365 días en Ucrania: Los voluntarios de una organización valenciana siguen trabajando un año después de la guerra
La fundación Juntos por la Vida lleva ahora a Ucrania el primer punto de energía móvil al país con el que ofrecerá país acceso a internet por satélite
La fundación valenciana Juntos por la Vida lleva 24 años prestando ayuda humanitaria en Ucrania y fue la primera organización de la Comunitat en trasladarse al país cuando comenzó la invasión rusa.
Ahora, se acaba de cumplir un año desde el estallido de la guerra, y la fundación insiste en que el frío y el aislamiento son sus grandes preocupaciones, por ello están trabajando para combatirlo. Por el momento, han enviado una furgoneta que busca ser el primer punto móvil de energía en el país con acceso a internet por satélite, puntos de carga de móvil, dos puntos de calefacción y bebidas calientes. Esta se moverá por los barrios más periféricos de las ciudades de Irpín y Bucha, dando servicio y conexión a personas que sufren del aislamiento, las bajas temperaturas y los constantes cortes de electricidad.
Además, han repartido más de 300 estufas de leña para familias, y durante el viaje de estos días se entregarán más. También se han enviado 90 grupos electrógenos para familias y algunos hospitales y centros públicos.
No obstante, la presidenta de Juntos Por la Vida, Clara Arnal, afirma que “el balance es negativo porque siguen los ataques, sigue el miedo, siguen las amenazas, no parece que vaya a terminar. Y eso nos entristece porque estamos viendo como Ucrania, que es un país que estaba creciendo y desarollándose, ahora se está destruyendo, y vemos como la gente pierde la ilusión y se normaliza una realidad que es muy cruel, y no tendría que ser cotidiana para nadie”.
Un año en Ucrania
Por otro lado, desde el año pasado han trasladado a más de 3.200 personas a la Comunitat Valenciana, en su mayoría madres con hijos, que han sido acogidos por familias de la Comunitat, o en otros casos también se ha facilitado otro tipo de alojamiento. El proceso ha sido posible gracias a las 900 familias de acogida voluntarias y a los más de 400 voluntarios en Ucrania, frontera y España. Al mismo tiempo, han ofrecido acompañamiento y seguimiento psicosocial a los que lo han necesitado y han repartido más de 100 toneladas de ayuda humanitaria que ha llegado directamente a las personas más vulnerables de zonas conflictivas.
Finalmente, la ONG valenciana durante el último año también ha montado cuatro alojamientos seguros en Ucrania y Polonia que han albergado a más de 500 personas a ambos lados de la frontera. Dos de esos alojamientos permanecen activos, un pequeño centro de recepción y acogida de refugiados y casa de voluntarios en Przemysl, Polonia, y uno para 200 personas en Ucrania.