado para protestar hace poco contra Vivotecnia, donde lo más "estético creativo" ha sido el poder comprar, por diez euros la camiseta, camisetas de color rojo para llevar mucha gente el color rojo y según Animanaturalis, generar "una marea roja de protesta". A esa manifestación la denominan -por haber pedido a los asistentes que puedan, que lleven transportines, con la posibilidad de liberación de los animales que Vivotecnia (como todos los laboratorios de vivisección) mantiene de rehenes- "La revolución de los transportines".

Cualquier persona que conozca el arte, la comunicación, ya puede ver que ponerse camisetas rojas para protestar contra un maltrato animal es demasiado obvio, y que denominar a una protesta "la revolución de los transportines", aparte de demostrar quien se le ocurriese tal constructo de palabras no tener oído, se carece de la más mínima capacidad de comunicación, porque el concepto causa risa. Pretenden que el concepto de transportín, por la dramaturgia que conlleva (objeto que colabora en transportar a un animal de estar mal a estar bien) ya de por sí cumple toda la comunicación, craso error. Cuando se crea un empeño hay que observar 1) que lo que se plantea sea nuevo y llame la atención, que cause impacto y que quede en el inconsciente el mayor tiempo posible por dicho impacto 2) que si no existen ideas buenas -por carencia de creatividad-, al menos no generar ideas muy malas, malsonantes incluso, "la revolución de los transportines" reúne todas las características, fonética, visualmente, estéticamente, que no debe tener una protesta que busque obtener un mínimo de impacto. Respeto. Sobre todo algo que ni se busca ni se quiere en el animalismo, generar miedo. Toda revolución ha de temerse, y este animalismo genera simpatía, que es todo lo contrario.

Porque quien pensó esto (lo de los transportines) se enfrentó a estos conceptos: animales torturados en laboratorio/s (Vivotecnia) y liberación de estos. Sobre lo mal que están concluyeron llevar en camisetas el rojo de sangre, y sobre la liberación, transportines. No. Eso no es lucha. Porque no hay esfuerzo, trabajo neuronal. Si tenemos entre nosotros algo, es grandes creadoras/os, grandes artistas, creativos inmensos. El cartel de la Manifestación antitaurina del 14 de junio 2015 en Castellón (puede buscarse en la red) es un claro ejemplo de cómo se deben hacer las cosas. También el cartel de lo que se llamó "Asedio a Burriana" es muestra de animalismo real y buen hacer comunicativo, tanto en cartel como de la prensa. Ambos carteles han sido realizado por profesionales del diseño y además animalistas. Pero además, por gente muy creativa, innovadora. Es que además no basta con que alguien que sepa de diseño genere la imagen de una protesta, sobre todo la persona escogida debe ser abolicionista y muy valiente; deben estar a igual altura las ideas generadas con quienes las plasman estéticamente y por quienes idean la estética de los activistas por las calles o lugares donde "invadan", que esa es otra, no se debe andar en las protestas comiendo bolsas de patatas fritas, hay que invadir y generar problema. De lo contrario se habrá movido de sus casas una ingente cantidad de tejido humano para nada, y perderán los animales porque no se avanza con actos que no remueven nada.

Por ejemplo, en las protestas antitaurinas es típico, y tópico, ver a gente en ropa interior negra, desnudos y pintados de rojo, y con cuernos. ¿Habrá algo más evidente y con menos inventiva? Pues sigue repitiéndose en manifestaciones antitaurinas, como elemento estético que creen brillante.

Mucho ha de avanzar la lucha en el terreno comunicativo y estético. No basta con hacer lo mismo a lo anterior cada vez. Sino construir cosas nuevas. En todas las concentraciones y manifestaciones se leen Manifiestos, esto tenía sentido en los inicios, cuando había que sentar unas bases porque la gente no sabía qué queríamos, por qué protestábamos. Ahora, el manifiesto es algo que hace bostezar a los mismos activistas que asisten a la onerosa lectura de ellos. La comunicación escrita posee otros recursos, que no son el manifiesto, mediante los cuales llegar a la gente en formas novedosas. Y si nos alejamos del lenguaje de la palabra, existen otras formas de comunicación artísticas -lo artístico como comunicación suprema en las luchas- está muy descuidado en el animalismo: la danza, el teatro, la música, la poesía.

Puedo decir que me siento muy agradecido por las peticiones de poemas para ser leídos en distintas manifestaciones, pero para llegar a esto dura ha sido mi lucha por introducir el concepto [que curiosa y chocantemente es lugar común en las luchas sociales españolas, la presencia de la poesía en la lucha]. Recuerdo que en los inicios cuando alguien me presentaba como poeta animalista, juro que reinaba el silencio, la gente pensaba: ¿versos para los animales?

Cuando la poesía, y la música, y ambas unidas mejor, han formado parte de todas las luchas de la humanidad sobre todo en las contemporáneas, y sobre todo en España (como dije), donde la "nueva canción" se abrió paso para que cantautores protesta elevaran a cantos hermosos y que abrían los pechos de los rebeldes, poemas de grandes poetas disidentes de tal o cual opresión.

