Las instalaciones de golf, proyectos de desarrollo sostenible (I)
En la ponencia sobre Desarrollo Sostenible, que abordaba en el último Congreso del Partido Popular de Castellón, afirmaba sin ningún tipo de paliativos, que el desarrollo sostenible de nuestra comunidad pasaba por la implantación de determinados proyectos e infraestructuras que van dirigidos al aumento de la calidad de vida de nuestros ciudadanos, y entre ellos la promoción de proyectos de campos de golf en nuestra provincia y en nuestra Comunidad Valenciana.
Es un hecho claro que la progresión del golf como fenómeno deportivo, social y turístico ha sido muy importante en estos últimos años. El numero de licencias para su práctica se acerca a las 20.000, con un incremento del 65% en el periodo 1997-2004, situándose como uno de los cincos deportes más practicados por los valencianos y como el deporte de mayor crecimiento.
Si aquí agregamos los practicantes no federados y sobre todo los turistas atraídos por la posibilidad que ofrece nuestra climatología de practicarlo durante todo el año, nos encontramos con una cifra de demandantes de instalaciones de mas de 100.000, que sin duda se puede duplicar en los próximos cinco años.
De acuerdo con estas expectativas, la demanda de nuevos campos de golf ha experimentado un crecimiento extraordinario. En los últimos diez años se han triplicado las instalaciones existentes y hay más de 70 solicitudes para nuevas instalaciones que se añadirían a las 21 existentes en este momento. Con ello todavía andaríamos lejos del número de instalaciones de Cataluña o de Andalucía.
Ayuntamientos de signo político diferente y de todos ellos, Burriana-PP, Moncófar-PSOE, Almenara-PSOE, Benicàssim-PSOE, por citar algunos de ellos, tienen proyectos presentados en la Conselleria y por tanto resulta paradójico el posicionamiento en contra de estas instalaciones que algunos partidos, PSOE o Bloc, muestran en las Cortes Valencianas.
Debemos pues plantear con toda seriedad y fuera de la demagogia política que algunos líderes sin sentido utilizan, que las instalaciones de golf son instalaciones que encajan dentro de los parámetros del Desarrollo Sostenible y que pueden ser decisorias para un futuro modelo turístico de la provincia de Castellón y de la Comunidad Valenciana.
La excelencia de nuestro clima, especialmente en invierno, la fácil accesibilidad con cualquier medio de transporte, la calidad ambiental de nuestro territorio, la experiencia en turismo y el entorno social, podrían hacer de Castellón y la Comunidad Valenciana destino preferente del denominado “turismo de golf”, uno de los más rentables desde el punto de vista económico, social y ambiental.
si esta demostrado, desde el punto de vista del agua, que un campo de golf (con su hotelillo si quieres) en si no es tan ni tan malo.. ahora.. si ese campo de golf viene acom`pañado de una urbanización para miiles de personas.. entonces ahí el consumo de agua se dispara.. y se multiplica por diez.