El Corredor Mediterráneo avanza a pasos agigantados: así adaptan la estación de València-La Font de Sant Lluís
La instalación del primer desvío marca un hito en las obras
Las obras para adaptar la estación de Valencia-La Font de Sant Lluís al ancho internacional continúan avanzando a buen ritmo. Este proyecto, clave para la conexión de la ciudad con el Corredor Mediterráneo, ha experimentado un nuevo hito con la instalación del primer desvío mixto, uno de los doce previstos en esta fase de la obra.
Esta segunda fase del proyecto, que se divide en ocho bloques, abarca una amplia gama de actuaciones que incluyen la adaptación de la cabecera del lado Alboraia de la estación. Entre las tareas más destacadas se encuentran:
- Electrificación: Se está llevando a cabo la modernización y adaptación de la infraestructura eléctrica para permitir la circulación de trenes de ancho internacional.
- Instalación de desvíos: Se están instalando 12 nuevos desvíos mixtos, que permitirán el paso de trenes tanto de ancho ibérico como de ancho internacional, y se están levantando 7 desvíos actuales que ya no serán necesarios.
- Trabajos en el enclavamiento: Se están realizando modificaciones en el sistema de control, mando y señalización para adaptarlo a la nueva configuración de la estación.
- Obras complementarias: Se han ejecutado trabajos previos como la instalación de canalizaciones, cruces de vía y tendido de cableado, así como el desmontaje de la catenaria en algunas vías de la terminal.
Un proyecto de gran envergadura
Este complejo proyecto, que incluye además la construcción de una terminal logística, los accesos a Port de València y la adaptación de los talleres de Renfe Integria, tiene como objetivo mejorar la capacidad y la eficiencia del transporte ferroviario en la región, facilitando la conexión con el resto de Europa.
"Con estas obras estamos dando un paso fundamental hacia la modernización de nuestras infraestructuras ferroviarias y la integración de Valencia en la red transeuropea de transporte", ha destacado [nombre del responsable del proyecto o autoridad competente]. "La adaptación al ancho internacional nos permitirá aumentar la capacidad de transporte de mercancías y pasajeros, y reducir los tiempos de viaje".
Beneficios para la ciudad y la región
La finalización de estas obras tendrá un impacto positivo en la economía de la región, al facilitar el transporte de mercancías y mejorar la conectividad de la ciudad. Además, contribuirá a reducir las emisiones de CO2 y a fomentar un transporte más sostenible.