La lluvia da una tregua para que finalicen los actos taurinos
Al mediodía, se realizó la prueba de vaquillas de la ganadería de Cantera, tal y como se ha venido realizando en cada una de las jornadas taurinas programadas en estos festejos.
Por la tarde, se exhibió, en primer lugar, un ejemplar de la ganadería de Celestino Cuadri de nombre Pitón, marcada con el número 8 y de guarismo 3, de color “negro zaino”.
Tras esto, se dio suelta al ejemplar de la ganadería de Peñajara de nombre Campanillo, marcado con el número 63 y de guarismo 5 de color “negro”. De nuevo las vaquillas de Cantera completaron la tarde en la vila de les Alqueries.
A partir de las 23.00 horas se embolaron los dos toros exhibidos por la tarde que antecedieron a la actuación del grupo Kustom en el salón cooperativo de Caixalqueries. La disco-móvil completó la noche en el mesón del vino y de la tapa.
Estas han sido unas fiestas en las que los toros han cobrado protagonismo por las cogidas. El primer sábado, un joven de 23 años de la localidad sufrió una cornada en el abdomen, el concejal de Fiestas, Javier Muñoz, recibió tres cornadas en el encierro de seis toros cerriles y un joven magrebí recibió otra puntada la noche del pasado jueves en el toro embolado.
Estos y otros tantos sobresaltos a diversos aficionados y “rodaors” han marcado unas jornadas taurinas algo más intensas que en anteriores ocasiones.
Parece mentira que durante totos estos actos, la puntualidad ha sido el factor que más se hace de notar. EL retraso en cuanto a la suelta de toros y a la hora de embolarlos era escandaloso. Tambien a los espectaculos se dejaba de notar una falta de cordinación que lleva a cabo una falta de profesionalidad y falta de ateción a los ciudadanos. En cuanto al encierro faltaban medidas de seguridad para los corredores, las escapatorias eran casi nulas y las que habian estaban aborrotadas de publico. exito de publico pero un cero de organización.