Las inservibles actitudes del independentismo
Cuando ya se han cumplido más de dos meses de las elecciones autonómicas del 21-D, la situación real en Cataluña sigue siendo “la del fracaso total y absoluto del Proces”, y como consecuencia de ello, es que la realidad económica, social y política en Cataluña sigue siendo doblemente grave.
Doblemente grave, porque tras el fracaso de “las ilegalidades cometidas”, han sido constituidos los procesos jurídicos, que son sobradamente conocidos: Fugas de Lideres, encarcelamiento de unos, y en libertad bajo fianza otros, han constituido un escenario de gravedad para los catalanes y Cataluña.
Pero una flagrante gravedad, es que se continua,sin haberninguna propuesta, “Ninguna”, ni creíble ni posible, por sus ilegalidades previsibles, que surja de la fractura y divisiones internas de las fuerzas políticas independentista, Junts x CAT, ERC, y CUP,
Sin ningún programa de Gobierno, ni más propuestas, el independentismo solo está en la parodia, en imponer su imitación burlesca de lo que deberían ser las instituciones del Govern y el Parlament, y que son el fruto de las “Maquiavélicas estrategias” de los acuerdos paridos recientemente, entre unos y otros, pero que van a ser imposibles porque ni son respetuosas con el marco legal y normas constitucionales, y por lo tanto no van a servir de ninguna efectividad jurídica.
Porque querer nombrar a Puigdemont “President simbólico” ante la imposibilidad de investirlo en el Parlament, como se pretende, y además poner en marcha un “Sistema institucional en Bruselas” tal y como se desprende de lo decidido entre Junts X CAT, ERC, y la CUP, que contaría con un Consejo de la República y una Asamblea de Representantes de la República, en Bruselas, no dejan de ser otra fantasmada, como las muchas llevadas a cabo por el independentismo.
Y la “Patética y esperpéntica renuncia provisional” a presidir la Generalitat, y que haya propuesto la candidatura de Jordi Sánchez – hoy encarcelado – para ocupar la Presidencia del Govern, no tiene nombre. Pero, no hace falta ser jurista para advertir, que las dificultades para ejercer el cargo, van a ser mínimas, tirando a imposibles. Pero hay que reconocer que el golpe de efecto que “Un fugado de la justicia, proponga a un encarcelado, para que sea investido” tiene su órdago. Vamos, su gracia.
Y las actuaciones de la mayoria independentista, ayer en el Parlament, me parece que ya se han situado al borde de la ilegalidad, y en todo caso, no han supuesto ninguna actitud positiva para instaurar un Govern y un funcionamiento democrático, en defensa de todos los catalanes.
Lo que se ha evidenciado, es que el independentismo, mejor dicho, sus líderes, siguen empeñados como se demostró ayer en el Parlament en la resolución aprobada, que afirmaba que las elecciones del 21-D ratificaron una “mayoria favorable a la constitución en Cataluña de un estado independiente en forma de República y legítima a Puigdemont para acceder al cargo”.
Y eso es, “más de lo mismo”, la reincidencia en el “Proces”.
Y si siguen por ese camino los líderes independentistas. Se va a continuar sin Govern, perjudicada la economía y los intereses de todos los catalanes. Y por toda esa reiterada incapacidad, de los líderes independentistas que solo han logrado un rotundo fracaso del “Proces”. Sin lugar a dudas, yaen los últimos sondeos en Cataluña, las preferencias del independentismo han disminuido, y van a seguir disminuyendo, ante el escenario creado por la “esquizofrenia política” de los Puigdemont, Junqueras, y la más reciente fugada Anna Gabriel de la CUP.
Pero las negociaciones que están llevando a brazo partido, los partidos separatistas para llegar a un acuerdo que les permita Gobernar en Cataluña, se produce en paralelo con el derrumbe de la lógica fabricada a lo largo de los últimos años. La acción de la justicia está obligando a replegarse a los protagonistas del “Fracasado Proces”.
Y por eso, ya se está manifestando como el secesionismo retrocede, y que aunque con muchas contradicciones estoy convencido que la salida a la crisis independentista, va a requerir para dejarlo reducido a la más mínimas expresiones, que la acción de la justicia se culmine con los juicios y las sentencias condenatorias y la inhabilitación para ejerce un cargo público, propias, que los Magistrados determinen.
Pero también se necesita la acción permanente de los partidos constitucionalistas, oponiéndose a las intenciones de “Repetición de lo mismo” y realizar la labor de pedagogía política que cada día demuestre que el “Independentismo” es el enemigo jurado del pueblo catalán, y por supuesto de todos los españoles.