PSOE: "Elena Vicente-Ruiz es la cara visible de la ruina de Emsevall"
El Grupo Municipal Socialista de la Vall d'Uixó insiste en la mala gestión de la consellera delegada de Emsevall, Elena Vicente-Ruiz, que ha indemnizado a una trabajadora de la empresa pública con 55.000 euros ante la amenaza de ésta de llevarla a los tribunales. Además, en 2011, la propia Elena Vicente-Ruiz ya le dobló el sueldo a la empleada, que pasó de cobrar 21.000 euros a 42.000 euros anuales “cuando al resto de trabajadores les estaban bajando los sueldos y a los funcionarios congelándoselo”, según la concejala socialista Francesca Bartolomé.
Así, esta trabajadora de Emsevall cobró durante tres años 42.000 euros y, ahora, ha recibido una indemnización de 55.000 euros más porque Vicente-Ruiz podía ser denunciada por la misma.
Bartolomé ha dicho que el Grupo Municipal Socialista “nunca habla de hipótesis en sus ruedas de prensa, más bien de gestión y, en este caso, de una mala gestión que se viene denunciando año tras año desde que gobierna el Partido Popular”. Así, cree que el PP debería responder a la pregunta de “cómo eligen sus cargos, si por sus conocimientos o capacidades o por su capacidad para mentir y manipular, y pagar favores sin ningún tipo de escrúpulo”.
La edila cree que “lo último quizá sea más importante que su capacidad para gestionar lo público. Si no, que se lo pregunten a Elena Vicente-Ruiz, que con su mala gestión ha hecho que Emsevall toque fondo”.
“Aunque –ha añadido- se desconoce si es que Vicente-Ruiz quisiera gestionarla como si fuera privada. De ser así, ya haría mucho tiempo que habría ido a la calle porque las cuentas no salen y porque ella misma es la imagen de la falta de transparencia y de democracia”.
Bartolomé ha insistido en “cómo justifica una persona el dinero que cobra si nunca da explicaciones ni contesta a las comparescencias y mantiene una empresa arruinada dando un mal servicio. Si no, que le pregunten a los usuarios de la piscina cubierta si tienen alguna queja”.
Con todo, Bartolomé cree que “es vergonzoso que Elena Vicente-Ruiz se mantenga en su cargo e igual de vergonzoso es que el alcalde, Óscar Clavell, no la haya hecho dimitir. Una persona que, como otras en su partido, tienen el único mérito de la manipulación gratuita y malintencionada”.
