Palabras a incorporar en el diccionario de la RAE
ABASCAR Abasca quien siente hervir su sangre al ver una bandera y al escuchar el himno y la palabra España. Loa abascos consideran que todos deben sentir esas mismas emociones y muestran rechazo visceral hacia quienes no comparten su pensamiento. Quienes abascan consideran que la unidad de la patria lo es desde siempre y es eterna, aunque en su juventud hayan visto independizarse provincias africanas gobernando un militar. Los abascos, como los ayuscos sienten repulsa hacia lo público. Los abasquistas suelen despertarse por la noche gritando ¡viva el rey! Un rey al que perdonan todo incluso sus fraudes al fisco y el cobro de comisiones ilegales.
AYUSAR Ayusar es utilizar el cargo público como ariete para la crispación. Quien ayusa habla de la necesidad de llegar acuerdos pero los rompe al día siguiente. Quien ayusa habla de opresión y grita libertad, y habla de caos. Su lenguaje es muy simple: Si hay mando único es dictatorial. Si no lo hay es una dejación de funciones. Ayusa quien dice tener médicos y rastreadores preparados y luego busca voluntarios para rastrear y no encuentra médicos. Los ayusos manipulan los tests como sus antecesores cambiaron de lugar los medidores de la contaminación para que los resultados fueran presentables. Los ayusos creen que todo debe ser privado. De entre las varias opciones de hacer política prefieren la marrullera. El lenguaje ayuso es beligerante e incisivo.
AZNAREAR Presumir de lo que cree que hizo bien e incluso creer que todo lo hace bien, aun siendo consciente de que se hizo mal. Quien aznarea suele soltar sentencias y se escucha a sí mismo en actitud narcisista complacido de haberlas soltado. Los aznaristas creen que todo vale para recuperar el poder siguiendo su máxima “Que España se hunda que nosotros ya la salvaremos”.
CASADEAR Pretender que los demás crean que uno es de centro mientras habla y actúa yendo más allá de la ideología de extrema derecha. Quienes casadean se declaran constitucionalistas pero toman de la Constitución solo aquello que les interesa y no tienen problema en incumplirla bloqueando determinados artículos. Exhiben patriotismo pero un patriotismo del que se olvidan para ir en Europa contra la patria.
CIUDADEAR Ciudadea quien anda perdido en su ideología. Unas veces se declara socialdemócrata, otras liberal y otras de centro. Ciudadea quien se califica de centro derecha o de centro izquierda sin haber visto ni saber dónde está el lugar en donde pretende ubicarse.
GONZALEAR Actitud, durante la vejez, de hablar de valores, dar consejos y hacer discursos pretendiendo influir en los ciudadanos. Se dice que gonzalea quien pretende olvidar que los votos que recibió fueran utilizados para hacer lo que prometió no hacer.
IGLESIAR Iglesía quien utiliza su oratoria para lanzar dardos envenenados para hundir a sus adversarios o ponerles en evidencia. Para iglesiar es necesario tener una buena formación, una buena dialéctica y una buena dosis de mala leche. Los iglesistas deberían saber que, como en la música, los silencios forman parte de la melodía,
SANCHEAR Sanchea quien se enfrenta al poder de una estructura y gana el envite. Sanchea quien promete a sus amigos no acercarse a la ribera y acaba descansando en ella. Los fieles al sanchismo tienen el 800.000 como número fetiche.
TORREAR Sinónimo de puigdemonar. Torrear es permanecer hipnotizado ante la palabra independencia y gobernar pensando sólo en cada una de sus letras, olvidando resolver los problemas de la ciudadanía como la sanidad y la educación ¿faltan médicos? Su respuesta es: “Porque no somos independientes” ¿Hay muertos por la pandemia? “No los habría con la independencia.”
TRUMPAR Acción de mentir sin escrúpulos y de forma reiterada y constante un día sí y otro también. Se dice que trumpea quien, ante una foto de un grupo de cien personas, afirma sin complejos que hay allí más gente que en otra foto donde se ven miles. Trumpea quien miente varias veces al día con desfachatez y sin pestañear.