El Hospital de Dénia emplea una revolucionaria técnica para corregir una afección crónica de la mano
Las infiltraciones sustituyen a la cirugía y en dos sesiones el paciente recupera la movilidad de los dedos
El centro sanitario utiliza esta técnica con resultados excelentes en más de 60 pacientes
El Hospital Marina Salud de Dénia se ha convertido en uno de los primeros hospitales de España en infiltrar enzima colagenasa para el tratamiento de la contractura de Dupuytren.
La enfermedad de Dupuytren es una afección crónica de la mano que provoca la flexión progresiva y permanente de algunos dedos, sobre todo el meñique y el anular, hacia la palma de la mano y restringe la función de la misma afectando actividades de la vida cotidiana como conducir, practicar deporte o lavarse la cara.
La zona retraída es la fascia, una membrana conjuntiva y fibrosa que se localiza por debajo de la piel y cuya contractura se manifiesta inicialmente en forma de nódulos y cuerdas impiden la movilidad normal de los dedos.
Mayor prevalencia en el norte de Europa
Esta enfermedad, que padece un 4% de la población de España, a un 6% en Reino Unido y a un 5% en Alemania, afecta esencialmente a hombres de más de 50 años mientras que las mujeres se ven afectadas en edades más avanzadas y con menor intensidad. En general compromete ambas manos, aunque suele manifestarse primero en una mano, sobre todo en la derecha.
La Unidad de Cirugía de Miembro Superior del Hospital Marina Salud de Dénia, al frente de la cual se encuentra el doctor Rafael Sanjuan, es uno de los primeros hospitales en España formados en la técnica de infiltración de colagenasa de Clostridium histolyticum, que ha comenzado a aplicarla con resultados excelentes.
El abordaje del paciente se realiza en dos sesiones, distribuidas en dos jornadas consecutivas. El primer día se procede a la infiltración de la colagenasa en tres puntos de la cuerda afectada: la contractura metacarpofalángica -nudillo- o la interfalángica.
La colagenasa es una enzima que destruye únicamente el colágeno -material base del tejido fibroso-. A las 24 horas se procede al estiramiento del dedo y la rotura manual de la cuerda, tras la administración de anestesia local. El paciente está ya en condiciones de colaborar y comenzar a extender y cerrar la mano completamente.
Este tipo de técnica, que se realiza en un quirófano de Cirugía Mayor Ambulatoria -CMA- sustituye a la cirugía tradicional, muy agresiva debido a las complejas incisiones que se deben realizar en la palma de la mano que requieren múltiples curas, tratamiento fisioterápico por un tiempo prolongado y están asociadas a una alta incidencia de complicaciones.