El Ayuntamiento de la Vall d’Uixó apuesta por la lucha contra la soledad no deseada en su II Plan de Personas Mayores

El Ayuntamiento de la Vall d’Uixó aprobará en el pleno del 27 de noviembre el II Plan Director de Personas Mayores, que dicta las líneas estratégicas a seguir en políticas de gente mayor y curas hasta el año 2028. Viene avalado por la OMS y el IMSERSO e incide en cuatro ámbitos clave: residencial, relacional, sociosanitario y participativo.

En este sentido, el concejal de Servicios Sociales, Jorge Marqués, ha explicado que el documento “guía las acciones para hacer de la Vall una ciudad amiga de las personas mayores, un distintivo que ya tenemos pero que hay que seguir trabajando para tener más en cuenta a nuestros mayores y fomentar su participación activa”. Y es que las administraciones se enfrentan al reto social del envejecimiento de la población.

Dentro de cada eje clave se incluyen medidas y acciones concretas, que van desde la accesibilidad urbanística hasta el incremento de la formación dirigida a estas edades o el impulso al ocio adaptado. En su elaboración se ha realizado un proceso de participación con personas mayores tanto desde las asociaciones como a título personal, técnicos municipales y entidades que trabajan en estos ámbitos.

Marqués ha destacado que el plan pone énfasis en dos líneas estratégicas “nuevas y transversales a todas las áreas municipales”: la lucha contra la soledad no deseada y la desinstitucionalización de las curas. El objetivo principal de ambas es que “ninguna persona mayor se encuentre o se sienta sola”, tal y como ha añadido el edil.

Para luchar contra la soledad no deseada se pondrá en marcha el proyecto ‘Entrebancs’, que “convertirá el concepto negativo de problemas o dificultades en la oportunidad de volver a los bancos, a las plazas y a nuestras calles, potenciando el envejecimiento activo, recuperando la comunidad y anteponiendo el nosotros al yo”.

Para ello se contempla una red de comercios amigables con las personas mayores, un programa de apadrinamiento vecinal, compartir el ‘Menjar a casa’ o habilitar un transporte en zonas no accesibles “para que las personas mayores que no pueden salir de casa tengan este medio para ir hacer recados, al banco, al médico o un trámite con el Ayuntamiento”.

En cuanto a la desinstitucionalización de los cuidados “se aplicará la perspectiva de género, se apostará por un modelo menos asistencial y se pondrán los cuidados en el centro de las políticas municipales”, ha señalado Marqués. Así, se priorizará en la atención primaria frente a la secundaria, en la prevención frente a los paliativos y en que las personas mayores puedan recibir los cuidados en casa “para que no salgan de su núcleo familiar y su entorno, porque eso deriva muchas veces en soledad no deseada”.