La Policía Local inicia la campaña navideña de controles de alcoholemia en distintos puntos de Elche
Se efectuarán en horario de tarde y noche, coincidiendo con los días de mayor concentración de comidas y cenas de empresa en lugares como la avenida de Candalix o la plaza de Barcelona, entre otros
En el último fin de semana, se comprobaron 85 vehículos y 42 personas, con tres denuncias administrativas por superar la tasa establecida, dos por carecer de permiso y otras dos por no tener seguro obligatorio e ITV
La Policía Local de Elche ha iniciado la campaña navideña de controles de alcoholemia en distintos puntos del municipio, como en años anteriores y debido a festivos que cuentan con un gran trasiego de vehículos y consumo de bebidas alcohólicas. Para ello, se han coordinado las patrullas policiales de los turnos ordinarios con las unidades de Policía Judicial de Tráfico (Atestados), del Grupo de Apoyo a Operaciones (GAO) y los motoristas.
Estos controles, en los que además se recordará a los automovilistas sobre la necesidad de hacer un consumo de alcohol y una conducción responsables, se efectuarán en horario de tarde y noche, coincidiendo con los días de mayor concentración de comidas y cenas de empresa en lugares como la avenida de Candalix o la plaza de Barcelona, entre otros. De este modo, si se da positivo en la prueba inicial, se someterá a la persona a otra que dilucide si su tasa de alcohol es constitutiva de infracción penal, establecida en 0,60 mg/l.
En estas primeras semanas del dispositivo, se han registrado diversas incidencias, destacando el intento de fuga de un vehículo al percatarse del control, dándose a la fuga en dirección prohibida por la calle Major de la Vila hasta su interceptación en Alfonso XII. En este caso, el resultado de la prueba de alcoholemia dio positivo. Y en el último fin de semana, se comprobaron 85 vehículos y 42 personas, con tres denuncias administrativas por superar la tasa establecida, dos por carecer de permiso y otras dos por no tener seguro obligatorio e ITV.
Los controles preventivos son, junto con la educación vial, uno de los instrumentos más eficaces para disuadir al conductor de ponerse al volante tras consumir alcohol o cualquier sustancia estupefaciente.