El instituto de Nules, sin cantina: El AMPA reparte bocadillos como protesta

La comunidad educativa del IES Gilabert de Centelles de Nules ha querido visibilizar hoy con una acción pública reivindicativa la situación que vienen arrastrando desde el curso pasado como consecuencia de la finalización del contrato de concesión de la cantina del centro, sin que haya vuelto a licitarse y adjudicarse de nuevo el servicio, a día de hoy, por parte de la Conselleria de Educación, a quien le corresponde esa competencia.

Desde el AMPA del IES, han decidido plantear hoy ellos mismos una alternativa —de manera simbólica— a la ausencia del servicio que le corresponde gestionar a la Conselleria, porque después de prácticamente un año de peticiones y solicitudes de información, «no hemos recibido ningún tipo de respuesta oficial por parte de Educación» y el temor que se ha extendido entre los afectados es que pueda iniciarse un nuevo curso sin avances a este respecto.

Las cifras corroboran, según defiende el AMPA, la importancia del servicio de cantina en el funcionamiento diario del instituto. El centro cuenta este curso con 1.473 alumnos, de los cuales 935 son de secundaria y bachillerato, y 538 de ciclos formativos, a los que hay que sumar los 196 profesores y las 16 personas que integran los departamentos de administración, mantenimiento y limpieza. A su vez, el centro es subsede de la Escuela Oficial de Idiomas.

 A Nules acude alumnado y profesorado de diversos municipios, en horario de mañana y tarde. La apertura oficial es a les 7.00 horas y el cierre a las 19.00.

Casi 40 menús al día

La cantina, hasta el momento de su cierre, servía una media de 30/40 menús caseros al día —dos platos y postre—, un número que aumentaba hasta los 60 en época de evaluaciones. El precio de esos menús era de 5 euros para los menores y 6 euros para los adultos, con menús para llevar por 3 euros. Además, se ofrecían hasta 200 almuerzos diarios, también confeccionados en la misma cafetería. La existencia de este servicio «era de gran ayuda para la conciliación familiar, porque no eran pocos los menores que se quedaban en el instituto a comer, porque sus padres trabajan, pero tenían la tranquilidad de que sus hijos llegaban a casa con la garantía de que era una alimentación de calidad y en un espacio controlado y seguro», defienden desde el AMPA.

Con el cierre de la cantina, la alternativa que la Conselleria de Educación planteó al centro fue la instalación de máquinas de vending y poner a su disposición un microondas por si alguien tenía que calentar comida. El AMPA se negó a aceptar tal propuesta por dos motivos. El primero porque consideran que «las máquinas de vending no son una alternativa ni saludable ni sostenible, son alimentos precocinados o prefabricados y todos envasados en plásticos, entendemos que no es la opción por la que debería apostar una administración pública» y por otro parte, «estamos convencidos de que si entran las máquinas al centro ya no saldrán y nos quedaremos sin cantina».

Las últimas noticias recibidas de forma indirecta por el AMPA, «porque hemos preguntado muchas veces pero nunca nos han informado directamente», hacen referencia a que el departamento técnico de Conselleria ya había acabado con el documento base para la licitación y que iba a trasladarse a las direcciones territoriales para que procedieran a las adjudicaciones particulares, pero «a día de hoy no sabemos nada de eso ni de que se haya producido ningún avance».

Para dar visibilidad a una petición que se ha trasladado por la vía administrativa en varias ocasiones sin éxito y sin respuesta, el AMPA ha decidido dar a conocer públicamente la situación planteando su propia «cantina alternativa simbólica». Han instalado mesas en la calle y han ofrecido un almuerzo gratuito a los alumnos y profesores que han querido y han podido acercarse (los menores, estudiantes de ESO, no tienen autorizada la salida de centro en horario lectivo y, por supuesto, se ha cumplido con la normativa al respecto). «No nos gusta haber tenido que llegar hasta este punto, pero creemos que un año es tiempo más que suficiente para que una administración pública realice un trámite como la adjudicación de una cantina, porque al no hacerlo, la Conselleria ha dejado desatendidas a 1.700 personas», lamentan desde el AMPA.

El PP llevará la problemática a Les Corts

Ante esta situación, el presidente del PP de Nules, José Vicente Adsuara, que ha acompañado a las familias en esta reivindicación, ha asegurado que “vamos a elevar las demandas a Les Corts para que, a través del PPCV, se exija en sede parlamentaria explicaciones a este desdén”. “Hay que dar la cara, atender a las familias y explicar el motivo de este castigo”, ha señalado el presidente local del PP en Nules.

Adsuara junto a las familias y alumnos

En paralelo, Adsuara también ha reclamado del Ayuntamiento de Nules una “acción en defensa de los intereses de los estudiantes y los docentes”. “Hay que llamar a las puertas que sean oportunas para que se desbloquee esta situación y se restituya a los usuarios del centro el servicio que merecen”. “Hay que trabajar para atender las demandas de nuestro instituto”.

Por su parte, “lamentamos esta dejadez absoluta por parte del Consell en general y de Ximo Puig en particular que constata la poca implicación y voluntad de quienes gobiernan”. “Nules merece mucho más y vamos a luchar por conseguirlo”, ha concluido el presidente local del PP.