El Liceo Francés rememora el fin de la Segunda Guerra Mundial
El 7 de mayo de 1945 se firmaron las actas de capitulación alemanas que dieron fin a la Segunda Guerra Mundial en Europa. El texto fue firmado en Karishorst (Berlín) por representantes de las tres fuerzas armadas las aliadas, actuando los altos cargos supremos soviético, estadounidense y francés de observadores.
En conmemoración, este día de la victoria se recuerda en muchos países, y no son pocas las instituciones que rememoran el fin de la guerra más sangrienta que ha padecido la humanidad.
Entre ellas está el Liceo Francés de El Campello, que hoy ha celebrado un emotivo acto que ha servido de recordatorio y de mensaje inequívoco al alumnado, para que jamás vuelva a ocurrir nada semejante. El director del centro, Michel Villegas, ha transmitido un discurso emotivo y didáctico al mismo tiempo, en el que ha señalado que aquella firma puso punto y final a una ideología antisemita y racista que provocó millones de muertes a través de una verdadera “industria de la muerte” que tuvo su máxima expresión en los campos de exterminio cuyo objetivo era la desaparición completa del pueblo judío.
Profesorado, alumnado, excombatientes, cónsul honorario de Francia en Alicante, militares y autoridades civiles han asistido al acto. Entre ellas estaba el alcalde Juanjo Berenguer, “firme convencido de la máxima que indica que quien no conoce y recuerda el pasado está condenado a repetirlo”.
Acompañado de la concejala de Educación, Dorian Gomis, Berenguer ha señalado que “hoy estamos inmersos en un conflicto bélico que no sabemos cómo acabará, y que ya suma miles de muertos y amplias zonas geográficas destruidas por completo”, ha enfatizado el alcalde, para quien “en eso se resume una guerra: muerte y destrucción de la que luego se tarda décadas en recuperarse”.
El primer edil ha valorado la iniciativa que cada año tiene el Liceo de rememorar las consecuencias de las guerras que tantas desgracias aportan. ·Es necesario que las nuevas generaciones conozcan lo que pasó… hasta dónde es capaz de llegar el ser humano más destructivo, para que jamás vuelva a ocurrir”.