La Conselleria de Infraestructuras mejora el pavimento del enlace entre la CV-25 y la CV-35 a la entrada de Llíria
El Ayuntamiento de Llíria ha solicitado al departamento autonómico la instalación de alumbrado en este nudo viario y la insonorización de la CV-35 a la altura de las urbanizaciones de Puig-i-lis y El Regalon
La Conselleria de Infraestructuras ha finalizado las obras de mejora de la calidad acústica en el enlace de la autovía CV-35 València-Llíria con la CV-25 (Ctra. de Marines), junto al colegio El Prat de la localidad edetana, dentro de la estrategia de refuerzo de la seguridad viaria de las carreteras de la Comunitat Valenciana.
Según ha explicado el edil de Movilidad Sostenible de Llíria, Paco García, “este enlace, entre la CV-35 y la CV-25, es uno de los puntos más transitados y dónde mayor número de desplazamientos se hacen por ser un nudo de conexión, tanto en la entrada de la capital del Camp de Túria como en el acceso a poblaciones vecinas como Marines, Olocau y Gátova”.
Desde la Concejalía de Movilidad Sostenible también se ha solicitado a la Conselleria que “se alumbre este nudo viario, ya que el alumbrado de la autovía de la CV-35 llega hasta unos metros antes, donde se construyó la nueva pasarela ciclovial entre Llíria y las urbanizaciones, y representa una demanda de los miles de personas usuarias de la vía que hacen uso de ella en horario nocturno”.
Igualmente, el pleno del Ayuntamiento de Llíria ha reclamado la insonorización de la CV-35 a la altura de las urbanizaciones de Puig-i-lis y El Regalon, al igual que se ha hecho en otros tramos de la misma autovía en su trazado hacia València.
Minimización ruido y mejora seguridad vial
Esta actuación en el enlace de entrada a Llíria por parte de la empresa concesionaria de la CV-35, ha supuesto una inversión de 92.000 euros, y han empleado un material asfáltico con características fonoreductoras, apropiadas en espacios próximos a edificios de uso docente o sanitario, como es el caso del colegio o el Centro Cívico El Prat.
Los trabajos realizados han consistido en la repavimentación de 14.100 metros cuadrados de viales entre las glorietas de los dos márgenes de la CV-35, así como los ramales de incorporación y salida a la autovía, con el fin de minimizar el ruido y mejorar la seguridad vial.