La Generalitat denuncia un “apagón informativo” de la CHJ durante el desbordamiento del Barranco del Poyo
Durante las horas más críticas, y según la Generalitat, la CHJ no alertó sobre la crecida del Barranco del Poyo, dejando a localidades como Paiporta y Picanya indefensas
La Generalitat Valenciana ha calificado de “apagón informativo” la actuación de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) durante las horas críticas de la DANA que afectó gravemente a las localidades de Paiporta, Picanya y Torrent, entre otras. Según fuentes del Consell, entre las 16:13 y las 18:43 del 29 de octubre, la CHJ no notificó los cambios drásticos en el caudal del Barranco del Poyo, incumpliendo los protocolos que obligan a informar de inmediato a Emergencias cuando el caudal supera los 150 m³/s.
Durante este lapso, el caudal del barranco pasó de 28 m³/s a 1.686 m³/s, un volumen equivalente a cuatro veces el caudal del río Ebro. Sin embargo, la CHJ únicamente remitió correos electrónicos con datos pluviométricos, sin alertar del riesgo real de desbordamiento. A las 18:43, cuando finalmente comunicaron la situación, el barranco ya se había desbordado, afectando de lleno a Paiporta y otras localidades.
Cronología de un "fallo crítico"
La Generalitat ha presentado una cronología detallada de los hechos, destacando que la falta de información durante las horas más críticas del episodio contribuyó a la gravedad de las inundaciones.
16:13: La CHJ notifica un caudal de 28 m³/s en el Barranco del Poyo mediante un correo electrónico, sin llamar ni emitir alertas.
17:00: El caudal ya supera los 325 m³/s. Según los datos oficiales de la CHJ, esto debería haber activado una alerta inmediata, pero no hubo comunicación.
18:00: El caudal se dispara a 1.725 m³/s, pero la CHJ sigue sin notificar a Emergencias ni al CECOPI (Centro de Coordinación Operativa Integrada).
18:43: Finalmente, se comunica un caudal de 1.686 m³/s, pero ya es demasiado tarde. El desbordamiento había comenzado, afectando gravemente a Paiporta, Picanya y Torrent.
Fuentes del Consell señalan que estas dos horas y media de silencio fueron “las más críticas”, ya que durante este tiempo se desencadenó la crecida súbita que provocó las catastróficas inundaciones. “La CHJ no cumplió con su obligación de monitorizar y comunicar la evolución del caudal, dejando a Emergencias sin información clave para actuar a tiempo”, aseguran.
La Generalitat desmiente a Sánchez
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, defendió en su comparecencia que la CHJ mantuvo una comunicación constante con el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat durante el episodio. Además, afirmó que los avisos se emitieron correctamente y que los protocolos se cumplieron.
Sin embargo, la Generalitat ha desmentido estas afirmaciones con datos claros:
Ausencia de alertas: De los 198 correos electrónicos enviados por la CHJ, ninguno alertó del riesgo de desbordamiento del Barranco del Poyo.
Falta de comunicación directa: A pesar de la gravedad de la situación, no se realizaron llamadas telefónicas ni se notificaron los riesgos durante las horas críticas.
Presencia en el CECOPI: Aunque Sánchez afirmó que la CHJ estuvo presente desde el principio, se ha confirmado que su participación fue únicamente telemática y que no se mencionó el desbordamiento del Poyo durante la reunión.
La Generalitat también cuestiona la ausencia del jefe técnico de la CHJ, Manuel Torán, quien estaba de vacaciones fuera de España mientras ocurría el episodio.
Impacto en la población
Las consecuencias de este apagón informativo fueron devastadoras. Las inundaciones afectaron gravemente a viviendas, infraestructuras y cultivos en las localidades de Paiporta, Picanya y Torrent. Vecinos de estas zonas denuncian la falta de aviso previo, lo que les dejó sin tiempo para reaccionar ante la crecida del barranco.
Un residente de Picanya comentó: “Si hubiéramos tenido información sobre la subida del caudal, podríamos haber protegido nuestras cosas. Nos sentimos completamente abandonados”.
Exigencias de la Generalitat
La Generalitat ha instado al Gobierno central a abrir una investigación exhaustiva sobre la actuación de la CHJ durante este episodio. Además, exige medidas concretas para garantizar que situaciones similares no vuelvan a ocurrir:
Auditoría de los protocolos de la CHJ: Revisar los procedimientos de comunicación y respuesta ante emergencias.
Refuerzo de los sistemas de alerta: Mejorar la monitorización de los caudales en puntos críticos como el Barranco del Poyo.
Coordinación interadministrativa: Asegurar una comunicación fluida entre la CHJ y Emergencias de la Generalitat en tiempo real.
El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha sido contundente: “No vamos a permitir que la falta de coordinación y el incumplimiento de protocolos vuelvan a poner en peligro a la población valenciana. Vamos a exigir responsabilidades y a trabajar para que esto no se repita”.
"Evidencia de graves fallos"
El episodio de la DANA ha dejado lecciones amargas para la Comunitat Valenciana. La Generalitat asegura que la falta de información clave por parte de la CHJ durante las horas críticas puso en evidencia graves fallos en la gestión de la emergencia. Ahora, el Consell exige respuestas claras y acciones inmediatas para evitar que estos errores vuelvan a repetirse.