Toros y tambores, mis dos pasiones
Pido disculpas a mis asiduos lectores por la interrupción brusca en mis crónicas taurinas de esta Magdalena, pero a veces coincide todo y uno no puede doblarse en dos, y es que este fin de semana han coincidido mis dos pasiones, los toros y los tambores, y precisamente en Alcora se han celebrado las Jornadas Nacionales de Tambores y Bombos de Semana Santa, convirtiéndose Alcora en la Capital del tambor y el Bombo semanasantista de España, y por mi condición de haber sido el promotor de estos eventos hace ya más de treinta años en Alcora, y sobre todo por que me habían elegido pregonero de las presentes Jornadas, no he tenido tiempo material para poder escribir día a día lo que acontecía en el ruedo. Eso sí, hoy ya más tranquilo, cuando todavía resuenan en mis oídos los sonidos del tambor y el bombo que han invadido las calles y plazas de Alcora, haré un pequeño resumen desde donde me quedé.
El miércoles 14 hubo una importante novillada del Parralejo, que triunfó por segundo año consecutivo en Castellón, haciéndonos disfrutar de la bravura, nobleza y trapío de sus novillos, donde pudimos ver tres estilos diferentes de novilleros que nos hicieron pasar una buena tarde de toros. La más floja Conchi Ríos, con una desastrosa brega por parte de sus subalternos que mermaron mucho las posibilidades de triunfo de su matadora. Bien López Simón, decidido y con un toreo lento y dándole sitio a sus novillos, en este caso si que tengo que felicitar a su cuadrilla por hacer una buena brega. Y me gustó mucho Fernando Adrián con un toreo de largo, de poder, de frente, con entrega, decisión y buena técnica.
Como negativo la depauperada suerte de varas, donde el desconcierto de las cuadrillas, la mala brega y la peor lidia ha sido la norma, pero lo que es peor, no se ha visto ni un solo quite, y eso es muy malo para la Fiesta, pues nos priva a los aficionados de una de las partes más hermosas y vibrantes de la corrida, en este caso novillada, y si ya empiezan así el futuro lo veo muy negro. Como el reglamento dice que se puede cambiar el tercio con un solo puyazo en una plaza de segunda como es la de Castellón, ya no ha lugar al correspondiente quite del siguiente compañero de turno. Entonces nosotros que pagamos tanto o más que en plazas de primera nos roban la competición en quites. En el caso de que el toro entre una sola vez al caballo, debería estar permitido que al cambio de tercio pudiera salir el siguiente matador a realizar su quite correspondiente.
El Jueves 15 tuvimos una infame corrida de toros de José Luis Marca, tanto en su anovillada presentación como en su escasa fuerza y pésimo juego, donde El Cid menospreció al público de Castellón brindando la muerte de su segundo torito, más pequeño que el más chico de las novilladas de los días anteriores. Si la faena que hizo hubiera sido con un toro con trapío y fuerza yo le hubiera pedido las dos orejas, pero nunca se debió dejar salir por la puerta de toriles semejante miniatura. Los toros fueron tan malos que ni siquiera el Fandi pudo hacer su espectáculo en banderillas. Abel Valls,
el único que no eligió esta corrida tampoco pudo hacer nada a pesar de intentarlo, sobre todo en su primero. Y en su segundo perdió los papeles.
El Viernes 16 más de lo mismo, perritos con cuernos, lo único que éstos tenían más movilidad. No dejaron de ser Jandillitas, por otra parte algo esperado por el cartel de toreros previsto. En efecto, volvió Ponce a Castellón a hacer su toreo con toros de cartón, el caso es que lo mismo hicieron Castella y Daniel Luque, al que por cierto nadie le aplaudieron una tanda de verónicas de ensueño. Del resto de la tarde me niego a hablar, pues si no hay toro todo es un engaño.
El sábado 17 podríamos decir que empezó la Feria de la Magdalena del presente año, con una magnifica presentación de toros de Victorino y aún mejor la de Cuadri. Lo que está claro es que había materia prima importante en el ruedo y la emoción se apoderó de los tendidos. Uceda Leal le hizo una gran faena a un Victorino, rematándola con una sensacional estocada, cortando una oreja. Alberto Aguilar estuvo siempre pendiente de la lidia de sus toros, sobre todo de su segundo, llevándolo tres veces a caballo poniéndolo de largo y haciendo muy bien todo. Ha sido el único en toda la Feria que compitió en quites y a pesar de la espada aún cortó una oreja, más otra de su primero le sirvió para salir por la Puerta Grande, al igual que el tobarreño Rubén Pinar, que toreó muy despacio y propició una gran estocada a su segundo. Lo importante es que hubo toros que dieron emoción, la gente se divirtió de lo lindo y salimos todos contentos de la plaza.
