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El alcalde confía en que el MARM dote presupuestariamente cuanto antes las obras de encauzamiento del barranco El Torrent

  • García espera que la presentación del proyecto no esté motivada únicamente en que “nos encontramos en época electoral” y se quede en otra promesa incumplida

El alcalde de Nules, Mario García, y el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, José Manuel Casaus, han presentado esta mañana las mejoras propuestas por el Ayuntamiento al proyecto aprobado por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) para el encauzamiento del barranco de El Torrent, que ha permanecido durante un mes en exposición pública a fin de que puedan presentarse alegaciones.

Casaus ha destacado que, en este punto, se culmina un intenso trabajo que se inició hace cuatro años, durante la legislatura pasada, “en la que hemos mantenido numerosas reuniones de trabajo con los responsables de la Confederación y el equipo técnico redactor, a fin de dar forma al proyecto más adecuado a los intereses del municipio”. Así, una vez concretado el proyecto inicial, el Ayuntamiento también ha presentado una serie de alegaciones con las que se pretenden “mejorar algunos detalles que, desde nuestro punto de vista, debían matizarse”. Las alegaciones del consistorio vienen a sumarse a las 79 presentadas por particulares “que finalmente se agrupan en 16 tipos distintos”, ha destacado el concejal de Urbanismo.

De este modo, como ha afirmado el alcalde, Mario García “nosotros hemos hecho nuestro trabajo, defendiendo los intereses de nuestro municipio y ahora esperamos que el Ministerio cumpla con su parte y dote presupuestariamente este proyecto, valorado aproximadamente en 27 millones de euros”. En este sentido, García destaca que “en este punto no puedo estar satisfecho por completo, porque de momento sólo tenemos un proyecto sin reserva presupuestaria y espero que la Confederación y el Gobierno de España no estén aprovechando la época electoral para presentar una obra tan esperada, como necesaria, para al final, no concretar nada”.

Asimismo, el alcalde de Nules ha querido salir al paso de las críticas de algunos grupos políticos de la oposición, que han acusado al equipo de gobierno de “conformarse” con este proyecto. García ha señalado que “no estamos en absoluto conformes porque de lo contrario habríamos consentido la ejecución del proyecto planteado en 2005, cuando en Nules gobernaba quien ahora nos critica y no hizo nada por mejorar la propuesta”. A su vez, el alcalde ha explicado que cuando se aprobó el PGOU actual, en el año 1987, revisado en 1992, cuando gobernaba la misma persona “no se contempló el desarrollo urbanístico de la playa teniendo en cuenta la necesidad de habilitar una salida natural del barranco de El Torrent, por lo que ahora hemos tenido que buscar soluciones alternativas”.

Por último, Mario García ha asegurado que “vamos a seguir reivindicando porque estamos hablando de obras de emergencia, que buscan garantizar la seguridad y bienestar de los ciudadanos, y lo haremos gobierne quien gobierne”.

CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS BÁSICAS DEL PROYECTO
El concejal de Urbanismo y Medio Ambiente ha aprovechado la ocasión para presentar sucintamente las características de un proyecto que afecta al tramo de barranco comprendido entre el puente de la antigua N-340 hasta el mar, lo que supone una distancia aproximada de 4,5 kilómetros. Precisamente en este puente se proyecta una ampliación para que alcance los 28 metros de ancho, dado que en este punto desembocan los barrancos de la Serraleta (donde ya actuó la Generalitat Valenciana en el 2005) y el del Randero.

Está previsto crear una sección de cauce de la forma más naturalizada posible, amplia y con suaves pendientes. En concreto el cauce tendrá entre 37 y 142 metros en su punto más alto y una profundidad de 3,5 metros.

Casaus asegura que con este barranco se crea “una puerta abierta de cara al mar” y para ello se construirán a media altura dos sendas peatonales, en ambos lados, de 3 y 4 metros de ancho, por la que además de peatones, podrán circular bicicletas, convirtiéndose así “en un enlace directo de los ciudadanos con las playas”.

