La Comunitat Valenciana se prepara para cumplir con la nueva norma europea anticontaminación con nuevas estaciones de medición
La consellera de Medio Ambiente destaca la inversión del Consell para renovar los equipos de la Red de Vigilancia y Control de la Contaminación Atmosférica
La consellera de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, Salomé Pradas, ha asegurado que la Comunitat Valenciana está “preparada” para cumplir con la nueva Directiva Europea sobre Calidad del Aire que establece límites más estrictos para la concentración de contaminantes como el dióxido de nitrógeno, el dióxido de azufre y las partículas en suspensión. Tal y como ha explicado la consellera, todo ello requiere “medidas adicionales por parte de los poderes públicos para reducir las emisiones de fuentes como el transporte, la industria y la agricultura”.
Salomé Pradas se ha expresado en estos términos durante su intervención en la clausura del Seminario sobre la Calidad del Aire “Millán Millán”, que se ha celebrado durante los últimos dos días en Benicàssim.
La consellera ha explicado que, en la Comunitat Valenciana, la vigilancia y control de la calidad del aire se lleva a cabo a través de la Red de Vigilancia y Control de la Contaminación Atmosférica que está formada actualmente por 64 puntos de medición, repartidos en las tres provincias, junto a una estación de vigilancia perteneciente a la Red Nacional de Vigilancia de Contaminación Atmosférica de Fondo. Estas dotaciones se complementan con 14 estaciones de control de actividades específicas como la industrial o la portuaria.
Pradas ha revelado que, según estos registros, la evaluación de la calidad del aire en la Comunitat Valenciana en el año 2023 ha sido satisfactoria. No obstante, a pesar de estos resultados, se incorporarán nuevas estaciones para cumplir con la normativa europea y, por otra parte, se renovarán equipos.
En este sentido, Salomé Pradas ha detallado que la Generalitat ha destinado más de 600.000 euros a la compra de nuevo equipamiento para la Red Valenciana de Vigilancia y Control de la Contaminación Atmosférica para las nuevas estaciones de Silla, Llíria, Chelva, Sueca, Denia, Alzira, Elx, Gandía, y actualización de las estaciones de los municipios de Borriana, Sagunt, Castellón, Alicante y València.
“Con todo ello -ha dicho- cumplimos con los requisitos normativos actuales y nuestra red mejora la capacidad de medir, en continuo, los niveles de los principales contaminantes, registrando diariamente alrededor de 90.000 datos que se convierten en 42 millones al cabo del año”. Esta enorme cantidad de información es procesada para evaluar la calidad del aire y, a su vez, se pone a disposición de la ciudadanía no sólo en internet, sino también mediante la aplicación móvil GVA-Aire.
La consellera también se ha referido al Plan Nacional de Ozono impulsado por el Ministerio de Transición Ecológica en el que la Conselleria de Medio Ambiente participa para aportar la experiencia de más de 20 años en el programa de vigilancia de los niveles de concentración de ozono troposférico, que fue uno de los campos de trabajo del profesor Millán Millán, fundador y primer director del Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo. Al respecto, Salomé Pradas ha anunciado que, a partir de las conclusiones de este Plan Nacional, “se desarrollará un plan autonómico que complementará las medidas que ya se vienen adoptando para la reducción de precursores de ozono”.
Para Salomé Pradas, “la calidad del aire es, sin duda, uno de los principales desafíos sanitarios a nivel mundial”, por lo que el Consell que preside Carlos Mazón “está preparado para asumir este reto con la misma convicción que aplicamos a todas nuestras políticas ambientales y que se rige por el sentido común para que la necesaria transición ecológica no suponga la pérdida de nuestra competitividad”, ha concluido la consellera de Medio Ambiente.