Gil: “En Gandia ya están curadas más de 160 personas de los 204 casos positivos de COVID-19”
La concejala de Sanidad gandiense, Liduvina Gil, afirma que hay alrededor de 40 contagios activos y 18 rastreadores en Gandia
Las concejalías de Sanidad en España se antojan vitales en el momento actual en el que nos encontramos, donde la pandemia del COVID-19 ha adquirido una presencia casi omnipresente en las vidas de los ciudadanos.
En Gandia, Liduvina Gil es la encargada del área sanitaria, por lo que ha tenido que hacer frente a los momentos más difíciles de la pandemia unos meses atrás y ha lidiado con un rebrote importante en medio de la temporada estival, llegándose a convertir en el mayor brote comunitario de la Comunitat Valenciana.
Liduvina Gil atiende a elperiodic.com ante una situación en la que afirma que, ahora mismo, “Gandia tiene el control gracias a los 18 rastreadores que trabajan día y noche investigando la procedencia de los contagios, lo que nos permite contener la propagación del virus y que no se siga expandiendo”.
Esta es la primera clave considerada por la concejala, que admite que disponer de 18 rastreadores “ha sido la manera de poder parar el brote de COVID-19, ya que es un número considerable para la población que tenemos si lo comparamos con los pocos que tienen en Barcelona y la dificultad que esto les supone, por ejemplo”.
La actualidad más inmediata pasa por el trabajo de estos rastreadores, aunque el dato positivo que da en exclusiva a este digital la responsable de Sanidad invita a la esperanza. “En Gandia ya se han curado del Coronavirus y tienen el alta más de 160 personas desde que empezó el brote, lo que supone que en la actualidad tenemos alrededor de 40 contagios activos de los 204 casos positivos en total”, afirma Gil.
Sigue su relato destacando que la recuperación de las personas infectadas “ha sido tan eficaz gracias al grandísimo trabajo realizado en el Hospital Francesc de Borja, ya que han mantenido la calma y la cautela para no verse en ningún momento cerca del colapso hospitalario”.
Gil afirma que “el trabajo de los sanitarios llega hasta el punto de mantener el control y el seguimiento durante un mínimo de dos semanas de todas las personas que se hayan sometido al test PCR, incluso sin dan negativo en la prueba”.
La responsable de Sanidad recuerda que “cuando hablamos del Departamento de Salud de Gandia, nos estamos refiriendo tanto a esta ciudad como al resto de municipios de la comarca de la Safor a los que atendemos en el Hospital Francesc de Borja”. Siguiendo esto, Gil hace referencia a un cambio en los contagios, ya que tras “estabilizar, controlar y contener la propagación del virus en Gandia, los casos positivos que nos iban llegando y se sumaban a la cifra total del Departamento lo hacían desde poblaciones de alrededor de la comarca de la Safor, donde se habían infectado”.
La concejala explica otra buena noticia, ya que “en estos momentos la cifra de nuevos contagios va sumando lentamente, ya que no estamos ni siquiera cerca de la treintena de casos aproximadamente que se acumulaban en el inicio del brote, sino que ahora van subiendo de 2 en 2 o de 4 en 4”. Es por esto por lo que Gandia y la comarca de la Safor se encuentran lejos de estar planteándose un posible confinamiento de la población o un retroceso en las fases de la desescalada, ya que insiste en que “no es necesario ahora mismo porque el momento actual está caracterizado por el control que tenemos sobre la pandemia y la contención de los infectados”.
Gil detalla que “en Gandia el Departamento de Serología del hospital trabaja sin descanso, con los sábados y domingos incluidos, de la misma manera que el resto de personal sanitario, que se ha quedado incluso sin las vacaciones que les tocaban para seguir haciendo pruebas PCR e investigar todos los entornos familiares, sociales y laborales de las personas que dan positivo en el virus”.
En cuanto a los test PCR que hoy en día se realizan en Gandia, la concejala echa la vista atrás y recuerda “los momentos iniciales de la pandemia en los que era imposible adquirir las pruebas porque el mercado estaba absolutamente saturado y me costaba muchísimo incluso poder comprar las mascarillas higiénicas para proteger a los médicos y sanitarios del hospital, con unos precios desorbitados y con una situación complicada”. En esta misma línea, Gil afirma que el Ayuntamiento de Gandia ha hecho un esfuerzo extra en materia económica para poder cubrir todas las necesidades derivadas de la pandemia, ya que las limpiezas para prevenir el virus han sido continuas en las zonas sanitarias y la compra de EPIS y mascarillas higiénicas para todos ellos han supuesto un importante desembolso debido a la situación en la que se encuentra el mercado más codiciado en estos momentos.
La concejala gandiense explica que, como es entendible, “el aumento de la población de Gandia se multiplica hasta por cuatro durante la temporada de verano, lo que significa que el número de casos positivos en la ciudad no ha ascendido a cifras desorbitadas teniendo en cuenta la población total en estos momentos”.
Gil detalla que “con el fin del verano la gente volverá a sus lugares de residencia, lo que no significa que baje el riesgo de contagios, sino que puede ser todo lo contrario”. Esta afirmación tiene su explicación, ya que “con la llegada del frío la gente se reúne en lugares cerrados, en el interior de los bares y en sitios que no tienen la ventilación propia del calor del verano, por lo que cabe recordar que el riesgo de contagio aumenta en este tipo de espacios y la gente debe tener mucho cuidado”.
Uno de los momentos de máxima complicación en el verano de Gandia llegó con el cierre del ocio nocturno en la ciudad y en la playa tras varios brotes de la enfermedad localizados en el interior de alguno de ellos. Gil es partidaria de tomar este tipo de decisiones en los momentos en los que las circunstancias lo requieren, por lo que la Conselleria de Sanitat decretó el cierre y “le dio la oportunidad a Gandia de seguir trabajando en la contención del virus evitando las aglomeraciones en estos lugares”. La concejala tiene claro que esto sirvió y se remite a los datos, ya que con el paso de los días los contagios fueron disminuyendo hasta llegar al momento de control y de contención actual; lo que produjo la consecuencia de poder reabrir todo el ocio nocturno, aunque extremando y controlando de manera estricta las medidas de seguridad.
La concejala pone el ojo también en las reuniones familiares, uno de los principales motivos por los que se transmite el virus. Es por esto por lo que Gil hace un llamamiento a la “responsabilidad de todos y a la concienciación de los más jóvenes para que no pongan en riesgo a sus familiares y personas mayores del entorno”.
Liduvina Gil quiere cerrar la entrevista recordando una vez más “la vital importancia que tienen las medidas de seguridad en la población, por lo que respetarlas estrictamente tanto con el uso de la mascarilla higiénica como con el distanciamiento social va a hacer que no volvamos a las peores situaciones de la pandemia”. Ha querido poner de manifiesto también que “todos los sanitarios se merecen, de verdad, que les demos un aplauso eterno por su gran labor para mantenernos seguros y garantizar nuestra atención médica ante el COVID-19”.