Las rotondas de Carmaday, un problema que persiste más de cinco años después

Más de cinco años llevan esperando los vecinos de Carmaday y las empresas de la zona una solución a una rotondas que, lejos de ser un acceso digno a este barrio de la Vall d’Uixó, se han convertido en un quebradero de cabeza.

Más que un acceso, las rotondas han convertido la zona en un Scalextric. Los autobuses tienen serios problemas para pasar, los vehículos pasan pegados a las viviendas, y los camiones de gran tonelaje tienen prohibido el paso por la zona.

La “chapuza” como los propios vecinos calificaron la obra tuvo que ser rehecha poco tiempo después cuando los vehículos grandes se quedaron atascados. Los vecinos colocaron pancartas y exigieron que las rotondas se construyeran en los terrenos que sobre el año 2000 fueron expropiados por el Ayuntamiento de la Vall d’Uixó.

Numerosas han sido las quejas recibidas y pese a las movilizaciones vecinales, las reuniones con el Ayuntamiento de la ciudad y que la consellera que diseñó y ejecutó el proyecto es de la Vall d’Uixó, el proyecto no se ha movido ni un ápice.

Ahora los vecinos del barrio Carmaday han anunciado una jornada lúdica pero también reivindicativa para exigir una solución para las rotondas porque “con la pandemia todo se quedó paralizado”, explica el presidente Iván Felipe, quien señala que “las rotondas siguen ocasionando molestias” dado que es una zona con mucho tráfico y “los vehículos entran casi dentro del barrio”.

“Queremos que la Generalitat responda y modifique las rotondas”, asegura porque “lejos de construir una zona que aísle el barrio de la carretera, nos han metido el tráfico junto a las viviendas”.

El acto reivindicativo será este sábado 11 de junio a las 17:00 horas en el parque central del barrio.