Cullera celebra la primera ceremonia de acogimiento civil de su historia
Jornada histórica para el laicismo en Cullera. Este sábado la ciudad acogió la primera ceremonia de acogimiento civil de su historia tras la aprobación, ahora hace un año, del reglamento municipal que regula esta práctica.
El pequeño Josep Aparici Mompó, hijo de Josep Aparici y Patricia Mompó, ha tenido el honor de inaugurar esta fórmula mediante la cual el municipio da la bienvenida a sus nuevos ciudadanos. El acto estuvo presidido por el alcalde, Jordi Mayor.
El acogimiento civil se define como el acto que tiene por objetivo iniciar a los niños y niñas así como a los jóvenes menores de 18 años del municipio en el camino de la convivencia y las actitudes cívicas, que les conduzcan a un futuro de respeto de los iguales, basado en los valores indivisibles y universales de la dignidad humana, la libertad, la igualdad y la solidaridad.
Asimismo, el ceremonial expresa el compromiso de los padres y madres, o en su defecto de los tutores legales, en relación a estos valores, convirtiendo a los nuevos ciudadanos en personas libres iguales en derechos y deberes.
Por otra parte, es también la expresión de la voluntad del Ayuntamiento de Cullera de dar la bienvenida a los nuevos ciudadanos a una sociedad configurada en los principios democráticos.
Emotividad
El emotivo acto se celebró al mediodía en el Salón de Plenos de la Casa Consistorial y tuvo un marcado carácter laicista y emotivo. Sonó 'Cançons de Mare' de Rafael Talens Pelló i también Paco Muñoz, el alcalde leyó a Miguel Hernández y los intervinientes por parte de la familia, entre los que se encontraba Cullera Laica —entidad que ha luchado durante más de una década por la consecución de este ceremonial— dedicaron palabras emotivas.
En la parte más formal, la primera autoridad local dio lectura a los derechos reconocidos a la ciudadanía en la Constitución, l'Estatut d'Autonomia y la convención sobre los derechos del niño de Naciones Unidad.
Para Mayor, el paso dado el sábado representa «un avance más en la normalización del laicismo» y recuerda que «todas las personas tienen derecho, desde su plena libertad, a elegir la forma en la que quieren vivir y celebrar los acontecimientos sociales. En este caso, hemos hecho posible que quienes hasta ahora, por razones de creencia, no podían, tengan la posibilidad de compartir con el conjunto de la sociedad la alegría de la llegada de un nuevo miembro a nuestra comunidad».
Finalmente, el alcalde ha felicitado al niño, a los padres y a la familia y se ha mostrado convencido de que «se ha hecho historia porque se ha abierto un nuevo camino de alegría y felicidad que muchos otros van a recorrer».