La “Sala Jove” de El Campello crece en usuarios año tras año

No es cierto eso de que los jóvenes solo buscan música estridente y “botellón” en su tiempo libre. Un informe elaborado por los técnicos del área de Juventud del Ayuntamiento de El Campello, que dirige Cristian Palomares, confirma categóricamente que cuando se les ofrece alternativas de ocio, se vuelcan en participar y proponen una ampliación de la oferta.

El mejor ejemplo de ello lo tenemos en la “Sala Jove”, que funciona en el Polideportivo Municipal, unas instalaciones que el año pasado disfrutaron un total de 1172 jóvenes, cuando en el año 2018 fueron 533. La sala se abre de septiembre a junio, coincidiendo con el curso escolar, de viernes a domingos, para jóvenes de 12 a 30 años. En periodos vacacionales fuera del verano, como Semana Santa y Navidad, se amplían los horarios para dar cobertura al mayor tiempo libre del que disponen los jóvenes.

El informe comparativo del número de asistentes en los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre entre los años 2018 y 2023, elaborado por los técnicos, destaca el “significativo aumento de usuarios” desde que en diciembre de 2021 se trasladó la Sala a su actual ubicación (anteriormente situada en la última planta del Centro Social). Otro motivo del aumento de usuarios es la incorporación de equipamientos materiales de última generación, como la Play5 y swich, con juegos muy actuales, o un billar.

Dicho material ha sido muy bien recibido por el público juvenil, ya no solo por la actualidad del material, sino porque han sido peticiones que ellos mismos han trasladado. “Ese es el camino: ofrecer lo que ellos y ellas quieren”, señala el concejal Cristian Palomares.

PUNTO DE ENCUENTRO

La Sala Jove tiene el fin de ser punto de encuentro, con el ocio educativo como máximo objetivo, ya que además de ser un espacio donde reunirse con los amigos, ofrece experiencias de crecimiento personal, al entenderse el ocio educativo como “instrumento para la inclusión, la igualdad, la participación y el crecimiento personal y comunitario, especialmente en la adolescencia y la juventud”, apuntan los técnicos.

El espacio cuenta con una zona de juegos como futbolín, ping-pong y el billar. Las tres actividades son muy atractivas para los jóvenes. También cuenta con consolas de última generación, juegos de mesa, y espacio para desarrollar la creatividad, ya que se dispone de un material para manualidades.

El espacio está siempre supervisado por una monitora que diseña, organiza y dinamiza competiciones, actividades y días especiales como Halloween, Navidad, Semana Santa o fiesta fin de Sala, además de hacer de intermediaria entre los jóvenes que acuden y la Concejalía, que de esta forma detecta las necesidades, propuestas e iniciativas que plantean los usuarios, “permitiéndonos programar actividades cubriendo sus gustos y necesidades”, dice el concejal.

Las tablas estadísticas revelan que en 2018 los usuarios fueron 533 jóvenes. Un vez superadas las restricciones impuestas por la pandemia sanitaria, en 2022 la asistencia total fue de 876 jóvenes, cifra que aumentó en 2023 hasta los 1.172.

La asistencia en los dos sexos sigue incrementando año tras año, aunque predominan los varones, por lo que ya se trabaja en plantear más alternativas para incentivas más a las chicas.

“Con el trabajo junto a ellos y ellas, nos damos cuenta que apostar por sus intereses y peticiones se traduce en que el servicio funcione de una manera mucho más óptima y vivencial, pues al final nos acercamos mucho más a sus necesidades, que como bien sabemos están en constante cambio”, añaden los técnicos, que constatan que la Sala Jove “se está convirtiendo en un punto de encuentro de los jóvenes del municipio, entrando en contacto con propuestas de ocio educativo y saludable y que ponen en valor para su desarrollo personal”.

“Pero no podemos quedarnos ahí. Tenemos que avanzar para que muchos más jóvenes utilicen las instalaciones”, asegura Cristian Palomares.

Por eso, a propuesta de los técnicos expertos, se trabaja por seguir planteando mensualmente actividades, competiciones y eventos que atraigan a la población, sobre todo, teniendo en cuenta sus gustos y escuchando sus intereses. Se hará hincapié en detectar los intereses del público femenino, para intentar captar más usuarias, así como en mejorar la difusión en redes sociales de todo aquello que se realiza en la Sala.

Naturalmente, siempre se tendrá en cuenta las peticiones de los jóvenes, como por ejemplo dotar de un espacio donde puedan tener snacks y bebidas, además de mejorar la temperatura de la Sala.

Otras propuestas que se estudian consisten en ofrecer la Sala Jove como centro para la realización de reuniones, talleres o ensayos para grupos de jóvenes organizados que pueden ser derivados de los centros educativos o que se creen por iniciativa propia en el municipio, y aprovechar la plaza de Saint Christol Lez Ales para organizar actividades al aire libre.