La Generalitat autoriza los 'mercadillos' alimentarios desde el 30 de abril
Ahora, son los Ayuntamientos quienes deben ser sensibles y asegurar que estos mercados se puedan realizar
LA UNIÓ de Llauradors informa que finalmente la Generalitat autoriza desde el próximo 30 de abril la celebración de los mercados no sedentarios de proximidad con productos de primera necesidad que se realizaban en muchas de nuestras localidades de la Comunitat Valenciana siempre y cuando cumplan una serie de condiciones mínimas, tal y como se había reclamado de forma insistente desde la declaración del estado de alarma por parte de esta organización agraria.
Una vez reguladas las condiciones de apertura de estos mercados por parte de la Generalitat, ahora corresponde a los Ayuntamientos de la Comunitat Valenciana decidir o no su celebración, por lo que LA UNIÓ insta a los mismos a tener sensibilidad y comenzar a celebrar los mismos cumpliendo las normas que se marcan desde la administración autonómica.
LA UNIÓ ha podido saber que se va a publicar ya de forma inminente una Resolución de la consellera de Salud Universal y Salud Pública; a propuesta de la Conselleria de Agricultura y de la Economía Sostenible, por la que se establecen las condiciones para la apertura de los mercados de venta no sedentaria de productos de primera necesidad en la Comunitat Valenciana, durante el estado de alarma provocado por COVID-19. Sólo se permitirán los puestos de venta de productos exclusivamente alimentarios y de primera necesidad, exluyendo hostelería y restauración. En la Resolución aprobada por la Generalitat se establecen una serie de requisitos para esos espacios tanto en lugares cubiertos como no cubiertos, como es la delimitación con vallas o cualquier otro medio para limitar los espacios y evitar aglomeraciones. También se especifican otra serie de medidas complementarias basadas en el distanciamiento social y otro tipo de medidas higiénicas.
LA UNIÓ ha venido trabajando en las últimas semanas con Delegación del Gobierno, Federación Valenciana de Municipios y Provincias y Presidencia de la Generalitat -a quienes agradece su colaboración e interés- para que esta regulación fuera factible con objeto de evitar más pérdidas a todas aquellas personas productoras que abastecen o venden en este tipo de mercados, y que no pueden acogerse a las medidas de compensación establecidas por el Gobierno como el cese de actividad porque tienen que continuar manteniendo el cultivo o los animales.
La organización agraria proponía retomar la actividad de estos mercados no sedentarios, y más teniendo en cuenta que buena parte de la venta corresponde a productos de la máxima proximidad. No tenía por tanto lógica su prohibición y dejar que los supermercados y grandes superficies sí pudieran abrir sin ningún tipo de problemas.