Barajar de nuevo

Las cartas sobre la mesa... y boca arriba.

Después de observar la actitud expuesta por los ocasionales tahúres de la política española, no cabe otra, que barajar de nuevo y que sea el propio pueblo soberano quien determine y asuma las responsabilidades de su destino.

Desde la lógica más elemental percibo que nuestros representantes nos dicen: “Tú paga, que nosotros invitamos”.

Parecería que Podemos es algo más que un eslogan. Cuando el Sr. Sánchez se dio cuenta, ya era tarde. Para él y para el PSOE.

En fin, no nos equivoquemos. La lucha es por un sillón en la mesa.

¿El menú? ¡Ah! El menú viene servido de Bruselas.

Dar opiniones sin ser pedidas es como arar en el mar. Pero... cuando veas las barbas de tu vecino arder, pon las tuyas en remojo.

Tras cuatrocientos años de permanencia en Cuba, España es barrida del continente americano.

América para los “americanos”. La Doctrina Monroe se impone, transformando a América del Sur el patio trasero de Norte América.

Cincuenta años después, en los manglares de Las Coloradas, sopla una brisa Castrista, la cual reaviva las ascuas hispanas que han de inflamar a toda la América Latina.

Castrismo + comunismo + nacionalismo + fascismo + populismo = “PROGRESISMO”.

Las ideas son eso, ideas. Pero lo que realmente importa son las realidades.
Detrás de un “mesías” puede esconderse un ignorante, un farsante, un sinvergüenza o un utópico. Todo junto o por separado.
En el Uruguay el señor Mújica pateó el tablero constitucional y tuvo la habilidad de aprovechar las debilidades y ambiciones de los demás jugadores para buscar un jaque mate. Y ante el desconcierto general, lo encontró.
Como en el iceberg en todos los entes, los cambios son ocasionados por el desgaste. La mole de hielo dará sucesivas vueltas hasta que desaparecerá en el océano infinito.

Afortunados los viejos que con la juventud pierden la memoria.

Que todo sea para bien y usted que lo vea.