Mutxamel nombra hijos predilectos a Vicente Pérez Lledó y Arcadi Blasco Pastor
Ambos mutxameleros, con sus aportaciones, enriquecieron y favorecieron el desarrollo de la sociedad, la cultura y el arte del municipio
El consistorio materializará el nombramiento, con el fin de compartirlo con vecinos y familiares, en un acto que se celebrará el 26 de octubre
El Ayuntamiento de Mutxamel ha aprobado en sesión plenaria extraordinaria el nombramiento como hijos predilectos del municipio de los mutxameleros, Vicente Pérez Lledó y Arcadi Blasco Pastor. Dos vecinos que vivieron siendo grandes defensores de la cultura y el arte; y estuvieron siempre muy comprometidos con la divulgación del patrimonio y el nombre de Mutxamel allá donde fueron además de favorecer al desarrollo de la sociedad.
El músico Vicente Pérez Lledó, nació en 1890 y mostró desde muy pequeño su pasión por esta rama de la Cultura. Entró en el ejército en el que desarrolló su carrera opositando como músico militar por primera vez en 1915. Ascendió en varias ocasiones hasta que llegó a ocupar el rango de comandante director de Música en 1947.
Tras su jubilación pasó largas temporadas en Mutxamel donde junto a su hermano, Salvador Pérez Lledó, invirtió una importante suma de dinero con tal de conseguir y donar instrumental necesario a la Sociedad Musical “La Alianza”.
Pero más allá de su pasión por la música, Vicente también quiso contribuir al amplio contexto cultural de Mutxamel. Y es por ello por lo que en 1978 constituyó, ante notario, la Fundación Benéfica Particular Vicente Pérez Lledó, que tenía como objetivo construir para el pueblo una Casa o Centro de Cultura en los terrenos que su fundador tenía en la Calle del Mar.
La Casa o Centro de Cultura, según los estatutos de la Fundación, debía estar dedicada a albergar un museo, archivo histórico, biblioteca, sala de exposición de obras de arte y colecciones, sala de conciertos y conferencias y otras actividades vinculadas a la cultura. Sin embargo, tras la muerte de Vicente Pérez Lledó y tras varios años intentando ampliar los fondos de la Fundación con tal de cumplir con el objetivo inicial, la Junta General que la regía decide, en 1988, disolvió la Fundación y repartió sus bienes entre el Ayuntamiento de Mutxamel y la Sociedad Musical “la Alianza”. Los fondos económicos donados por Vicente Pérez Lledó se repartieron a partes iguales y el terreno, sito en la Calle del Mar, pasó a formar parte del Ayuntamiento de Mutxamel, donde más tarde se construyó el Centro de Salud que hoy en día permanece en dicho espacio.
Además, sus relaciones con el mundo militar y fruto de sus experiencias en el Rif, trabajo a Mutxamel las primeras chilabas para crear una nueva comparsa mora que se inspiró en el paqueo forma en la que luchaban los lugareños rifeños, creando así “Els Pacos” con su música y paso tan característico.
El artista Arcadi Blasco Pastor, nació en 1928 en el seno de una familia mutxamelera y vio en sus primeros años de vida como sus padres dedicaban gran parte del tiempo a compartir y preocuparse por la sociedad mutxamelera. En su infancia ya mostraba interés por las enseñanzas artísticas e inició sus primeras formaciones en música, aunque después de un período como seminarista en Orihuela, descubrió que su verdadera vocación era el arte.
Cursó sus estudios en las escuelas de Bellas Artes de Madrid y Valencia, aunque también estuvo de becario en Roma, momento en el que inicio su verdadera carrera profesional e inició investigaciones para conocer diferentes campos artísticos como la pintura, la escultura, la cerámica o el vidrio. Residió gran parte de su vida en Madrid, pero nunca dejó de poner en valor sus raíces y realizó exposiciones en las que expuso cuadros cerámicos con nombres muy ligados a lugares y tradiciones locales como “Muchamiel”, “Ma casa”, “Festes”, “L’Alluser”, “Riu sec”.
En Mutxamel se pueden encontrar sus obras en diferentes puntos, como en el mural de cerámica que realizó para su Club d’Amics de la Unesco que se conserva en la Casa de Cultura, o en las vidrieras de la Iglesia o en la fuente, llamada Torre Vigía, ubicada en la entrada de la avenida Carlos Soler.
Pero de Arcadi no solo es una persona relevante por su obra, sino también su labor cívica en la que defendió las artes y la cultura, a través de su participación de diversas asociaciones e instituciones culturales.
En su currículum también figuran diversos galardones que premian su obra y su experiencia como l’Ametla Dolça, entregado en 1999 por l’Asociació Cultural l’Assut, el Premio de las Artes Plásticas de la Generalitat Valenciana, en 2005, o, el mismo año, l’Agulla d’Or otorgado por el Ayuntamiento de Mutxamel.
El alcalde de Mutxamel, Rafael García Berenguer ha destacado que “materializar estos títulos y hacer hijos predilectos a Vicente Pérez Lledó y Arcadi Blasco es un reconocimiento y agradecimiento a acciones tan inspiradoras como el altruismo, la filantropía, la educación, la música, la cultura, el arte, la donación que reconocemos en estos vecinos y así generar figuras de consenso que nos recuerdan que unidos somos más fuertes y capaces de todo aquello que nos propongamos. Este reconocimiento debe llenar de orgullo a todos los vecinos de Mutxamel, pues sus figuras son símbolo de lo que significa trabajar por Mutxamel para que su nombre crezca tanto dentro como fuera de él. Ambos fueron dos grandes amantes de la cultura y trabajaron incansablemente para que el patrimonio cultural de Mutxamel creciera y se enriqueciera; son dos personas que han dejado una gran huella en nuestro municipio y este nombramiento es una forma, a título póstumo de dejar latente su gran histórico en todos los sentidos, en el profesional, pero lo que es aún más importante en el de ser grandes embajadores y apasionados de Mutxamel”.
Más galardones, distinciones de “Agulles d’Or”
El Ayuntamiento también realizará la entrega de cinco nuevas “Agulles d’Or” a tres personas, una entidad y un centro educativo para resaltar sus valores y su implicación en la cultura e historia del municipio.
Asunción Brotons Boix, cronista del municipio y gran apasionada de su historia, ha realizado multitud de investigaciones y publicaciones que son un legado documental para Mutxamel.
Por su parte José Soler, desempeña el cargo de Juez de Paz desde hace casi catorce años y en su pasión por la investigación y conocer la historia local ha recorrido multitud de archivos históricos de España con el fin de recopilar documentos relacionados con Mutxamel.
En el caso de Manuel Climent, estuvo implicado en la restauración de la Capilla de Mare de Déu de Loreto, ha realizado diversas publicaciones sobre las Fiestas de Moros y Cristianos y sobre el 450 aniversario del Milagro de “La llàgrima”. A sus publicaciones relacionadas con el análisis histórico, una de las más importantes aborda la historia de todas las elecciones democráticas locales, así como las realizadas en otros períodos más antiguos. También ha estado vinculado a la cultura popular de Mutxamel siendo uno de los impulsores de la Comisión de Fiestas.
A estos galardones se suman también la Comparsa Contrabandistas, por haber cumplido 150 años, cifra que la atesora como la comparsa más antigua en activo del municipio o el CEIP Manuel Antón, que este año cumple su 50 aniversario; conmemoración que culminan con este distintivo que realza su labor como parte de la comunidad educativa local.