CSI·F insta a Educación a que refuerce plantillas y mejore los medios de los docentes para reducir los deberes
El sindicato CSI·F insta a Conselleria de Educación a implicarse ante el conflicto suscitado por la huelga de deberes por parte de los alumnos convocada por algunos colectivos de padres. La central sindical considera que la Administración autonómica tiene parte de responsabilidad en esta situación por la escasez de plantillas y medios que proporciona a los centros, por exigir a los docentes que cumplan un programa lectivo pese a esas carencias y por no respaldar su autonomía pedagógica ante esta huelga.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) explica que las elevadas ratios en las aulas impiden que los docentes puedan desarrollar una atención individualizada a los alumnos. También obligan, en clases con 35 estudiantes en Secundaria o hasta 42 en Bachillerato, a dedicar casi la mitad de la sesión a cuestiones de orden o de organización que no responden estrictamente a la impartición de la asignatura correspondiente.
CSI·F señala que una disminución de ratios resulta fundamental para que el docente pueda dedicar más tiempo a las singularidades de cada alumno y avanzar en su materia. En la actualidad parte de los deberes que ponen los docentes obedecen a la necesidad de progresar en la asignatura para alcanzar, al final de curso, el nivel marcado por la Administración.
La central sindical subraya que Conselleria también podría contribuir a reducir el trabajo de los alumnos en el hogar si incrementara las plantillas de personal docente de refuerzo, dedicado a ayudar en el centro a estudiantes que no pueden seguir el ritmo de sus compañeros. Más docentes podrían prestar una atención individualizada en mayor medida y, por tanto, abarcar más materia y tener que llevarse menos a casa los alumnos.
El sindicato lamenta la falta de apoyo público de Conselleria de Educación a sus profesionales y a la autonomía pedagógica del docente ante la situación suscitada por la huelga convocada por algunas asociaciones de padres. Esta carencia de respaldo contrasta con la mayor exigencia social a que los alumnos tengan mejor preparación.
"Los docentes sufren la presión de la Administración cuando les exige más formación y tareas burocráticas y, a la vez, apenas les proporciona medios y los deja desamparados ante circunstancias como la huelga de deberes", explica CSI·F, que recuerda, respecto a esta huelga, que "los docentes son los profesionales cualificados para adoptar medidas docentes, y no terceras personas sin la preparación acreditada ni el conocimiento pedagógico de los docentes".