Tender puentes ¿a quién y para qué?
Porque aún no se han terminado los Congresos provinciales y locales del PSOE en toda la geografía española., soy de los que piensan que hay que seguir complementando con sus resultados en la elección de los órganos de dirección así como de los Secretarios/as Generales, eligiendo a quienes estén totalmente identificados con las resoluciones del 39 Congreso Federal del PSOE.
Y en esa imprescindible tarea para hacer posible “la Unidad del PSOE”, como requisito para lograr “la Unidad de la izquierda”, conviene recordar lo que ya apuntaba en mi artículo “Sin rencor…pero sin olvidar”.
Porque la etapa de desestabilización política del PSOE fue provocada inicialmente por la dimisión de 17 miembros de la Comisión Ejecutiva, que apostaban por el mantenimiento de un proyecto político caduco para el PSOE, que se manifestó con el “GRAN ERROR” de facilitar la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, y etc., etc.
Y todos esos “mal llamados Baroncillos”, capitaneados por Susana Díaz y el lamentable apoyo de los “Ex” de tristes actuaciones, junto a la campaña mediática dirigida fundamentalmente desde El País, apostaron por la continuidad de la dinámica de entendimiento con el PP, el partido más corrupto de la historia de nuestro país desde los iberos y los celtas hasta nuestros días.
Y para ello, no vacilaron en “Inventar embustes y amenazas”, para justificar su vergonzosa actitud, pretendiendo argumentarla con “el evitar la convocatoria de unas nuevas elecciones y una pérdida de los resultados electorales”. El tiempo ya se ha encargado de demostrar cuan equivocados estaban.
Mientras Pedro Sánchez y la mayoría de militantes socialistas se opusieron a esa “apuesta vergonzosa por lo equivoca” y demostraron que tanto el PSOE como una buena parte de los partidos socialdemócratas europeos, estaban emplazados ante el reto de demostrar a los ciudadanos que no solo los partidos que históricamente habían tenido un papel positivo en la conquista de los equilibrios sociales y en la lucha por la libertad y la justicia social, ahora, tenían que demostrar que eran capaces de elaborar con proyectos y propuestas que hicieran frente a los grandes problemas y retos de nuestro tiempo.
Y esa ha sido la gran confrontación que se ha dado en el seno del PSOE, entre dos proyectos radicalmente diferenciados: “La opción del seguidismo de las practicas inservibles por agotadas, que han sido el factor fundamental del declive electoral de los partidos socialdemócratas en Europa, y por supuesto en nuestro país”. Y el proyecto de “Una nueva Socialdemocracia” que Pedro Sánchez ha defendido a lo largo de la campaña de Primarias y que se ha culminado con el apoyo mayoritario del PSOE expresado en las resoluciones del 39 Congreso.
He aquí, la gran tarea que acometieron los militantes del PSOE que supieron movilizarse para recuperar los valores socialistas y la visión y misión ideológica que la tienen propia, como un partido de izquierdas con el convencimiento de que es al PSOE a quien corresponde la gran tarea de acumular la fuerza social transformadora necesaria, para acometer la renovación democrática del Estado, entre otros retos de primerísima urgencia.
Y si a la tarea de alcanzar la Unidad del conjunto del PSOE, - yo soy consciente - que va requerir un esfuerzo paciente, sin rencores pero firme desde Pedro Sánchez y la Comisión Ejecutiva, para lograr convencer a quienes “conspiraron contra él” y favorecieron la investidura de Mariano Rajoy, de que no hay otro modelo de Proyecto socialista, que la aplicación y el respeto a las resoluciones del 39 Congreso, y que estas son de “Obligado cumplimiento” para todas las organizaciones socialistas en este país. Ahora se le quiere llamar “Tender puentes”, pues llámenle como quieran cada uno, pero para mí, lo importante es no perder de vista lo que se ha vivido, y cuáles son los objetivos del PSOE.
Como plantea el título de estas reflexiones “Tender puentes… ¿A quién y para qué? Es decir, que sin prisas pero sin olvidar esa obligación para todos los socialistas, se ha de continuar presentando alternativas claramente identificadas con las resoluciones del 39 Congreso, en todos los Congresos Provinciales y Locales. Porque lograr las condiciones políticas para la regeneración política del PSOE, requiere - como está sucediendo ya – la recuperación de la esperanza del electorado que es, quien en definitiva va a decidir si Pedro Sánchez llega a La Moncloa, o si se van a prolongar las “fracturas y las confrontaciones” que han caracterizado la etapa previa al 39 Congreso.
Ante ese reto, que ahora algunos han denominado “Tender puentes” sin menosprecio a esa labor, llámese como se llame, tampoco hay que menospreciar, ni olvidar en el ejercicio de esa importante tarea la duda bien fundada, de quienes como yo, no tenemos ninguna esperanza de que algunos promotores del “Golpe al PSOE” como Page y otros, vayan a acatar las resoluciones del 39 Congreso, y por supuesto vayan a “Reconvertir a Susana Díaz”.
Porque estos “Siniestros personajes”, no es que hayan cometido un “error histórico”, como así ha quedado demostrado, sino que lo más grave es que ellos son: “El error”, y esa característica de sus ADN, es lo que ya se está constatando especialmente por parte de Susana Díaz. Precisamente por ello, creo que, hay que tener meridianamente claro “A quien se le tiendan puentes….y para qué”
La tarea que tiene por delante “el nuevo PSOE”, no es tarea fácil, algo que se pueda hacer en cuatro días, ni tampoco dejar en manos exclusivamente de Pedro Sánchez, por la sencilla razón de que, más allá de las capacidades e inteligencia política de este gran líder, se necesitan de la totalidad de afiliados para lograr lo que con tanta urgencia necesita el país: “Sacar del Gobierno a Mariano Rajoy, que ostenta el vergonzoso record de ser el Presidente del partido más corrupto de Europa”.
Ese es un gran reto, el que tiene el PSOE, pero también, el conjunto de la sociedad que con su voto en las próximas elecciones tiene que optar por otorgarle una mayoría suficiente al PSOE, para hacer posible el Gobierno progresista cuyo Presidente se llame Pedro Sánchez.