En el centro del cauce se instalará un canal de 3,5 metros de ancho y medio metro de altura, que recogerá las aguas de la depuradora y algunas escorrentías habituales en la zona.

También se habilitarán tres pasos en badén a la altura de los caminos Caminàs, Azeit y Ratxadell, elevados un metro sobre el fondo del barranco, “de manera que, salvo cuando se produzcan lluvias torrenciales, los vehículos puedan circular sin problemas”. Asimismo se duplican las secciones bajo los pasos de la autopista y la vía férrea, de manera que no se creen cuellos de botella y se habilitarán caminos de servicio para dar acceso a las numerosas fincas rústicas repartidas a lo largo del cauce del barranco.

En cuanto a la desembocadura, está prevista la creación de un azut con compuertas, como ya existen en La Gola. En concreto se construirán cuatro canales de 26 metros en la parte sur de las playas de Nules, de manera que no se afecte a zonas urbanas, con la construcción de motas naturalizadas de tierra vegetal, donde circulará el agua laminada hasta una altura de 1 metros. A partir de esa altura, el agua desembocará directamente al mar. Casaus ha destacado que La Gola tiene una anchura de 16 metros, por lo que no sólo se duplica la posibilidad de evacuación, sino que se multiplica de forma evidente.

A su vez, está prevista la construcción de diques o escolleras, así como la regeneración de las playas situadas en el entorno de los canales de desagüe con la aportación de arena o áridos. En este sentido, el edil de Medio Ambiente ha destacado que “en vista de que Costas no actúa en nuestras playas, hemos querido aprovechar la oportunidad, con el desarrollo de este proyecto, para que el mismo Ministerio, pero a través de la CHJ, regenere una parte de nuestras playas gracias a la construcción de esas escolleras”.

ALEGACIONES FUNDAMENTALES PRESENTADAS POR EL AYUNTAMIENTO
El edil de Urbanismo también ha querido concretar algunas de las alegaciones presentadas por el Ayuntamiento, desarrolladas por los técnicos municipales y defendidas por el equipo de gobierno. En resumen son las siguientes:

  • El Ayuntamiento exige que se estudie la valoración de las expropiaciones y ocupaciones, ya que se han establecido precios muy bajos. Los técnicos municipales han realizado un estudio del precio establecido en otros proyectos desarrollados en el municipio y son casi el doble de los que plantea la CHJ, de ahí que el consistorio pida que se replantee esta cuestión a fin de defender los intereses legítimos de los ciudadanos.
  • Definir claramente las conexiones de las sendas peatonales y los caminos de servicio en la confluencia con los pasos inferiores de la autopista y la vía férrea, garantizando así la seguridad de los usuarios en todo momento.
  • El proyecto incluye la elevación del camí Serratelles, de manera que los canales desagüen por debajo, creando un ancho de 10 metros, con dos carriles de circulación y arcenes. El ayuntamiento ha solicitado la construcción de un carril bici de 3 metros a un lado y una cera peatonal de 3 metros al otro.
  • Se propone la construcción de compuertas que evitarán la intrusión del agua marina en momento de fuerte oleaje o temporales de mar, lo que provocaría la salinización de la zona afectada. Asimismo se propone la creación de un sistema de desagüe mecánico cuando el nivel del mar o la fuera del oleaje dificulte la evacuación natural.
  • Se propone la creación de un desagüe hacia el mar en la zona comprendida entre el camí Ratxadell y la autopista, para evitar inundaciones de las parcelas rústicas de la zona.
  • También se solicita que se eliminen del proyecto una serie de parcelas delimitadas en el mismo y que se contemplan como urbanizables en el PGOU, ya que existe suficiente suelo rústico para desarrollar las obras.
  • El Ayuntamiento destaca que el proyecto no tiene en cuenta el futuro proyecto del AVE, algo indispensable ya que transcurre por terreno afectado por este proyecto de encauzamiento.
  • Se propone que los pasos existentes bajo la vía férrea y la autopista abarquen todo el caudal inicial, para evitar laminaciones y, por consiguiente inundaciones en parcelas limítrofes.

 

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