Los vecinos de Porfirio Pascual presentarán en septiembre sus sugerencias sobre el estudio previo de rehabilitación integral del barrio

El gobierno municipal sigue adelante con el proyecto de rehabilitación integral del barrio de Porfirio Pascual. El alcalde, Pablo Ruz; acompañado del concejal de Estrategia Municipal, Francisco Soler; además del concejal de Servicios Públicos, Claudio Guilabert y el gerente de la empresa municipal Pimesa, Antonio Martínez, se han reunido con representantes de vecinos del barrio para poner sobre la mesa las actuaciones que se van a llevar a cabo en los próximos meses.

En este encuentro se fijó la convocatoria de una nueva reunión con los vecinos el próximo mes de septiembre “para recoger sus planteamientos y sugerencias en relación con el estudio previo redactado por el equipo técnico”, ha subrayado Francisco Soler. La finalidad, según el concejal, es que en octubre “esté elaborado el anteproyecto que aprobaría el Consejo de PIMESA ese mismo mes y encargaría al equipo técnico la redacción del Proyecto Básico y de Ejecución de la Rehabilitación de los 18 edificios del barrio”. Además, el Consejo de Pimesa del mes de septiembre tiene previsto aprobar el pliego de condiciones para la licitación de la redacción del proyecto de reurbanización del barrio.

El proyecto de rehabilitación del barrio de Porfirio Pascual se justifica con el objetivo de alcanzar los retos marcados en materia de energía y clima, introduciendo actuaciones en relación con la ejecución de obras de mejora de eficiencia energética en los 18 edificios y 302 viviendas del barrio, lo que supone un ahorro superior al 60% en el consumo de energía.

La intervención tiene un coste total subvencionable de 13 millones de euros. De esa cantidad, se han aprobado unas ayudas de 9,9 millones, además de la aportación de 1,95 millones del Ayuntamiento de Elche y el resto, algo más de un millón, lo abonan los residentes del barrio.

La programación temporal se desarrollará en el periodo 2022-2026, estando prevista la finalización de las obras de rehabilitación edificatoria y de reurbanización como máximo el 30 de junio de 2026.