El Domingo 18 de marzo tuvo lugar el segundo desafío torista, con tres toros de Miura y tres de Cuadri, todos muy bien presentados, con trapío y con emoción a raudales. Rafaelillo toreó a placer al noble Miura que abrió plaza, tuvo transmisión y cortó una oreja tras una buena estocada. A su cuadri, que tomó dos buenos puyazos, no supo atemperar su difícil embestida y abrevió. En el segundo Miura Javier Castaño lo colocó hasta cinco veces al caballo, cada vez más largo, la última en la otra punta de la plaza. Bien por Javier Castaño por querer ofrecenos un espectacular tercio de varas tan olvidado últimamente. Lástima que la arrancada del toro no fuera como se esperaba. Lo picó Fernando Sánchez Muriel que fue muy ovacionado. Cabe destacar la magnífica brega de Marcos Galán, siempre pendiente del toro, sin molestarlo y poniéndolo perfectamente en suerte para banderillearlo en todo lo alto, asomándose al balcón y gustándose David Adalid, protagonizando el mejor tercio de banderillas de toda la Feria, tanto es así que sonó la banda de música en su honor. Hacía tiempo que no me dolían tanto las palmas de las manos de tanto aplaudir. Lástima que el astado se apagó muy pronto y poco pudo hacer su matador. Volvimos a disfrutar de otro buen tercio de varas con el Cuadri que le tocó al salmantino, siempre pendiente de una lidia correcta y tras pegarse un gran arrimón cortó una oreja después de una estocada y un descabello. Serafín Marín no tuvo su día, a su Miura lo llevó hasta cuatro veces al caballo, pero el toro se arrancaba con poca codicia, también con la muleta su embestida era tosca y áspera, mató mal y se silenció su labor. Con su cuadri, sexto de la tarde no se acopló el torero catalán, aun así pudo cortar una oreja si no hubiera fallado estrepitosamente con la espada.
El final de Feria, día de San José, estuvo frío al igual que el tiempo, esperando el público más tanto de los toros como de los toreros. José Luis Moreno cuajó una excelente faena al de miura, pero falló con la espada y Luis Bolívar cortó una oreja a su Victorino que transmitió, embistiendo siempre por bajo con bravura y casta. Paco Ramos estuvo valiente con su primero, toro de miura que entró tres veces al caballo de Manuel Montiel, arrancándose de verdad, provocando otro emocionante tercio de varas, pero que cambió con la muleta embraguetándose el torero de Onda, que si no hubiera sido por el feo bajonazo hubiera cortado una oreja. Su victorino estuvo muy mal lidiado y tuvo una pésima brega por parte de la cuadrilla, con excesivos capotazos lo que propició que el toro se quedase corto y con peligro, lo que descompuso a Paco Ramos que acusó las pocas corridas que lleva toreadas. Volvió a fallar con la espada silenciando su labor.
Si el año pasado critiqué con saña a Enrique Patón por el fraude de los toros lidiados, esta Magdalena tengo que felicitarlo por el diferente planteamiento que ha tenido para confeccionar los carteles dando más importancia al toro. Tanto en las novilladas como en los tres últimos días de Feria hemos vibrado de emoción en la plaza, y esa emoción la han dado los toros y la valentía y honradez de los toreros con mayúsculas, que no serán tan mediáticos como los figurines, pero estos se juegan la vida y divierten al público. Ha habido tanta gente en la plaza en las últimas corridas de feria como el Jueves y el Viernes con las figuras, por lo tanto le propongo al señor Patón más toros y menos figuras a no ser que se atrevan con el toro con trapío y casta.
Una vez reunido el jurado en el Club Taurino de Alcora, éste ha otorgado el trofeo a la Mejor Lidia de la Feria al torero ALBERTO AGUILAR por la lidia de su segundo toro, perteneciente a la ganadería de D. Celestino Cuadri.