Continúa la Semana de Pasión en Génova
El domingo de Resurrección no ha llegado a Génova. Tras los “casos aislados que vienen desde hace años”: Panamá, Gürtel, Canal Isabel II, Bárcenas, Púnica, Fabra, Taula, Matas, Aristegui, Rato, etc. aparece ahora un nuevo escándalo mayúsculo: el derivado de la operación Lezo, en la que la guardia civil y el juez Velasco, tras meses de investigación, detienen a Ignacio González y otros doce imputados, entre quienes están su hermano y su cuñado, con su mujer investigada. El caso saca también a la luz la manipulación de la justicia y el papel de la prensa.
Quien fue número dos de Esperanza Aguirre arrastra un largo historial nada limpio que dura ocho años: la investigación en curso sobre la compra de un ático lujosísimo en Estepona imposible de pagar con su sueldo; la construcción de un campo de golf en Chamberi adjudicado a una empresa de su hermano; el espionaje en un paraíso fiscal en donde le pillaron con bolsas de billetes (él los llamó toallas) que salían vacías después de entrar en un banco en Cartagena de Indias. También se le han realizado investigaciones sobre un viaje a Suráfrica pagado por un empresario al que se le adjudicó una contrata pública.
Pese a todo ese paquete, nada presentable, el partido no se ha inmutado y Esperanza Aguirre seguía diciendo de él, hasta hace dos días (ahora, de nuevo, teatraliza su asombro) que era una persona intachable, ejemplar, íntegra y honesta sin la menor sombra de duda, víctima de una campaña mediática. Por él pondría la mano en el fuego.
Claro que la “lideresa” se mueve muy bien en el fango (léase mi artículo publicado en esta misma página el pasado 4 de Abril “Esperanza Aguirre, ésta es su vida”) y sabe de qué personajes se ha rodeado siempre, antes del tamayazo y después del tamayazo, en la ciénaga de Madrid (similar a la de Valencia), con sus tres secretarios generales (Romero de Tejada, Granados y González) imputados. El primero fue condenado a un año de cárcel. El segundo está en prisión desde 2014 y el último (Granados) acaban de trincarle.
Ahora a esta persona (uno más en el eslabón de la larga cadena de los que se creen impunes, dicen ser liberales y manipulan y denostan de lo público y lo utilizan para saquearlo, llenar su apetito insaciable de enriquecimiento) se la acusa de la rocambolesca operación de comprar una empresa brasileña, pagando, desde la empresa de agua de Madrid, 21,4 MM que circularon, antes de llegar a su destinatario, pasando por Colombia y Uruguay para acabar en Suiza. Una empresa que al mes siguiente de la compra valía solo 10 MM y que acabó dejando un agujero de 34 MM en el bolsillo de todos los madrileños.
Ante ese nuevo escándalo el PP se limita a dejarlo sin militancia mientras ataca a los jueces, habla -otra vez- de casos aislados y se lamenta de “los militantes que traicionan y difaman el espíritu de un partido de honradez y ejemplaridad” (Rafael Hernando).
Al lado de ese mayúsculo nuevo escándalo, el PP se ha topado con la sorpresa de que la justicia ha reclamado a Rajoy para que declare como testigo sobre la financiación en “B” de su partido tal como le han apuntado varios testigos: Bárcenas, Correa y García Pozuelo.
Por la reacción del partido es evidente que no les ha sentado nada bien dicha decisión judicial, a pesar de que “son tan respetuosos con ellas y colaboran tanto con la justicia”. Ante eso cabe esperar que cuando declare Mariano como testigo utilice el mismo artificio que Esperanza Aguirre: “Yo de eso, no sé nada de nada. Son manzanas podridas. De esos temas se ocupaba el fontanero o el jardinero. Ellos sabrán”.
Por temas de corrupción, la citada Esperanza Aguirre, estos mismos días, acude a declarar, como testigo, sobre el caso Gürtel y a su lado también ha de presentar declaración Edmundo Rodríguez presidente de La Razón y Francisco Maruenda, director, un entusiasta tertuliano defensor de Mariano Rajoy y los casos de corrupción de su entorno. Acude para que declare sobre unas supuestas coacciones a Cifuentes para que retirara su denuncia sobre el escándalo del Canal Isabel II. En una grabación se escucha decir a Maruenda: "Me ha llamado la zorra de Marisa por la leche que le hemos dado hoy. Le ha hecho mucha pupa. Marisa quiere saber si es una campaña. Evidentemente he dicho que no, no hace falta reconocerlo, no es tonta. Le dije: hombre, si hacéis las cosas mal, pues nosotros... Mañana le damos otro viaje a Cifu [Cifuentes]". Está claro que les ha dolido la denuncia de Cifuentes, pero ella solo ha sabido aprovechar el momento colaborando de verdad con la justicia. Los escándalos habían empezado un año antes.
En una semana de pasión tan cruda para el partido del gobierno, TVE y otros medios creen haber hallado un suavizante adecuado: las manifestaciones en Venezuela, los gases lacrimógenos para reprimirlas, sus manejos de los jueces y la notica de los ERE fraudulentos en Andalucía por las que se imputa a un ex director general. Nos enfocan ahí la mirada de distracción mientras aquí acabamos de saber que el Fiscal General del Estado, José Manuel Maza ha dado el visto bueno para que Manuel Moix, Fiscal Gral. del Estado tratara de impedir la investigación en el domicilio de González, algo que no logró porque se le rebelaron 20 fiscales. (Conversación entre González y Zaplana: “A ver si ponen pronto a Moix porque es de nuestra confianza”).
La semana, en el exterior, se completa con las próximas elecciones en Francia, en donde puede ganar la extrema derecha, las peligrosas locuras militares de Trump y el gobierno de Víctor Orban en la Europa de los “valores democráticos.” Una Europa que, como Trump, se conmueve con fotos de niños gaseados en Siria y hacina y maltrata y hasta roba a quienes van en busca de acogida en un espacio en donde supuestamente se respetan los Derechos Humanos. Pero ni Orban, ni Trump, ni Le Pen son ningún peligro para los poderes económicos. Con ellos no peligran sus paraísos fiscales ni sus privilegios.
La corrupción según la CNMV nos cuesta 45.000 millones al año. Son ya 175 los casos de corrupción asociados a partidos políticos en el poder (copados en su inmensa mayoría por el PP), pero todo eso nada importa a quienes gobiernan y luego se benefician, vía puertas giratorias, por haber actuado como lo han hecho (Aznar, Acebes, Zaplana, Piqué,…) y por seguir defendiendo el “establisment”. Ellos viven muy bien en su burbuja y en su lujo. Nada debe cambiar. Lo denunciable son las pequeñeces de otros.
La esperanza hay que buscarla en la UCO y la honestidad de bastantes jueces. Con los votos es muy difícil porque sus adeptos, lamentablemente, se lo perdonan todo.
Efectivamente "MIchel" y J P son amigos y no puede ser de otra manera por cuanto son dos caballeros. El problema es que uno habla de la cabeza del elefante y el otro de la cola. y difícilmente podrán llegar aun acuerdo. Está en el lector verle las cuatro patas, la cabeza y el lomo. . El sr. Bataller junto con el papel higiénico dejó otras consideraciones parecería que a usted solo le interesó lo del papel. JP tienes material para explayarte. Un abrazo mi querido amigo.te sigo leyendo con mucho interes.