De poemas de Alberti, Celaya, Neruda, se han hecho tantas canciones protesta en la posguerra española, que es difícil seguirles la pista. Sobre todo de quien más canciones se han hecho es de Miguel Hernández, "el poeta del pueblo", sus canciones han servido en la misma guerra civil para llenar el pecho de los soldados contra el fascismo de flores, poesía y fuerza. Hoy, que reconocemos que nuestro "pueblo" es más grande, necesitamos canciones que canten a ese pueblo más grande.

En el terreno del dibujo, el animalismo posee ilustradoras/os y pintoras/os de primer orden. En cambio sólo se les pide ayuda en determinadas situaciones. Gente del teatro, de la dramaturgia.

Para preparar una performance, no todo el mundo puede decidir qué hacer, hay que contar con expertas/os en dramaturgia y estética. Pero no se hace, se inventan performances grotescas y que atraviesan con grosor la fina línea que quien no conoce el terreno dramatúrgico desconoce, existe entre lo trágico, lo terrorífico incluso, y lo cómico. En efecto, sin cuidado y experiencia comunicativa, algo que un grupo de personas creen que va a llamar la atención en la prensa y para los destinatarios, un pueblo especista, logra el efecto contrario, porque lo que causa la más mínima risa rompe cualquier discurso, por muy claro y poderoso en abolicionismo que sea.

Además de esas fallas que imperan en el animalismo actual, de descuido de la comunicación escrita y estética, también se cometen fallos en otros sentidos. Por ejemplo, emergieron carteles animalistas sexistas, otros con contenido que parecía patriótico (el fascismo y el racismo también se está colando en el animalismo), otros melosa e insoportablemente "mascoteros"...

Recuerdo un cartel que apareció de Animanaturalis contra las pieles. En él aparecían activistas desnudas con el slogan -cito de memoria-: Prefiero ir desnuda que con la piel  de un animal. Hasta ahí genial. Pero como PETA y su uso de la mujer como "objeto bonito", en dicho cartel las activistas aparecían no en postura de activistas, que la activista animalista es una mujer dura (esta lucha por algo está compuesta en su mayoría por mujeres, y dichas mujeres la hacen todo lo grande que es), sino en posturas blandas, como de revista de modas, para mí era evidente que se explotó el "llamado sexual" de mujeres bellas más que la figura de animalistas mujeres dispuestas a luchar. Lo dije en público, que esa instrumentalización de la mujer como objeto no podría darse en una lucha que se supone evolucionada como el animalismo, porque el cartel era machista. Me llovieron protestas, insultos, era ira lo que se destilaba en conjunto; decían que por disentir en esa forma en que habían fotografiado a las chicas, yo afirmaba que parecían "putas".

Esto demuestra que el animalismo en general no es una lucha, como vengo mostrando, honesta, humilde, que desee crecer, abierta a la crítica constructiva, sino sectaria, que cierra filas cuando alguien pone en duda alguna idea como fallida. No la idea de aparecer desnuda/o diciendo Mejor desnudo/a que con pieles, que esa idea es estupenda, sino por la postura con que las hicieron posar a las chicas (y por supuesto ellas aceptaron, hubo una connivencia -errores los tenemos todos-) para una idea cuyo resultado final destiló con claridad machismo. Son cosas muy distintas. La lucha por los animales es un asunto muy serio, y no me importa recibir críticas por decir lo que pienso, porque creo hablar por ella/os siempre. Y así como de mis creaciones literarias y por mis hechos activistas se puede disentir u objetar cosas, que yo agradezco y permito -gente puede pensar que mis hechos son demasiado radicales, que mi verbo es muy agresivo, dicen otros-, también espero que mis opiniones sobre lo que veo sean admitidas de igual forma, con mente abierta y la igual humildad con que yo examino todo, hasta la forma de mi sombra, que de no ser tóxica para la capa de ozono la pintura, mi sombra la pintaría de azul, aquí lo creativo constante, o creatividad o nada. Pero no sólo en las luchas, en todo ámbito de la vida.

Al fin y al cabo creo que a los que estamos aquí, de verdad, por los animales, nos mueve el mismo fin. Los sectarismos y los oídos cerrados a lo que no sea el dictado de "tu asociación", no ayuda, eso es secta.

La lucha animalista debe abrirse, nutrirse, volver a la humildad y contar con las/os mejores en cada terreno para que las protestas y actos sean de verdad temibles y novedosos.

Salvajes.

Pensemos, ¿qué rodea a los animales libres en su casas abiertas bajo los cielos?

Lo que los humanos para denostarlos en su mundo mejor denominan estado salvaje.

La etimología de la palabra salvaje es: "Préstamo (s. XIV) del occitano o catalán salvatge y este del latín silvaticus ‘propio del bosque’. De la familia de selva (V.).