El envase podrá ser de cava, pero lo han rellenado de gaseosa
El Nazareno puede que sea humano; pero su mensaje evidentemente es Divino.
Prueba de ello es que, a pesar de haber transcurrido dos milenios desde su alumbramiento, la vigencia de su contenido sigue siendo absoluta.
“No es bueno que la gente medite”, pensaron los “pastores” que tan democráticamente nos conducen al precipicio.
Preocupados por ello, concibieron la genial idea de crear al adiposo y coca-colero Papá Noel.
Un estúpido gordinflón que, habiendo tantos niños descalzos, llena de regalos las medias de los calzados.
Pobre la sociedad en la que el estómago predomina sobre el cerebro y la riqueza se mide por lo que a unos les sobra, y a los otros les es imprescindible.
Si bien explorar el universo exterior es conveniente, conocer el universo interior que sí tenemos a nuestro alcance, resulta impostergable.
Es manifiesto que las bases con las que se sustenta nuestra sociedad se están agotando y que habrá que buscar nuevos senderos que racionalmente nos permitan prolongar nuestra permanencia en este mundo.
Evidentemente prosperidad y felicidad, necesariamente no son sinónimos.
La prosperidad no está al alcance de todos.
La felicidad, sí.
¡Os deseo de todo corazón que, en este año 2011, encontréis la vuestra!
Efectivamente tiene Vd. razón. Tales de Mileto cuando decía que lo más fácil era dar consejos, en su inmensa sabiduría se refería a los consejos fáciles y gratuitos. Vd. sin duda alguna se refiere a lo extremadamente difícil que es dar "buenos consejos" y para eso uno se tiene que conocer muy bien a sí mismo y habla por su propia experiencia, por sus sentimientos y naturalmente por su lógica, pero nunca por su imaginación. Es un placer comentar con Vd.