Un estudio del CEU revela que los empleados de festivales en España consumen más drogas que la media

Los trabajadores del sector del espectáculo se encuentran entre los de mayor consumo de sustancias psicoactivas. Según el estudio Adictions del año 2017, son el 17% del total en España, una cifra que se sitúa entre el 22% de Francia o el 16% en Holanda. Un estudio realizado por la coordinadora del Grado en Enfermería de la CEU UCH en Castellón, Isabel Almodóvar Fernández, ha contado con la participación de 284 empleados del montaje de escenarios para espectáculos, festivales y eventos en España, de los cuales más de un tercio son consumidores habituales de sustancias adictivas, como alcohol (36,6%), cannabis (35,2%) y cocaína (1,8%). El programa de intervención motivacional de Enfermería diseñado por esta profesora, en colaboración con investigadores del Grupo TXP de la CEU UCH, ha logrado incrementar su concienciación sobre la baja calidad de vida derivada de sus adicciones y sobre la necesidad de recibir tratamiento. Los resultados del estudio fueron publicados ayer, 11 junio, en la revista científica más importante a nivel mundial para Enfermería especializada, la International Journal of Mental Health Nursing.

El programa de intervención motivacional dirigido por la profesora de Enfermería de la CEU UCH de Castellón, Isabel Almodóvar, como parte de su tesis doctoral, incluye una terapia de grupo diseñada para lograr objetivos como la aceptación de la adicción por parte de los participantes, su preparación frente a situaciones de riesgo de consumo en el futuro y la adopción de estrategias de motivación para no volver a consumir. “Una de las claves de esta motivación es que los participantes en el programa toman conciencia de la relación entre la adicción y su verdadero estado de salud y baja calidad de vida, lo que les conduce a buscar tratamiento”, destaca la doctora en Enfermería Isabel Almodóvar.

Consumo elevado de alcohol, cannabis y cocaína

La primera parte del estudio ha analizado los hábitos de consumo de drogas entre estos 284 empleados del sector del montaje de espectáculos y eventos, para evaluar la prevalencia del consumo de distintas sustancias, así como su percepción de la calidad de vida relacionada con su estado de salud, a través de test validados internacionalmente. Con una media de edad de 30 años, estos empleados manifestaron haber consumido alcohol (94,72%) y cannabis (83,45%). El 66% de ellos son policonsumidores de ambas sustancias. “Entre estos profesionales participantes en el estudio, las mujeres consumen alcohol con más frecuencia que los hombres, mientras que el consumo de cocaína resulta más frecuente entre los hombres”, destaca la profesora Almodóvar, de la CEU UCH en Castellón.

En el caso del alcohol, la media de consumo entre los participantes fue de 52,8 gramos de alcohol al día, por encima de los 40 considerados como máximo recomendable por la OMS para los hombres y los 20, para las mujeres. Tomando el consumo mensual, las cifras de los trabajadores de este sector participantes en el estudio ha superado la media de la población española en varias dimensiones: el 92% de ellos ha consumido alcohol en el último mes, frente al 25% de la media en España; el 74% ha consumido cannabis, frente al 6,6% de media española; y el 28% ha tomado cocaína, frente al 1% de media nacional, según los datos del Ministerio de Sanidad de 2015.

Según la profesora de la CEU UCH autora del estudio, “en las tres sustancias, la percepción del riesgo del consumo es baja para más del 60% de los participantes. Sólo 15 trabajadores refirieron no haber consumido alguna de las tres sustancias en los últimos tres meses”.

Intervención motivacional desde la Enfermería

En la segunda parte del estudio, liderado por la coordinadora de Enfermería de la CEU UCH Isabel Almodóvar, un total de 50 de estos trabajadores del sector del espectáculo participaron, en cinco grupos, en el programa de intervención motivacional dirigido por profesionales de la Enfermería y orientado a lograr el abandono de su adicción. Estas sesiones se celebraron en distintas Comunidades Autónomas españolas.

Según destaca la doctora Almodóvar, “antes de la intervención, el 60% de los participantes manifestaba no tener problemas de salud, pero después de participar en el programa que hemos diseñado, esta cifra bajó al 36%. Además, el 88% no reconocía un problema de adicción, sin embargo, tras la intervención un 12% de los participantes aumentaron su motivación para dejar su adicción a las drogas. Datos como estos revelan la eficacia de la intervención de la Enfermería entre trabajadores que sufren adicciones a sustancias psicoactivas en este sector del espectáculo y el montaje de festivales y otros eventos: cuando son conscientes de su baja calidad de vida en relación con la salud, aumenta su motivación al cambio de conducta en relación con las adicciones”.

Este 12% de efectividad en la motivación hacia el cambio, tras la intervención mediante el programa de Enfermería diseñado, supera el umbral del 10% fijado por la OMS como válido para este tipo de programas.

Condiciones laborales, como causa

Otros datos del estudio reflejan que existe relación entre la adicción a las drogas y las duras condiciones de trabajo en este sector, con turnos nocturnos que alternan con los diurnos y que superan los límites de la jornada laboral e incluso los límites de su resistencia física. “Su percepción sobre sus condiciones de trabajo es un 30% más negativa que la de la media en España. En estas circunstancias su propensión al consumo de alcohol, cannabis y cocaína aumenta”, destaca Almodóvar.

La coordinadora del Grado en Enfermería de la CEU UCH en Castellón, Isabel Almodóvar, ha realizado este estudio con la colaboración de investigadores del Grupo TXP de la CEU UCH, que lidera el profesor de Medicina Gonzalo Haro, doctor del Área de Salud Mental del Hospital Provincial de Castellón. Junto a Isabel Almodóvar y Gonzalo Haro, son también coautores del estudio Paula Sánchez Thevenet, vicedecana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la CEU UCH en Castellón; Ana Benito, doctora de la Unidad de Salud Mental de Torrent; y Abel Barquero, miembro del Proyecto Amigó en Castellón. La investigación ha sido cofinanciada por la Fundación Hospital Provincial de Castellón.