Conmoción en la hostelería valenciana: “Estamos hundidos, ya no nos quedan fuerzas para seguir luchando”

“Mañana día 20 y el 30 de este mes tenemos que pagar impuestos, ¿me quiere decir a mi el president cómo vamos a pagarlos?”. Es la pregunta que se hace Manuel Espinar, presidente de CONHOSTUR y la Federación de Hostelería de Valencia, tras el anuncio del cierre total de la hostelería en la Comunitat Valenciana desde este jueves.

El anuncio ha caído como un jarro de agua fría y ha sido lo que le faltaba a un sector que ha visto como uno de cada tres negocios ha cerrado en 2020: “Estamos hundidos, no nos quedan energías ni moralmente ni financieramente”, se muestra tajante Espinar quien lamenta, además, que muchos hosteleros van a tirar definitivamente la toalla a pesar de que detrás de las persianas hay segundas y terceras generaciones que llevan mucha historia detrás.

Para Manuel Espinar el anuncio no tiene sentido ya que ayer mismo el president descartaba el cierre total de la hostelería: “Se ha mezclado política con hostelería, los políticos han conseguido que mañana haya más familias arruinadas”. Denuncian que han sido moneda de cambio y felicitan a todos los políticos que les querían cerrar: "Mañana habrá más familias arruinadas, eso sí el Botánico estará más unido que nunca”.

Desde la Federación de Hostelería de Valencia explican que según el último estudio del ministerio de Sanidad sobre incidencia de coronavirus, menos del 2,3% de los contagios se producen en la hostelería: “Tenemos ejemplos de localidades valencianas cerradas donde no había hostelería y han seguido subiendo los contagios”, denuncia Espinar.

Piden desde la Federación que las ayudas han de cubrir los costes fijos que tienen los negocios, como ya sucede en otros países de Europa.

Por su parte, desde la Coordinadora Empresarial del Ocio y la Hostelería en la Comunitat Valenciana reconocen que los datos son los que son y, ante la situación sanitaria tan delicada que estamos atravesando, hay que tomar medidas, “pero que deben pasar por cerrar toda la actividad económica comercial no esencial”.

“De lo contrario, -denuncian- estamos hablando de una medida drástica arbitraria, injusta y que focaliza, de nuevo, el problema de los aumentos de la curva de contagios en la hostelería.  Una decisión que evidencia que se les está yendo de las manos la gestión política de la crisis sanitaria”.

Acusan al Consell de dar ‘palos de ciego’ castigando, de nuevo, a bares, restaurantes, cafeterías y locales de ocio para ganar tiempo: “No pueden haber más demoras ni letra pequeña en el plan de ayudas para al sector, porque estamos de nuevo en la misma situación que en marzo, pero con la diferencia que, ahora, partimos de una facturación de menos cero”.

Desde SOS Hostelería, su presidente Fidel Molina, ha solicitado un plan de acción urgente de rescate de la hostelería valenciana que incluya, entre otras medidas:

• La suspensión del pago del último trimestre de IRPF correspondiente a 2020 que debe hacerse efectivo mañana a la Agencia Tributaria.
• La suspensión del pago del último trimestre de IVA y cuotas de la Seguridad Social que deben hacerse efectivos el día 30 de enero.
• La suspensión de todos los impuestos y tasas municipales en 2021 hasta que la pandemia no se dé por finalizada y la actividad económica no recupere su total normalidad.
• La suspensión de los pagos de servicios básicos de los establecimientos de hostelería como agua, luz y gas, haciéndose cargo el ICO y el Institut Valencià de Finances del pago de estos recibos dado que los mismos, en más de un 50%, son impuestos devengados por la propia administración.
• La paralización de cualquier normativa que afecte negativamente al sector de la hostelería como, por ejemplo, la Ley del Juego.