Desalojan una fiesta en una finca de El Campello con casi un centenar de asistentes
El promotor de la fiesta ilegal cobraba entre 30 y 50 euros por asistir al evento
Nueva fiesta ilegal en la Comunitat Valenciana. El pasado domingo la Guardia Civil de El Campello desalojó una finca donde se estaba celebrando una fiesta con alrededor de 90 invitados, todos ellos incumpliendo las actuales medidas de seguridad sanitaria. Los asistentes han sido denunciados por infringir la normativa que regula la situación sanitaria actual.
El pasado 11 de octubre, la Guardia Civil de El Campello tuvo conocimiento de la celebración de una fiesta posiblemente ilegal en una finca de la zona. Al parecer, podían estar convocadas unas 200 personas, a unas instalaciones que no cuentan con ninguna clase de permiso para la celebración de eventos. Tras contactar con el propietario de la finca, éste se negaba a colaborar con los agentes.
Tras tener conocimiento, se estableció un dispositivo de identificación de vehículos y ocupantes en las inmediaciones, pudiendo comprobar que había una treintena de vehículos estacionados en los alrededores del lugar en el que supuestamente se estaba celebrando la reunión.
Una vez establecido un primer contacto con algunos de los asistentes, se verificó que llevaban allí desde el día anterior y que estaba programada la duración hasta el día siguiente. La Guardia Civil procedió al desalojo de los asistentes.
Amplia franja de edad
Se ha identificado a un total de 89 personas de edades comprendidas entre 25 y 45 años, que venían desde las provincias de Almería y Murcia. Todos ellos han sido denunciados por infringir la normativa que regula las medidas sanitarias para la prevención del Covid19. Así mismo se ha denunciado a varios asistentes por tenencia y consumo de sustancia estupefacientes, y por portar armas blancas en espacios públicos.
La Guardia Civil está llevando a cabo una investigación para identificar al promotor de la fiesta. Se ha podido constatar que vendían entradas desde 30 y hasta 50 euros. La fiesta se promocionaba a través de redes sociales, dónde se advertía que el lugar del evento era secreto.
El propietario de la finca ya ha sido denunciado en ocasiones anteriores por la celebración de eventos sin la pertinente autorización.